Es un rosario que se medita sobre las 7 alegrías de la Virgen María. Para ver su breve historia y las meditaciones, repique aquí.

Es la devoción de todo cristiano, es el cuerpo y la sangre del Señor, en la celebración Eucarística. También llevarla a enfermos y presos, los Ministros de la Eucaristía se dedican semanalmente a estas tareas de difundir el Evangelio y llevar la Eucaristía.

Es una exposición máxima de la hostia consagrada, en la Custodia, sobre el Altar Mayor se reverencia el Cuerpo de Cristo, con una solemnidad especial, como privilegio de las Ordenes Franciscanas Seglares.

La Solemnidad de Cuarenta Horas

La  solemnidad  de las CUARENTA HORAS, comenza el jueves antes de Pentecostés, termina precisamente el Domingo. Se reverencia el Cuerpo de Cristo, en exposición mayor, diez horas cada día para completar cuarenta horas, los hermanos guian  las horas, alternándose el rezo del Rosario, el Trisagio a la Santísima  Trinidad, cantos, peticiones, oraciones y al final  de  la tarde  la meditación guiada por el Sacerdote,  para enseñarnos,  renovarnos  y reafirmarnos en el amor de  Dios.  Se termina la jornada con la Oración de la Tarde, Letanías de  Todos los Santos cantada, adoración al Santísimo Sacramento, solemnemente expuesto. El día de Pentecostés: con adoración, Oración de la Tarde y canto gregoriano del "Veni Creator Spiritus"

VENI CREATOR SPIRITUS

Es una devoción al nombre que está sobre todo nombre. El más grande y el más bello que se pronuncia en la tierra, en el cielo... (Fil.2, 9-10). José y María cumplieron estrictamente las prescripciones legales contenidas en el Antiguo Testamento para el pueblo judío. La primera para los niños era la circuncisión, en el mismo acto solía imponerse el nombre al niño, comunicado por el ángel a María y a José, le llamaron Jesús que significa: "Yavé es salvación", más tarde se le llamará "El Ungido": que en lengua griega se dice "Cristo" y en hebreo "El Mesías". Por eso aquellos primeros cristianos, al reconocer en Jesús al Rey Libertador y Salvador anunciado por los profetas, comenzaron a llamarlo Mesías o El Cristo, ungido por Dios Padre, como Rey y Salvador de todos nosotros.

La Inmaculada Concepción:

La Virgen en su advocación de la Inmaculada Concepción, la celebramos el  8 de diciembre. Primero fue  declarada  MARIA ES MADRE DE DIOS, después del  Concilio  de Nicea y Constantinopla. En el Concilio de Letrán, 649 A.C., establecían "María Madre de Dios, Santa y siempre Virgen e  Inmaculada". Francisco amaba a María y se refleja en su SALUDO A LA  BIENAVENTURADA  VIRGEN  MARIA, la consagra Patrona y Abogada de  toda  su familia (Cfr. 2C 198). Pero  fue  un franciscano Juan Duns Escoto, quien  en  la  famosa disputa  de la Sorbona (13O4), defendió de tal manera la  opinión franciscana, que la Universidad prometió, en adelante, defenderla también.

El  escudo de Caracas desde 1766 se encuentra orlado por  la  siguiente  inscripción:

"AVE MARIA SANTISIMA SIN  PECADO  CONCEBIDA DESDE  EL PRIMER INSTANTE DE SU SER NATURAL". La Iglesia  de  San Francisco de Caracas fue dedicada a la Inmaculada Concepción y el retablo  de la Capilla de Las Llagas de San Francisco de la  OFS, está rematado en lo alto con una imagen de la Inmaculada  Concepción, probablemente obra de Juan Pedro López.

Pío IX, terciario franciscano, proclama el dogma de la INMACULADA CONCEPCION, mediante la Bula "INEFABILIS DEUS", el 8 de  Diciembre de 1854, y envió una rosa de oro al Padre General de los  Franciscanos  como  reconocimiento de la Iglesia a los hijos  de  San Francisco por su constancia y valentía en defender y propagar  el bello misterio de la SIEMPRE PURA E INMACULADA VIRGEN. Tomado  de  "El Evangelio de la Virgen"  (Lecturas  Marianas)  de P.Cp. Félix de Vengamián, 1983.

Esta advocación de la Virgen está asociada a la Porciúncula y a la Indulgencia Plenaria que se obtiene todos los años el 2 de agosto.

La pequeña Capilla que fué dada a San Francisco para los Hermanos Menores, estaba dedicada a la advocación de la Virgen como Santa María de los Angeles, como se le llamaba de antiguo (1160). Porciúncula por ser un pedacito o pequeña porción, dependía de la Abadía de Monte Subasio, Francisco expresaba que este lugar estaba bendecido de

gracia más abundante, que por revelación de Dios sabía que la Virgen amaba con especial amor esta iglesia entre todas las construidas en su honor en el mundo: "nunca abandoneis este lugar... es verdaderamente santo y morada de Dios... Aquí iluminó el corazón de sus pobres con la luz de la sabiduría; aquí encendió nuestras voluntades con el fuego de su amor.Aquí el que ore con corazón devoto obtendrá lo que pida...cantad al Señor con voces de júbilo y alabanza."(Celano 1 Cap. VII)

María es especialmente amada por San Francisco, él la llama, en sus oraciones: Madre de Dios, Santa Señora Santa y Reina Sacratísima, Señora del mundo, abogada de su Orden, bienaventurada Madre, la pobre Señora, Virgen perpetua, hija y esclava del Rey Altísimo, esposa del Espíritu Santo.

Fué San Francisco quien hizo el primer pesebre viviente en la ciudad de Greccio, en la Navidad de 1223. Para San Francisco era "La Fiesta de Las Fiestas", de gran importancia y muy amada por él, era la Natividad de Nuestro Señor, y esa escena que leía en la Biblia quería mostrarla a todos reviviendo esos momentos en un escenario similar, reuniendo a los personajes representados por gentes sencillas y para gentes sencillas, y de esta manera se grabara en sus corazones, como él lo imaginaba. A partir de esta fecha se comienza a representar esta escena, primero en las Iglesias y hoy en día en todas nuestras casas.