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El yo y su adaptación a la realidad.
El yo dentro de nuestra estructura psíquica, es la instancia o parte de nuestro psiquismo que comunica los procesos internos (psíquicos, afectivos, cognitivos, de acción) con el mundo externo, debe mediatizar las necesidades de otras instancias psíquicas como el ello y el Super Yo, cada una con presiones y demandas diferentes y resolver al mismo tiempo aquellas exigencias de adaptación que provienen del ambiente que rodea al sujeto.
Gracias a las distintas funciones que conforman el accionar de nuestro Yo, el individuo puede relacionarse en forma positiva con el ambiente. Entendemos por esto, la capacidad para resolver por un lado como mencionamos las distintas exigencias internas y externas a las que se ve sometido, y por otro la resolución de situaciones problema, que surgen ante situaciones de tensión, frustración, dificultad para satisfacer las propias necesidades, adversidades vitales tales como la enfermedad, los problemas laborales, económicos o interpersonales que el diario vivir trae aparejados. Por otro lado debemos sumar también las crisis o desafíos vitales de adaptación que cada ciclo de la vida activa. Así la niñez, la adolescencia, la adultez, la vejez, traen situaciones problema, desafíos, obstáculos que cada individuo deberá resolver.
Esto nos permite entender también porque al evaluar una escritura o algún otro test Proyectivo como en un tratamiento psicológico es una tarea primordial evaluar en nuestro analizado, el grado de fortaleza o integridad del Yo.
El interrogante ahora es ¿de que manera, y que recursos propios deberá tener el Yo para enfrentar todo este conjunto de factores que hemos mencionado?
La primera respuesta es para poder desenvolverse con eficacia y eficiencia en cuanto a con que medios, ello nos lleva al punto central de nuestro material de hoy.
Para resolver los temas y conflictos tanto internos como externos el yo debe tener bien desarrolladas sus funciones principales.
Esto nos lleva ahora a entrar en una de las funciones importantes a las que el yo de un sujeto deberá apelar: La adaptación a la realidad
Sin ella el individuo podría quedar o bien marginado o rechazado o aislado de su contexto.
Entonces desarrollaremos un breve concepto de estas dos funciones que hemos seleccionado hoy y luego algunos indicadores gráficos mas asociados a ellas.
CONCEPTO DE ADAPTACIÓN A LA REALIDAD :
Se relaciona con el grado y nivel de ajuste del sujeto al contexto en donde vive, lo cual implica por un lado estar en relación con las pautas culturales y sociales, pero por otro que parte de la individualidad y creatividad también pueda estar en juego en esa adaptación. Adaptarse no es solo estar en concordancia con el afuera (mundo externo, laboral, social, profesional, educacional) o lo que este espera de nosotros, sino también que las propias necesidades individuales puedan satisfacerse y buscar expresión. Adaptarse no es someterse ni acomodarse.
Tomemos la adaptación como un proceso activo e interactuante entre el sujeto y el mundo, en donde uno influye y es influido en ambas direcciones.
SIGNOS GRAFOLÓGICOS PRINCIPALES:
q Tratamiento del margen derecho
q Tratamiento y estilo de trazos finales
q Altura barra de la t
q Presencia o intensidad de la simplificación grafica
q Tamaño y regularidad del mismo.
q Calidad del estilo de mayúsculas.
q Nivel de forma Global de la escritura
q Tipo de Coligamento
El Coligamento (forma de enlace entre letras) será positivo cuando predominen las formas curvas (guirnaldas, filiformes solo si son aislados, pero con presencia también de algunos enlaces en ángulo. Pues esto denotaría que hay flexibilidad, empatía y receptividad puesta en las relaciones sujeto 7 ambiente, pero que llegado el caso ante situaciones problema, obstáculos, frustraciones puede resistir y accionar con iniciativa y resolución (ángulo) Exceso de ángulo marcaría desaptación y conducta hostil, y el arco y el cuadro (Sobreadaptación y sometimiento).
El margen derecho es también importante porque es una zona en donde el sujeto en alguna medida nos muestra su vivencia actual del mundo que lo rodea, su capacidad de enfrentamiento y la forma con que afronta las exigencias de la realidad por un lado y cristaliza o asume las conductas que lo acercan a su objetivo o meta (una de ellas adaptarse al otro -personas y situaciones-) otras expresar su personalidad en el ambiente. Por ello aunamos aquí tratamiento del margen derecho y modalidad de trazos finales, pues juntas nos permitirán extraer estas conclusiones. Lo ideal recordemos es buena cobertura del margen derecho, regularidad del mismo. Presencia de trazos finales, que tengan buena presión, legibilidad y lleguen hasta el final del renglón.
La presencia o altura de la barra de t y la calidad del hampa nos permite evaluar si el individuo actúa desde la independencia o la dependencia en su accionar. Es importante que la barra este presente, en forma horizontal o levemente ascendente de longitud normal, a ¾ de palo o no inferior a media hampa.
El tamaño pone en juego el equilibrio emoción, razón, el grado de autoconfianza pero a la vez la relación ajustada entre el sujeto y el ambiente. Así a mayor tamaño (4 mm en mas) la persona tendrá una forma de ser mas emocional, expansiva pero menos realista, ya que se incrementa el narcisismo y el peso de las propias necesidades por sobre la realidad. Si es muy pequeña 1,5 mm. Habrá excesiva introspección, un exceso de observación que hace que la persona no pueda ver las cosas en un sentido mas amplio y ateniendo a lo esencial de las cosas, a la par que una menor muestra o exteriorización de la propia personalidad.
Lic. Marcela Alvarez
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