Navidad: 25 de diciembre
Navidad... cuando somos
niños ¡cuánta ilusión! Y cuando somos adultos la preocupación: "¿De dónde
sacaré el dinero para los regalos, las bombillitas, el arbolito?" Cada año la
Navidad se convierte más en un evento puramente comercial que en una época de
celebración. ¿Por qué hemos dejado que nuestro corazón pierda la ilusión? La Navidad
no es comer, beber, decorar, esperar los regalos, parrandear. El verdadero significado de
la Navidad, ¿sabes cuál es? Que hace mucho, mucho tiempo, en un lugar bien lejos, nació
un Niñito que era Hijo de Papá Dios y vino a salvarnos. Te lo trato de explicar así,
como si fuera tu maestra de Kindergarten porque precisamente así lo debes asimilar, con
un corazón de niño, un corazón que cree en milagros, un corazón que se ilusiona y se
emociona de saber las cosas lindas. La Navidad es celebrar el cumpleaños de Jesús, ese
Niñito que nació en un portal no muy limpio, no muy oloroso, donde habían sólo
animales, donde no habían regalos, ni bombillitas, ni arbolitos... Ese es el verdadero
significado... Cuando comenzemos a entender que la Navidad no se hizo para que los
comercios se abarroten de gente y que la verdadera Navidad se celebra en el corazón,
entonces estaremos viviendo una verdadera celebración, una verdadera Navidad.
Cariñosssss, Yaz.
Dedico esta página a todos los niñitos y a los que no son niñitos pero que viven la
Navidad como si lo fueran. |
Noche de Hosanna
Un hombre y una mujer llegan a Belén de Judá...
Sus rostros lucen cansados, en sus ojos se puede ver
el esfuerzo realizado por llegar.
Son ellos María y José...
Han venido desde Nazaret cumpliendo en humildad
con un edicto que ha sido promulgado,
y firmado por Augusto César, el emperador romano.
El ha decidido los tributos aumentar,
y los judíos viajan cansados -hasta su ciudad natal-
para ser empadronados.
María, que está embarazada, de momento es percatada
que el Hijo de sus entrañas está pidiendo nacer,
¡Y aún no tienen posada!
¡No hay lugar en el mesón!
Mas ella no siente temor -ella está confiada
en su Señor y su Dios.-
En ese Dios Onminpotente que le hizo sombra a su
vientre y en ella un Hijo engendró,
mediante su Espíritu Santo y no por obra de varón;
ese Dios Todopoderoso en esta noche Suprema
también hará provisión.
Y prosiguen su camino en espera de ese albergue
que los ha de cobijar.
Sus pasos van silenciosos... sus mentes en oración,
suplicándole a su Dios que El haga fuerte lo endeble.
Y caminando sin rumbo... y cansados de caminar,
pero con fe y esperanza ardiendo en su corazón,
de pronto se han detenido ante un humilde pesebre...
¡Dios ha hecho provisión!
Y en aquel humilde pesebre, comedero de ganado,
oliente a naturaleza y pobremente alumbrado;
en aquella noche fría...
entre el ruido de animales y unos dolores de parto
que le causan agonía...
a las doce de la noche nace el Hijo de María.
Nace el Hijo de María que nueve meses atrás
fue anunciado por Gabriel...
¡Es su Hijo primogénito!
¡Es Hijo del Dios Altísimo!
¡El esperado Mesías y Salvador de Israel!
Y María sonriente, olvidado ya el dolor,
lo toma entre tus brazos y lo arrulla tiernamente
con ternura y con amor...
Los ángeles del cielo han inundado el pesebre
de alabanzas y loor...
¡Es una noche de Hosanna, noche de Salvación!
Lo que el ángel Gabriel a María no le dijo,
es que perversos jinetes han salido tras su Hijo.
Cabalgan en pos de El, y no hay nada en este mundo
que los pueda detener.
Cabalga un Getsemaní, cabalga un Calvario,
cabalga una espada, un Judas y una Cruz;
y en su cabalgar constante,
en un futuro no distante alcanzarán a Jesús.
Pero esta noche de Hosanna, en esta noche de Paz,
el corazón de María no lo pueden perturbar
ni plañideras, ni endechas, ni jinetes que cabalgan,
ni espada o lamentación...
¡No! ¡Todo eso puede esperar!
En el humilde pesebre el tiempo se ha detenido
en un éxtasis profundo...
María contempla a su Niño embelesada de amor.
Ella lo envuelve en pañales, lo arrulla contra su pecho,
y sus brazos maternales lo protegen de la Cruz...
¡Es su Hijo primogénito!
¡Es Hijo de Dios Altísimo!
¡Es el Salvador del mundo!
Y su nombre, su nombre es Jesús...
-Orpha Quintero de Colón-
¿Qué es Navidad?
Es amor. Es esperanza. Es fe.
Es alegría.
Es principio de Redención.
Es una etapa de nuestra historia de Salvación.
Es encuentro con Cristo, Niño.
Es conversión y renovación.
Es paz interior.
Es vida nueva.
Es camino que se abre para el tiempo
y para la eternidad.
Es verdad que se alimenta del Amor.
Es vida que fructifica y madura,
sin dejar de nacer siempre.
-Autor Desconocido-
Navidad puertorriqueña
La Navidad despierta en cada esquina.
La Navidad asoma en cada puerta.
Se percibe e la luz, en las pupilas
y en los rumores de las hojas secas.
Los días se embellecen con la gloria
de flor recién despierta.
La flor de pascua que se incendia en grana
y el corazón alegra.
Huele el ambiente a pacholí y albahaca,
a ruda, a yerbabuena,
a toronjil, a salvia y a romero,
a tomillo, a saúco y a verbena.
Son aromas del campo de mi tierra
que, como incienso, en devoción se entregan
en cada Navidad al Cristo Niño
cuya morada señaló una estrella.
Ya se escuchan de lejos
los viejos aguinaldos, siempre nuevos,
con güícharo, guitarra, tiple y cuatro
y muchas emociones alma adentro.
Así es la Navidad en Puerto Rico.
Sencilla como el bíblico poema.
Rica en ingenuo y puro regocijo.
¡Bendita Navidad puertorriqueña!
-Carmen Alicia Cadilla de Ruibal-
Yaz Designs 1999 ©
6-99
Ultima actualización: June 27, 1998
|