Virginia justifica su visita a Donato argumentando que es parte de la labor que realiza por lo del fideicomiso ya que a pesar de ser riesgoso, lo hace para reinvindicarse con la familia y que sepan que ella es capaz de hacer cosas buenas. Teodoro se arrepiente de haberle dado el fideicomiso por el peligro que corre Virginia y de inmediato pondrá el fideicomiso en manos de otra persona.
Virginia habla con Santiago para que Carla regrese a su casa. Según Santiago, Carla ya le pertenece a Donato y no hay nada que hacer porque Donato jamás la soltará por temor a que hable. Virginia le dice que tendrán que hacer algo, de lo contrario perderán el dinero del fideicomiso. Virginia sugiere que le roben Carla a Donato para que ella regrese a su casa y si Carla quiere, que se fugue después pero por lo menos Virginia quedará bien ante su familia. Además, Virginia ya ha puesto todo de su parte para mantener el fideicomiso y ahora falta que Santiago haga algo.
Demetrio le sugiere a Miranda que se acerque a Verónica por medio de Irma, ya que la puede contratar para que le decore su nuevo apartamento. Miranda hace una cita con Irma. Irma la reconoce como la mujer que acompañó a Demetrio a la premiación y de la cual Verónica estaba muy celosa. Miranda le aseguró que Verónica no tiene porqué estarlo; ya que fue pura casualidad el hecho de que ella acompañara a Demetrio a la premiación. Irma quedó complacida con esto y aceptó el trabajo. Miranda le comenta que Demetrio la recomendó como decoradora, que Verónica es socia de la compañía, que Irma decoró la hacienda de Demetrio y que Verónica es esposa de Demetrio. Al Irma preguntarle desde cuándo conoce a Demetrio, Miranda responde que ella tiene conocimiento de Verónica desde antes que ella se fuera a Europa.
Francisco almuerza con Irma. Este almuerzo no llega a nada ya que a pesar que Francisco le pide perdón y le dice que no descansará hasta que ella regrese con él, él se violenta en el restaurante y ella se va asustada.
Verónica llega a casa de los Fernández-Negrete para almorzar. Mientras platica con Leti y Sarah en el jardín, Demetrio llegue a la par que Teodoro y le pide que hablen a solas. Demetrio le comunica lo del embarazo de Verónica y le pide ayuda. Teodoro se la niega en base a que su matrimonio fue una farsa, abusó de Verónica y Teodoro corre a Demetrio de la casa. Demetrio le suplica que lo escuche; le dice que jamás abusó de ella. Teodoro le pregunta por qué se casó con ella si la odiaba por pensar que había sido la mujer de su hermano y la que lo llevó a la muerte. Demetrio le contesta que él no odiaba a Verónica, sino a esa mujer; que se casó con ella porque la adoraba y que jamás forzó a Verónica; que las veces que tuvieron relaciones fue maravilloso en especial la noche de bodas. Teodoro le contesta que más le vale ya que sería el colmo que ni siquiera hubiesen tenido relaciones esa noche. Teodoro le niega la ayuda y Demetrio le dice que Teodoro es el único que puede hacer algo por ellos. Teodoro le pregunta a Demetrio qué piensa Verónica y éste le contesta que Verónica no quiere nada. En ese momento, entra Juan y dice que el hijo que Verónica espera es de él. Demetrio se enoja y le exige que desmienta lo que ha dicho de lo contrario.... Teodoro les pide que se calmen; Demetrio le dice que no es cierto ya que ese hijo es de él (Demetrio). Teodoro le pide a Juan que se explique bien; Juan responde que ese hijo es de él y no tiene nada más que decir. Entran en discusión, las mujeres escuchan los gritos; Verónica entra a la biblioteca y les pregunta qué es lo que tienen que preguntarle a ella. Teodoro le explica que ellos le han dicho que ella está embarazada. Ella lo confirma y sarcásticamente le agradece a Demetrio por haberse adelantado con la noticia. Teodoro le dice que tanto Demetrio como Juan alegan ser los padres. Verónica queda totalmente sorprendida ante esto y les dice que no es ni de uno ni del otro ya que sólo es de ella y le advierte a Demetrio en especial que ella sola lo criará. Verónica se va; Demetrio la sigue y tras él Juan. Demetrio no alcanza a Verónica. Demetrio le da un golpe a Juan ya que esa situación no puede continuar; Juan le regresa el golpe; Teodoro los trata de separar pero como se le hace difícil; Teodoro le da un golpe a Demetrio y otro a Juan para que se calmen. Después todos entran a la casa y Leti ayuda a Demetrio con una bolsa de hielo para los golpes de la cara. Teodoro les reprocha el comportamiento de ambos ya que por culpa de ellos Verónica se fue muy alterada. Leti agrega eso no es conveniente ahora que Verónica está embarazada. Demetrio le dice que tiene razón y por eso él cuidará de Verónica; Juan le dice que no tiene nada que hacer y empieza a alterarse; Teodoro amenaza a Juan con darle otro golpe si no se calma.
Francisco le pide a Verónica que lo ayude a reconciliarse con Irma. Verónica le dice que para empezar él tiene que aceptar que Irma se fue de su lado por su culpa y maltratos verbales. Francisco le pide que le permita hablar con Irma y que le pedirá perdón.
Sarah y Leti están muy contentas con lo del embarazo de Verónica. Leti asegura que Verónica es capaz de criar a su hijo por sí sola. Sarah sugiere que Verónica deje a un lado su orgullo y le dé los derechos que le correspondan al padre de su hijo. Leti dice que no cree que Verónica sea capaz de mentirle en algo así a Demetrio, a pesar que Demetrio se lo merezca.
Francisco está en la oficina platicando con Verónica ya que Irma está fuera de la oficina con Miranda
(por cierto, Verónica quedó sorprendida al enterarse que Irma estaba con Miranda). Belot regresa y Verónica le da un abrazo. Demetrio entra y los ve; detrás de Demetrio entra Juan.