Casi siempre sorprendemos al interlocutor cuando decimos que somos de Bolívar Cauca y que por tanto nos identificamos como "bolsiverdes". Esta palabra resulta graciosa y muchas veces puede ocasionar malos entendidos, por eso nos tomamos el deber de explicar que asi eran llamados nuestros abuelos en la ciudad de Popayán a donde iban a lomo de mula por los viejos caminos de herradura, para realizar diligencias o vender los productos de las cosechas,  cargando siempre una

mochila de color verde  donde llevaban la coca y el mambe que ayudaban en las fatigosas jornadas. Y es que ser "bolsiverde" o bolivarense, en lenguaje culto, significa sentirnos unidos por valores culturales que se expresan en la  riqueza artística e intelectual de nuestra gente, en ese amor a la tierra que, aunque estemos lejos, nos hace recordar el olor a café tostado que perfuma las calles de nuestro pueblo y nos hace sentir el irresistible deseo de saborear las empanadas y tamales de pipián o un apetitoso sancocho de maní .

Ser bolsiverdes es encontrarnos en la alegría y el colorido del Carnaval, momento donde se expresan con intensidad los valores artísticos de nuestro pueblo. Es viajar por el mundo mágico de las historias que nuestras abuelas nos contaban sobre los cerros encantados: la campana que suena cada viernes santo, el diablo que un padre dejo amarrado en los peñascos del Pericaso, el trapiche de oro del cerro Gordo y los tesoros que don Custodio enterro en el cerro de Bolívar. A los bolsiverdes nos une la sensibilidad frente a las situaciones críticas, pues de otra manera no hubiera sido posible el resurgimiento de nuestros valores culturales, depues de los desastres que causó la "bonanza coquera", acabando con la tranquilidad de nuestras veredas. Nuestro reto en adelante es fortalecer la cultura y mantenernos unidos en la construccion de una nueva sociedad. La inteligencia y el espiritu solidario de nuestra gente son las valiosas herramientas con las que contamos para realizar esta tarea..