La Sangrada Familia
Papa Familiar: La Familia,
la Propiedad Privada y el Estado (Vaticano)
Sugerencias (no
pedidas) para un Papa Familiar
Yo no te espero "Jo no t'espere"
Fernando Buen Abad Domínguez
Rebelión/Brriodecarmen/Fundación Federico Engels
Respetuosamente Señor Papa Joseph Alois Ratzinger:
Si llegara usted a hablar a miles de
familias en vivo y a todo color, si se pusieran a modo los oídos y los ojos,
si fuese verdad que lo escuchan... no sería, acaso, mala idea abordar los
temas verdaderos, los del diario, los que se silencian o se esconden. No sería
mala idea, ni mala oportunidad, aprovecharse de esas horas para sentar las
bases de la verdad, ahuyentar las mentiras, las hipocresías y las
degeneraciones que amenazan e infestan a las familias desde hace ya muchos, y
decadentes, años. Si encuentra usted reunido a un conglomerado "defensor de la
familia" así en abstracto y de manera a-crítica y conservadurista, diga que es
urgente una transformación absoluta, un blanqueo de la historia negra y una
revolución de la familia. Dígales que nadie se cree el cuento de la defensa de
los valores familiares en sociedades basadas en el hurto, el saqueo y la
explotación de los trabajadores campesinos y obreros. Sin ironías, sin
burlas... que reine el respeto. Vea usted, aquí hay unas sugerencias (no
pedidas)
Hay familias, millones de familias, que reproducen en su seno las relaciones
obrero-patronales. Son familias atolondradas con la idea boba de que la
familia es una "institución" una "célula" del sistema donde se incuban los
formatos del poder, donde se entrena el autoritarismo y la mansedumbre
impunemente, como si fuese un logro moral, donde los mandos son privilegio de
"los mayores" cuyo merito, casi exclusivamente, radica en cumplir años.
Olvidaron que son personas.
Creen que son una "institución" legalizada y santificada, que ya no son
personas, camaradas, amigos... para volverse una abstracción jurídica que
suprime la noción de lucha de clases, trabajo, solidaridad humana... creen,
esas familias, que son un "micro clima" del poder donde las "leyes" se imponen
dictatorialmente, donde no se elige los representantes, no se modifican los
estatutos y nada se mueve. No pocos hacen el amor (perdón por el eufemismo)
institucionalmente.
Muchas familias exhiben con toda impunidad su orgullo patriarcal. "Aquí mando
yo" suele decirse al calor de infinidad de controversias... "mientras yo ponga
el dinero de esta casa, yo mando"... el orden y el control del dinero como
fuente privilegiada de gobierno doméstico. Hay millones de familias que
reproducen conductas absolutamente odiosas, se sienten obligadas a estar
unidas, por el hecho absurdo de la consanguinidad, se sienten obligados a
prodigarse gestos de afecto por el hecho absurdo de llevar apellidos
iguales... se sienten obligados a la "unidad" por el hecho desopilante de
conservar las "tradiciones" burguesas. De la coincidencia solidaria para una
vida digna de todos, la solidaridad social contra las diferencias económicas y
las discriminaciones de todo tipo, no se habla. Parecería tema tabú de ciertas
familias.
Hay familias donde el terrorismo paternal se expresa con golpes, humillaciones
y persecución. Diurna y nocturna. Hay familias donde se practica la
prostitución y el robo en todas las escalas y bajo todas sus modalidades. Hay
familias donde se ejercita la violencia y la tortura sistemáticamente. Hay
familias corruptas por definición, miserables y cínicas, que viven de explotar
a los trabajadores, incluida la "servidumbre", contratan personas para
limpiar, ordenar, vigilar y hasta para entretener a los nenes. A esos
trabajadores se les paga mal, se los trata mal se los usa como campo de
entrenamiento para donde es una mérito de clase maltratar a los pobres... y la
familia entera aprende en su cotidianidad sagrada cómo se ejerce el
autoritarismo contra los débiles. La balanza inclinada a favor del que tiene
el palo y el dinero. ¿Es esta una linda escuela? ¿No? ¿Son estos unos lindos
valores familiares?
Señor Papa: Hay familias de dictadores, torturadores, explotadores,
defraudadores... hay familias de traidores, de saqueadores, de mercachifles,
de mentirosos, de canallas, de usurpadores... familias que reproducen, de una
generación a otra, la barbarie y la degeneración. ¿Quiere usted nombres?
(Sálvense los homónimos salvables) Haga usted una crítica profunda. Denuncie
cómo se traicionan los vínculos filiales, denuncie usted sin moralinas etéreas
la cornamentación desaforada entre maridos y esposas, entre socios y colegas,
denuncie usted la soledad, el abandono y los insultos. Denuncie la degradación
y la drogadicción deprimentes y devastadoras en el seno mismo de las familias
más infestadas por la hipocresía y la degeneración. Seguramente tendrá usted a
la vista a muchas familias de esas, le besarán la mano, le pedirán su
bendición y volverán a su rutina de falsedades y parasitismo, esta vez
sintiéndose tocados por Dios, o su representante terráqueo.
