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Episodio1

Sombras del pasado




Hitomi estaba parada en el balcón de su apartamento, contemplando en silencio el cielo nocturno de esa noche. Entonces una pequeña lágrima resbaló por su mejilla.
-Hitomi?.
-Yukari.
-Estás pensando en él, no es verdad?.
-No, claro que no, sólo miraba el cielo.
-Lo miras todas las noches, como esperando que algo suceda. Hitomi, en un principio pensé que ibas a terminar olvidando tu amor por Van e ibas a poder seguir adelante, pero no creo que hayas podido ser felíz un sólo día desde que llegaste, estoy preocupada por ti.
Hitomi no contestó, pero pudo sentir el frío intenso que había estado sintiendo desde que regresó, entonces no lo pudo evitar y comenzó a llorar como nunca lo había hecho.
-Yukari lo extraño tanto.
-Lo sé, Hitomi estás temblando. Vamos adentro, te prepararé un poco de té caliente y luego te irás a dormir, vas a ver como mañana te vas a sentir mejor.
Esa fue la unica noche que Hitomi no tuvo pesadillas.
A la mañana siguiente salió a correr como todos los días para luego ir a trabajar al pequeño despacho de publicidad que tanto trabajo les había costado a Yukari y a Hitomi construir.
-Señorita Kansaki, los empresarios llegaron, los hago pasar?
-Si, muchas gracias.
Había estado pensando tanto en Van que casi se había olvidado de la presentación que llevaba preparando más de un mes.
La presentación duró más de una hora, pero ahora tenían una firma muy importante de cliente.
 -Bien hecho Hitomi, después de todo somos un gran equipo no?.
- Si, sólo que estos días no tengo cabeza para nada. Te invito a comer.
-Seguro!!

***
Dónde estoy?, está muy obscuro...
Entonces vió la ventana de su lado izquierdo y supo la respuesta a la pregunta que había hecho mentalmente.
Gaea... Van...
Esto parece una mazmorra.
Fuera de la habitación se escuchaban pasos y voces masculinas aproximándose hasta llegar a la puerta.
-Ya llegó la hora.
Al abrirse la puerta Hitomi pudo distinguir las figuras de 3 hombres en túnicas negras seguidos por un grupo de soldados.
-Quienes son ustedes?.
Nadie contestó, pero todos avanzan amenazadoramente hacia ella, ella grita y forcejea pero nada puede hacer.
-Van!!!!.

***
-Hitomi!.
-Qué pasa??.
-Me habías preocupado.
-Son las 3 de la mañana Yukari!!.
-Lo sé, está temblando, levántate y vámonos!.
Entonces las dos salieron del departamento, la tierra se estremecía y los edificios se tambaleaban amenazadoramente.
-Estás bien?.
-Si
-Estaba muy preocupada, no podía despertarte, estabas como en un trance y no dejabas de repetir Gomaru nomorra, la sangre de la raza, ¿Qué estabas soñando Hitomi?


Hitomi, no!!.
Entonces Van despertó.
Otra pesadilla, la misma de todas las noches, espero que Hitomi este bien.
Van creyó no poder dormir en lo que restaba de la noche así que bajó a los jardines a contemplar lo mismo que contemplaba todas las noches.
-Van, qué haces despierto a estas horas?
- Allen!, me diste un gran susto, lo mismo debería de preguntarte yo a ti.
- Nunca he podido dormir bien, dicen que la luna tiene extraños efectos en el hombre, pero veo que a ti te afecta más la Luna Fantasma si no me equivoco.
-Qué más da?!.
-La extrañas demasiado no?, vienes aquí todas las noches desde hace 8 años.
-Y tú no tienes mucho que hacer.
-Lo siento pero ya te dije que sufro de insomnio, además, Gaea huele a demasiada tranquilidad, esto me da mala espina, incluso los nefarios han dejado de cantar.
-Eres muy observador Allen.
-O tú has estado soñando despierto todo el tiempo, mañana tienes junta con el consejo como cada 3 días, y siempre estas distraido, dónde esta tu mente Van?.
-No sé que pasa conmigo, no pensé que me fuera a afectar tanto, pero desde que Hitomi se fue no puedo dejar de pensar en ella, incluso ya no me entusiasma ver Fanelia reconstruida, pensé que dejarla ir era lo mejor, y sé que no puedo ser egoísta y pedirle que simplemente renuncie a toda su vida en la Luna Fantasma, pero a veces creo que mi vida es una estúpida rutina y que ya nada es igual sin ella.
- Porqué no la buscas?.
-Supongo que me da miedo saber que siguió adelante con su vida, y que probablemente ya ha encontrado a otra persona o que simplemente  me olvidó.
-Hasta que no lo intentes no vas a estar seguro, conozco a Hitomi, es una mujer que vale la pena, si no le preguntas te vas a arrepentir toda tu vida de haberla dejado ir por segunda vez.
-Tienes razón Allen, Gracias!!.
Y con una nueva esperanza, Van sacó el pendiente de Hitomi de entre si camisa, y se concentró en cada detalle de ella, sus ojos de jade, su cabello del color de la arena, su amable sonrisa. Entonces el pilar de luz lo elevó hasta desaparecer.


Hitomi podía escuchar los ronquidos de Yukari hasta el balcón, como admiraba la capacidad de su amiga para dormir, incluso después del terremoto pudo dormir como si nada.
Yukari tiene razón, soy un zombie hipnotizado por un recuerdo.
Van... Hitomi no pudo evitar llorar silenciosamente para no despertar a su amiga. Pero de repente vió como una delicada pluma de angel caía a sus pies.
Me está llamando... Van!!!.
Sólo sintió que tenía que correr, así que trepando por el balcón, Hitomi descendió hasta el jardín y corrió hasta llegar a la plaza principal.
Soy una tonta!, cómo se me ocurre!, han sido 8 años seguramente incluso ya es casado, así son los nobles.
Entonces se abrió un pilar de luz del cielo, con un hombre de cabello alborotado descendiendo en este.
-Hitomi!!!!!
-Van!!!!
Hitomi corrió a su encuentro y lo abrazó con toda la fuerza que tuvo en aquel momento.
-Hitomi, te he extrañado tanto!!
-Van!, nunca debí haberme ido.
Los dos fueron elevados de regreso a Gaea aunque en realidad no hubiera importado a donde fueran pues ninguno de los 2 lo habría notado, como tampoco notaron que alguien o algo los seguía.
-Reconozco este cielo, estamos en Gaea.

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