Declaración de Principios
Esta declaración de principios empezará
por lo esperado: una presentación. Mi nombre es José Ignacio
Silva, soy un chileno que nació en albores de la década de los
80, en su año inicial para ser más preciso, que cursa la
vilipendiada carrera de Periodismo, además de la cátedra de Literatura, y cuya pasión y móvil de
muchas cosas en su vida es la literatura, y dentro de ella la
poesía. Por ello he creado este sitio, el cual ha sido compuesto
por absorción, por copia y para poder acercarse un poco a
aquellos miles de jóvenes que escriben, unos por hobby, otros
por verdadero sentimiento y vocación.
He querido acercarme a ellos, a ustedes, he querido compartir sus pasiones, poder dar alojamiento a sus más tiernos sentimientos hechos papel, hechos tinta, con cara de verso o de cuento, de relato o de oda. Por ellos y por un fin egocéntrico (el deseo de habilitar un espacio para lo mío) he creado este sitio, para poder ser un grano de arena, que destaque en medio de la descomunal playa de sitios de internet que comparten un mismo propósito.
También debo confesar que mi
sueño, que mi propósito ha sido desde hace tiempo, desde que
las letras me empezaran a deslumbrar, y a la luz de la lectura de
generaciones de Unamuno y García Lorca, es ser partícipe de mi
propia generación, y ser reconocido por ello, además de
hablarme al mundo a través de mi poesía. Creo que el futuro me
dará la respuesta a mis anhelos profundos. Pero, por lo pronto,
la segunda idea de este sitio es el poder formar una hermandad de
escritores jóvenes, de escritores que puedan compartir un
sentimiento puro, un anhelo genuino. Un fin más pedestre y
descriptivo sería que todos los que pasen por esta estación de
la vía férrea interminable que es internet es que se escriban
unos a otros, que se conozcan y que se abran a la luz de los
escritos.
Debo decir que este sitio camina lentamente, como un infante, que empieza a erguirse muy despacio y a dar pasos y caminar en definitiva. Este sitio es lo mismo, muy lento, mientras crece, se nutre de cosas nuevas, de experiencias formadoras y con la savia que le transmitan los visitantes podrá realizarse.
Este Sitio es de USTEDES, ustedes lo construyen, le dan vida, y lo harán caminar hacia la luz.
Importante es precisar detalles menos altruistas y más concretos, la publicación de textos es gratuita, se tratará de acoger todo tipo de textos, siempre que estén en la imparcialidad, en la universalidad y en la no agresión, que estén en el deseo de embellecer, de entregar latidos de corazón, en inspiraciones de alma, en señales de vida verdadera.
"Para muchos tímidos,
leer es también un modo de vivir, una forma de acercarse al
otro, una oportunidad para ser remecido silenciosamente. Y entre
las múltiples posibilidades de lecturas, la de la poesía tiene
un encanto peculiar, provoca una emoción especial, sacude las
sequedades que tanto nos oprimen, pues a veces bastan algunos
versos para conmover el corazón o generar el estremecimiento del
alma.
La poesía es quizás
la más íntima de las lecturas, aquella realizada desde la orilla en la cual se expresan mejor
los sentimientos: al mismo tiempo elocuente y contenida, metafórica
y musical, inquietante y algo perturbadora. Un verso hermoso
distrae de la rutina, alimenta la ensoñación, ayuda al
necesario ensimismamiento. Un poema es una voz habitualmente
llena de infidencias sutiles y de esperanzas aún no reveladas.
Además, en ocasiones inesperadas, el azar nos permite descubrir
un buen poema y gozar de su belleza".
La belleza tiene, por cierto,
un lugar reservado en mi sitio, pues ella es la que mueve casi la
totalidad de la actividad artística, el deseo excelso de
expresarla y de compartirla será siempre bienvenido, pues esta
es La casa de la belleza.
Nihil Novi Sub Sole, nada
nuevo bajo el sol, célebre frase que bautiza el sitio. Les
invito a que el sol vea cada vez que nos alumbra algo nuevo, cada
vez que nos da su cara abrasadora vea que un alma creadora ha
trabajado de nuevo.
Verba volant, scriptum manet.
Las palabras vuelan, lo escrito permanece. Escriban, escriban siempre, y que esas palabras deliciosas no vuelen, sino que permanezcan; y que, si se puede, permanezcan aquí, en Nihil Novi Sub Sole, el gran sitio literario.
Muchas Gracias de corazón a todos.