Señor Papa: Haga usted una denuncia mundial y profunda, haga lo que debe
hacer, diga que la familia en garras del capitalismo ha servido frecuentemente
para desfondar la solidaridad humana, diga que la familia burguesa ha
fracasado, que el mundo está como está, entre otras cosas, porque en las
familias, intoxicadas con valores burgueses, se siembra y cultiva la miseria y
la barbarie, que se trata de un gran fracaso político, que el concepto de
familia burguesa es hoy por hoy una mentira descomunal, una maquinaria de
consumo y consumismo, un formato de control ideológico represivo y una
"institución" doctrinaria y enferma que frena todo desarrollo... que es capaz,
casi únicamente, de reproducir degeneración e hijos. Sea señor Papa inclemente
y agudo. No tolere que los vínculos solidarios entre humanos se formateen con
palabrería y demagogia familiarista y burguesa. Permita que las familias
aludidas interroguen su sinceridad y su honestidad, que lo hagan en público...
verá qué espectáculo.
Dígales que hay posibilidades distintas para familias distintas, esta vez bajo
el derecho legítimo de elegir. Dígales que hay formas de relación basadas en
la honestidad emocional, sexual, política... dígales que, les guste o no, la
historia pasara sobre los retrógrados y hará nacer formas nuevas de familia y
de sociedad. Sin estado y sin propiedad privada. Si hay quien se escude en el
pretexto de "la defensa de los valores de la familia", que sincere la realidad
económica y moral de todas las familias. Pobres o ricas.
Señor Papa: Diga usted, por favor, a todos esos que lo escuchan, con pantallas
carísimas y gastos descomunales, que ninguna "familia" puede andar feliz por
la vida mientras la mayoría de las familias, en todo el mundo, vivan en la
miseria, la persecución y el saqueo. Diga usted por favor, que nadie puede
sentirse satisfecho en este planeta, mientras millones de familias viven bajo
el bombardeo de los misiles, (como en Irak), o bajo el bombardeo ideológico
(como el de las televisoras burguesas globalizadas), bajo el bombardeo
represivo como en Oaxaca... bajo el bombardeo del hambre (por el saqueo de
las materias primas)... ni bajo el bombardeo del hambre (por la explotación
degenerada) que consecuentan muchos empresarios de familias prestigiosas y
muchos políticos de familias adineradas. Dígales, no desaproveche la
oportunidad, que no podemos estar orgullosos de esta civilización cuando su
preocupación mayor es esconder a los muertos que genera su desigualdad y sus
injusticias. Pregúnteles a Rita en Valencia, a Calderón en México... qué pasa
con las víctimas de la guerra desalmada contra el proletariado. A ver con qué
le salen, pegúnteles (de lejos) porque en un descuido le pintan la sotana de
gris. Gris Rita, gris Valencia. De negro policía como en Oaxaca.
Señor Papa, no desperdicie la oportunidad, si lo escuchan todos los que "aman
a la familia" como dicen, desde sus casas, aviones, automóviles, empresas,
chambas... estarán dadas las condiciones objetivas y subjetivas para abordar
La Verdad del presente, para que sea usted escuchado en serioi. No les hable
cosas abstractas, no les hable de cosas extraterrestres, no se remita al
pasado remoto de las memorias metafísicas, no se distraiga con la Sagrada
Familia ni con Leonardo da Vinci. Valla el meollo, mire usted: " En los
países en desarrollo, alrededor de las tres cuartas partes de las familias
afectadas por la pobreza y el hambre crónica viven en el medio rural y sus
medios de subsistencia dependen de manera directa o indirecta de la
agricultura o la pesca" . Señor Papa: "Sólo en África, se estima que
hay alrededor de 70 millones de tales familias de agricultores" . Digales
señor Papa que los niños del mundo son hijos de todos: "El hambre y la
malnutrición matan a seis millones de niños al año, una cifra equivalente a
toda la población en edad preescolar de Japón, según alertó hoy la
Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) de la ONU con motivo
de la presentación de su último informe anual 'El estado de la inseguridad
alimentaria en el mundo"
Señor Papa: Dígales que la miseria no se
arregla con limosnas. Que vivimos una parte cruenta y desgarradora de la lucha
de clases. Que de nada (o poco) sirven las "Fundaciones Caritativas" ni las
"ayudas humanitarias" organizadas con dispendio y ostentación como lavaderos
de conciencias (y de dólares)... de nada sirve eso si no se derrota la
explotación capitalista, el saqueo de materia prima y el trabajo a precios
ridículos. Hágalo por las familias que, a estas horas, padecen las
humillaciones más brutales en Atenco, México, en Guantanamo... Hágalo porque a
estas horas miles de familias no logran sanar las heridas brutales desde que
desaparecieron 30 mil personas en Argentina. Hágalo por los caídos en Faluya,
por las familias mancilladas en Nueva Orleáns, por las familias enteras que
emigran de África, por las familias hacinadas en los Ángeles, Houston,
Chicago... la cuenta es inmensa y es horrorosa. Es una monstruosidad. Si usted
no se atreve a decir las verdades cometerá un pecado universal y terminará
siendo cómplice de la barbarie. Elija bien. Y si no escuchan... no se asombre.
Acaso la burguesía sea una gran experta en fortalecer la sordera... y la
ceguera. ¿No?
Respetuosamente
(no sin miedo a la acción represiva de
algunos grupos nazifascistas que juran tener la protección del la
Iglesia Católica)
!Alto al rebrote nazifascista, muy "amante de la familia" (burguesa) en todo
el mundo!
Dr. Fernando Buen Abad Domínguez
Tomado en junio 2005 de:
http://www.idpproject.org/images/website_maps/IDP_worldmap.gif)
Figura 1. Cifras de desplazados
internos a nivel mundial