Primavera 2007
Solo hay una fuerza sanadora, y es la naturaleza.
(Arthur Schopenhauer)
Mis favoritas son las carreteras que no han sido transitadas durante años. A veces dejo un tronco en el camino para ver si alguien pasa por aquí. Cuando vuelvo uno o dos años después y veo que el tronco no ha sido movido pienso que sigo sin tener seguidores.
Chernóbil se olvidó tan fácilmente porque sólo lo sabíamos nosotros. Durante el primer año después del accidente no queríamos compartir nuestra historia con el mundo, ahora no podemos compartirla, difícilmente podemos recordarla nosotros mismos. Y todos los vestigios de la trágica historia son una memoria, frágil y desfigurada por el tiempo. En el futuro, la indiferencia de la gente apagará lentamente los pocos rescoldos restantes hasta que al fin se extingan. Después de eso Chernóbil permanecerá para siempre dentro del conocimiento de unas pocas e importantes eminencias y exclusivamente en propiedad de la naturaleza.
(Diario, Junio 2006)
Estas ya son propiedad de la naturaleza.
Y esta casa que brotó de la naturaleza y ahora vuelve sobre ella.
Un corzo cruza la carretera y salta a los jardines. Aquí están como en su casa y hay muchos. Me siento como si estuviera en un zoo excepto, por supuesto, que en un zoo yo sería libre y ellos serían el objeto de interés. Pero ahora ellos son libres y yo soy el objeto de su curiosidad. En otras palabras, en un zoo todas esas criaturas están reunidas para nuestro disfrute y aquí en Chernóbil somos nosotros los humanos los que estamos desperdigados para el disfrute de ellos.
Lo más llamativo de este lugar es un contraste entre el mundo de la Civilización, que es el nuestro, y el mundo de la Naturaleza. El mundo de la civilización es físico, mientras que el de Chernie es un mundo metafísico, "meta" significa "después", Chernóbil es el mundo después de la física. El mundo de la Naturaleza es algo que existe, "piensa por sí mismo" es la forma como el mundo ha sido durante millones de años antes de nosotros y como será después de nosotros, mientras la civilización es mera apariencia, no está "simplemente ahí", no se auto-mantiene. Es artificial y requiere ingeniería, arte y ciencia para mantenerse. Si queremos usar las ventajas de la civilización, pero no estamos preparados para preocuparnos nosotros mismos por su defensa estamos acabados. En un abrir y cerrar de ojos nos encontraremos sin civilización. Solo pulsar el botón equivocado y todo quedara en su estado primitivo. Miraremos a nuestro alrededor y veremos nuestra civilización desvanecerse en el aire como el hada Morgana. Los bosques primitivos aparecerán en su estado nativo, como si simplemente las cortinas cubriendo la Naturaleza pura hubieran sido retiradas.
Hace 15-20 años la gente seguía viviendo en estos pueblos. En 1991 la radiación más alta medida en los lugares donde la gente vivía era de 2000 microroentgen por hora. Los niveles han bajado desde entonces, y la gente también.
El valor máximo que he medido en un sitio donde vivía gente en el 2006 fue de 250 microR por hora, este nivel es bastante “suave” como para que los funcionarios de la ONU lo llamen "aceptable", pero en realidad no es seguro vivir en esos lugares.
Aquí hoy los niveles pueden variar de normales a varios cientos o incluso miles de microroentgen, pero esas mediciones no reflejan ni permiten hacerse a la idea ninguna situación real. El contador Geiger puede mostrar meramente una silueta de la radiación, su signo externo, su sombra. El cuerpo de la radiación solo puede ser detectado y explorado a través de un análisis especial. Incluso usando el más preciso dispositivo detector de radiación de bolsillo, no podemos ver más que la punta del iceberg. Leyendo el medidor geiger sabemos tan poco de la radiación como sabemos de las raíces de un árbol juzgando por su copa.
Leer un contador geiger nos dice más que los informes oficiales, pero menos que leyendo el libro de la Naturaleza. En Chernóbil leer del libro de la naturaleza es fácil, aquí los hechos mismos hablan elocuentemente de la verdad... allí donde me gire, me tropiezo con el hecho de que los humanos estamos proscritos y expulsados de la vida. Me esfuerzo en escuchar, con la esperanza de recibir una respuesta, pero todo lo que oigo es la voz de la Naturaleza gritando vehementemente a la raza humana: NO TE NECESITO!
Este es un monumento de la Segunda Guerra Mundial.
Aquí hay otro de la Gran Guerra Patriótica.
Este es un monumento de la guerra Civil. En 1921 el Ejército Rojo aplastó las tropas del Ejército Blanco en el campo de batalla. Me gustaría poder traer el detector de metal y excavar en este campo, desafortunadamente toda la rica historia de Chernóbil se ha perdido para la arqueología. Se ha perdido para siempre y siempre me arrepentiré de eso. Hay más de 2.000 ciudades y pueblos fantasma en el radio de 250kms (155 millas) alrededor del reactor de Chernóbil. Cada año que viajo, veo más y más lugares en ruinas.
Los únicos edificios en la región que no están en ruinas son las iglesias. Habiendo viajado a través de toda la región de Chernóbil todavía no he visto ninguna iglesia en ruinas. Los saqueadores son unos tipos supersticiosos y tienen miedo a robar en las iglesias. Además, miembros de las comunidades cercanas vienen a arreglarlas cada pocos años así que, como islas separadas, permanecen mucho más tiempo que todos los demás edificios del área.
Cuando viajo muchas veces visito estas iglesias. Camino a través de los ajenjos hacia la puerta, están abiertas, no hay nadie dentro. Ni sacerdote, ni olor a incienso, ni velas ardiendo, sólo un par de retablos baratos, tapices, una ligeramente radioactiva Biblia e imágenes de Santos en las paredes. Me doy cuenta que la Biblia está abierta en donde se cuenta la era del ajenjo. Entonces permanezco un rato en contemplación, y mirando la imagen radioactiva de Jesús me pregunto a mí misma, '¿Cuánto tiempo estas iglesias estarán aquí? ¿Podrán vivir sin personas?. ?'
Dejo estas preguntas para alguien que viaje hasta aquí en el futuro y vuelvo a la carretera para continuar mi viaje.
