PARA UNA AMERICA ORIGINAL
"La guerra de independencia no ha tocado su fin" Simon Rodriguez, 1830.
"Miseria, Desigualdad, y Hambre es lo que reina en la America Bolivariana de hoy", estas fueron las palabras pronunciadas el 17 de diciembre 2000, día del triste aniversario de la muerte de Simón Bolívar, por el Presidente Hugo Chávez quien commemorando la memoria del Libertador quizo recordarnos la dramática situación en la cual se encuentra la gran mayoría de los latinoamericanos : situación exacerbada en el contexto de la economía globalizada por dos décadas de políticas neoliberales, las cuales no son ni más ni menos que nuevas formas de colonialismo ejercido por y principalmente a beneficio de una ex-colonia: los Estados Unidos. En 1980 la pobreza de la población latina era del 37%, ahora es del 44% (224 millones de pobres; de ellos 90 millones son indigentes). Sobre todo la distribución del ingreso es la más desigual del mundo (5% de la población absorbe 25% del ingreso total y la diferencia entre el 20% más rico y el 20% más pobre es de 19 veces). Quizá es la situación económica y social de México, encadenado por el acuerdo de NAFTA y despreciando todo el espiritu y los valores de su historia, quien podría mejor resumir el drama de la América: de 49% de su poblacion viviendo bajo el nivel de pobreza en 1981, hoy en dia se ha pasado al 75 % y un reciente informe del Banco de México, quien no puede ser acusado de estar contra los intereses del capital, admitía que con el nivel de crecimiento actual se necesitaría por lo menos unos 60 años para que México doble su ingreso per capita y acabe con su extrema pobreza. Cifras concluyentes y opuestas a las distorsionadas por los vende patrias colaboracionistas con Estados Unidos para extender NAFTA hacia todo el continente. Es decir, desde Alaska hasta la Tierra del Fuego, con el Area de Libre Comercio de las Americas (ALCA) manteniendo así la hegemonía estadounidense y persiguiendo la Tejasización del sur del continente ( Tejas, estado donde George Bush junior hizo sus primeras armas como gobernador, es uno de los estados más desiguales de los Estados Unidos). No obstante, a pesar de que en toda América Latina y el Caribe se desarrollan movimientos de resistencia al neoliberalismo, con distinto grado de cohesión y fuerza, la mayoría de los gobiernos latinoamericanos, muchos de los cuales rechazan el calificativo de neoliberal, usan a la integración regional para profundizar las reformas económicas implementadas desde 1982: es decir privatizando las ganancias, vendiendo las riquezas de la nación al capital extranjero y socializando las pérdidas, creando más desigualdad, más explotación, más represión, más pobreza, hambre y enfermedad. Sin embargo, de manera contrastante, el gobierno venezolano liderado, por el Presidente Chávez, es el único (con la notable excepción de Cuba) en rechazar el modelo neoliberal y promocionar una verdadera integración regional a través del paradigma Bolivariano pero incluyendo a Brasil. "Nuestra Revolucion Bolivariana no es solamente nacional sino tambien Latinoamericana. Si no logramos la integración de fuerzas alternativas en este continente, aunque tomemos el poder aquí y allá, no habrá cambios y transformación posible que tenga permanencia en el tiempo" repitió en varias ocasiones el mandatario venezolano. Con respecto al ALCA, el Presidente Chávez, aseguró que su Gobierno llevará a cabo un referendum consultivo para que sea el pueblo venezolano quien decida sobre la participación del país en el Area de Libre Comercio de las Américas, advirtiendo que no podia comprometerse para que " el 31 de diciembre del 2005 entre el ALCA en vigencia en Venezuela". Asi se expresa quien es acusado por el resto de las Repúblicas de la región como no democrático. Ningún otro país del continente ha debatido un referendum, a pesar de las encolerizadas demostraciones populares. Unos de los motores de una verdadera integración regional podrían ser las fuerzas armadas quien en Venezuela, con el Plan Bolívar 2000, han encontrado una nueva forma de intervención y participación en la vida cotidiana de los venezolanos. Este plan fue inaugurado en Noviembre de 1999. Frente a una grave crisis social (80 % de la población venezolana vive bajo el nivel de pobreza, 39 % en la pobreza extrema y la mortalidad infantil es de 21 ) el Presidente Chávez decidió usar la logística y las infraestructuras del ejército venezolano para impulsar y desarollar varios proyectos de "reconstrucción del país" y librar una verdadera guerra social. El Plan Bolívar es parte de una estrategia que tiene por objetivo realizar una fusión cívico-militar de las mejores fuerzas vivas de la nación para lograr una sociedad más justa y más decente, estrategia que podría ser emulada en otros paises. En un contexto adverso y de claudicación cobarde, cada paso de la todavia solitaria revolución bolivariana significa un avance para todos los pueblos de América. Sin embargo, en América Latina y en Europa hay diversos sectores del campo popular que por la manipulación de los medios de comunicación, o por desconocimiento aún mantienen distancia, dudan, y no se comprometen en el apoyo explícito a dicha revolución. Más grave aún, en Europa existe un cierto prejuicio debido a la condición de militar del presidente Chávez quien encabeza esta revolución . Tal prejuicio es dar la espalda a una gran parte de la historia de nuestro continente donde muchos líderes progresistas fueron de naturaleza militar: entre ellos podríamos nombrar a Jacobo Arbenz en Guatemala, Peron en Argentina , el general Velasco Alvarado o el general Torrijos en Panamá, quien logró devolver a su pueblo el canal ursupado por los Estados Unidos. Sin apoyo crítico el proyecto del Presidente Chávez corre el riesgo de fracasar. Por eso todas las fuerzas progresistas tienen el deber moral de conocerlo en profundidad y difundirlo , aprender de sus enseñanzas y errores para caminar en conjunto hacia la consolidación de un polo coordinado de resistencia al neoliberalismo en toda América Latina y el Caribe tal como propone el ideario bolivariano presente en dicha revolución. No hay que olvidar esas palabras sabias del Libertador "íO nos unimos o nos hundimos!" Maximilien S.Arvelaiz. |