Eso que llaman
Amor
Todos creen conocerlo. Pero muchos quizás solamente lo han probado...
y es algo muy complejo. Puede ser profundo o superficial.
Como Dios, es invisible y lo ves... Como Dios, es intocable y lo tocas...
Como a Dios, lo ves, lo tocas, lo sientes...
El Amor tiene la grandeza del Cielo. La inmensidad del mar. La lejanía
del infinito. La prodigalidad de la tierra.
El Amor tiene el fulgor del sol. La tibieza de la luna. El parpadear de la estrella.
El Amor tiene el susurro del viento. La caricia de la brisa. El cantar de la fuente.
El Amor tiene el verdor de los montes. El enigma de la caracola. El aroma de la flor.
El Amor tiene el ardor del fuego. El titiritar del frío. La fugacidad del relámpago.
El Amor tiene el vuelo de los pájaros. El estancamiento del agua. La tracción
del imán. El rechazo de la indiferencia.
El Amor tiene el crecimiento de la semilla o su disecación. El encanto de la
sonrisa. El temblar de las lágrimas.
El Amor tiene la armonía de la música. La rima de los versos.
El Amor tiene la luz del día. El misterio de la noche. La quietud del lago.
La furia del mar embravecido.
El Amor tiene ese encanto. El calor del verano. El florecer de la primavera. La
nostalgia del otoño. La frialdad del invierno.
El Amor, como el tiempo, pasa... como la marea, sube y baja...
como la ola, viene y va... como las nubes, cambia de forma...
como la flor, se marchita... como la llama, se extingue...
Como a Dios, a veces lo encuentras... y a veces lo pierdes.
Como a Dios, tienes que darle toda tu fe.
El Amor tiene mucho de Dios. Mucho de la Naturaleza.
Pero tiene más del ser humano que lo engendra. Y como éste, es mortal, perecedero.
Sólo Dios es eterno, pero así mismo Dios es Amor.
¿Conoces acaso eso que llaman Amor?
Autor desconocido |