CENTRO DE FORMACIÓN EN TECNICAS DE EVALUACIÓN PSICOLÓGICA |
Criterios
para la evaluacion de las tecnicas proyectivas graficas.
Debe
haber suficiente evidencia para la interpretación
Las interpretaciones serán construidas a partir de evidencias múltiples. El análisis debe hacerse tomando en cuenta las recurrencias y convergencias. Esto no significa que no se explore a fondo las implicaciones de cada respuesta y se analice con cautela el posible significado de una respuesta aislada o es diferente al resto: una confabulación dentro de un protocolo adaptado puede ser una señal de atención o un indicio de patología que las demás respuestas no permiten entrever.
En cuanto a
interpretaciones que apuntan a lo genético o etiológico necesitamos tener
mayor cuidado.
Sólo habrá
evidencia suficiente cuando por lo menos varias líneas de inferencia converjan
hacia la misma interpretación a partir de las respuestas de los sujetos en los
diversos tests.
La
profundidad de la interpretación debe ser apropiada al material disponible.
Se entiende
por interpretaciones profundas a aquellas en que se hace referencia a impulsos
primitivos, infantiles instintivos. Se critica a aquellas interpretaciones que
ponen énfasis en los impulsos orales, anales, etc, a partir de respuestas tales
como morder, ensuciar, señalando su existencia, pero sin especificar como se
dan en este sujeto en particular, como lo expresa n su conducta manifiesta, con
que defensas cuenta para controlarlos, que grado de conflicto promueven, etc.
Cualquier
terapeuta reconocerá que sólo defensas rígidas y compulsivas deben suponerse
tendencias anales o anales-sádicas, lo que no es correcto es hacer un informe
en el cual estos impulsos figuran como presentes a pesar de esfuerzos defensivos
de paciente. Es decir... no interpretar impulsos donde sólo se observan las
defensas.
Siempre
que sea posible deberá especificarse la forma manifiesta
Resulta
relativamente fácil inferir la presencia de un impulso, pero no lo es predecir
cuál de las múltiples formas de expresión que asumirá ese impulso en la
conducta. Por ejemplo: podemos detectare una tendencia homosexual latente, pero
no tener demasiados datos para predecir si esta tendencia llevará al sujeto a
una homosexualidad activa o encubierta o a una activa defensa a través de la
asunción del rol de Don Juan.
Si bien no
podemos predecir un tipo de conducta con absoluta seguridad, podemos señalar
con relativa certeza una gama de conductas posibles, indicando en cada caso cuál
podría ser los factores ambientales que hagan más plausibles una u otra.
Debe
estimarse la intensidad de la tendencia interpretada.