250 mil personas desfilaron casi 4 horas,
juraron por la libertad, cantaron y bailaron

Cuatro Suyos fue la fiesta de la democracia

• Otros cientos de miles marcharon en varias ciudades del país

Por Humberto Castillo

La voz alta, límpida, sonora de la niña Lucía Arias se expandió por todo el Paseo de la República:
—¡Peruanos!... ¡Peruanos! Juráis por Dios y la Patria, por nuestros héroes y mártires, por nuestros ancianos y por nuestros niños... Juráis por el pasado glorioso y por el futuro pacífico, grande, justo y democrático que habremos de construir, luchar sin descanso hasta que la dictadura que asola nuestra tierra sea derribada.
—¡Sí, juro!, respondió el pueblo, el brazo derecho en alto, el corazón latiendo aceleradamente.
La niña volvió a preguntar:
—¿Juráis, peruanos, luchar sin tregua hasta que en nuestra patria se instaure el imperio de la plena libertad, de la plena democracia y de la plena justicia?
—¡Sí, juro!, replicó de nuevo el pueblo.
Por tercera vez, la misma niña interrogó:
—¿Juráis, peruanos, hacer todo esto para que en la patria nuestra los niños volvamos a sonreír y los viejos a llevar su ancianidad sin dolor?
—¡Sí, juro!, afirmó el pueblo otra vez.
Lucía dijo, entonces, rompiendo el silencio:
¡Si así lo hiciereis, que vuestra conciencia os premie... si no, que ella queme en vuestras almas!

Los cinco pututeros, con sus trajes andinos y multicolores, lanzaron al viento inmemoriales melodías.
Entonces, el pueblo, abigarrado y fervoroso, empezó a gritar ¡Perú, Perú, Perú! En el Paseo de los Héroes Navales había unos 250 mil peruanos de todas las edades y razas.
Eran las 9 y 45 de la noche y el mitin de las fuerzas democráticas llegaba a su cúspide.

..........Momentos antes, Claudia Dammert había recitado un poema escrito para la ocasión, que reseñaba hechos históricos y recordaba a hombres ilustres como Grau y Bolognesi, Mariátegui y Haya de la Torre, González Prada y César Vallejo y Víctor Andrés Belaunde.
Los pututeros habían difundido una hermosa sinfonía con sus viejos instrumentos y antes, la multitud había entonado, a todo pulmón, el himno nacional.
El mitin fue precedido de un gran desfile de casi cuatro horas, en el que participaron todas las fuerzas democráticas, las organizaciones vecinales y sociales, los sindicatos, los estudiantes, los jóvenes y viejos, los trabajadores y los intelectuales, los artistas, los hombres y mujeres de todas las razas y de todos los lugares.
Nunca antes se había reunido allí, en el Paseo de la República, una muchedumbre tan grande, tan fervorosa, tan aguerrida.
Todo ese vasto escenario, considerado como uno de los más amplios de Lima, fue repletado por un gentío enorme, que rechazó unánimemente la dictadura y reclamó la restauración de la democracia y de la libertad en el Perú.
El desfile fue largo, vistoso, colorido, multirracial y lleno de fervor.
De los cuatro suyos, llegaron hasta esa plaza delegaciones que portaban banderas, cartelones con lemas de todo tipo, sencillos unos, beligerantes otros.
Desfilaron festivamente, alegres las delegaciones del norte, del sur, del este, del oeste, de la costa, del ande, de la selva. Y desfilaron también los vecinos de todos los distritos de Lima.
El desfile fue abierto por un escalón del Sutep, cuyos militantes portaban banderas rojas.
Siguieron los jóvenes, los portuarios, los mineros, los textiles, los jubilados, los pensionistas, los periodistas, los trabajadores de construcción civil, las integrantes de los comedores populares y de los comités del vaso de leche, los petroleros, los médicos, los abogados, etc.
Los jóvenes y las mujeres dominaban el desfile. Marcharon alegremente, agitando sus banderas, a veces cantando y bailando.
Los provincianos, los que procedían de los cuatro suyos, vestían sus atuendos multicolores y muchos conformaban comparsas que danzaban al compás de su propia música, instrumentada por sus propias bandas.
La mayoría de ellos portaba banderas peruanas, o banderas rojas y blancas, otros los pendones del Tahuantinsuyo. Las agitaban al compás de una marcha que tocaba una banda de músicos.
Por los parlantes, resonaba un canto que fue la música de fondo y cuya letra resonaba como una letanía: ¡Y va a caer, y va a caer, la dictadura va a caer!
Los manifestantes portaban también todo tipo de carteles con lemas de toda índole y sabor.
Todos o casi todos rechazaban la dictadura, cuestionaban severamente y hasta con cólera la gestión de Fujimori. Otros reclamaban libertad y democracia. Otros repudiaban la actitud de los congresistas tránsfugas, acusándolos con sus nombres.
Un cartelón decía: Poder Judicial: "Nosotros también reclamamos plena autonomía». Otro exigía nuevas elecciones y otro decía: «Sin Tribunal Constitucional no hay legalidad».
Un grupo de mujeres desfiló blandiendo ollas vacías.
Los partidos políticos estuvieron presentes. El Apra volvió con fuerza a las calles, con un escalón numeroso, el más numeroso y organizado de la noche, con banderas blancas y su estrella de cinco puntas. Los máximos líderes de ese partido estaban metidos dentro de ese escalón. Un gran retrato de Haya de la Torre encabezaba el desfile aprista.
Desfiló también una delegación de Acción Popular y entusiastas escalones del Partido Comunista, de la Nueva Izquierda, de Demos, de la Juventud Socialista que alzaba cuadros con el barbudo rostro del Che Guevara, del Partido Socialista de los Trabajadores.
Pasó un escalón de los retirados de la policía y recibió grandes aplausos
Desfilaron saltimbanquis, danzarines, pregoneros, deportistas, campesinos con sus chullos y sus ojotas. Algunos lanzaban gritos en quechua: ¡Kausachum, democracia!
En la tribuna, ex candidatos presidenciales como Andrade y Castañeda, políticos de renombre como el ex presidente Fernando Belaunde, los observadores internacionales, miraban admirados ese largo, variopinto, fervoroso desfile.
El diputado Luis Carlos Hernández, de México, uno de esos observadores, comentó: «Esto es impresionante».
A las 8 y 45 de la noche terminó el gran desfile. Se iniciaban los discursos. La voz de líderes provinciales se confundió al final con las de Belaunde y Toledo.
responsabilidad de proteger a los ciudadanos en su expresión política.

Tendrá gabinete a la sombra

Toledo anuncia creación de Frente Democrático
de Unidad Nacional

...........UEl líder de Perú Posible, Alejandro Toledo, orador final del mitin de ayer, anunció la constitución de «un gobierno paralelo» con «un gabinete a la sombra», que se encargará de examinar si el tercer gobierno que este viernes inaugura de manera ilegal el presidente Alberto Fujimori «cumple con sus promesas electorales». Toledo dijo que dicho gobierno paralelo está integrado por personalidades «dignas y limpias».
«Esta noche se inicia el rescate de la democracia, justicia y dignidad para el pueblo peruano», expresó anoche el líder de Perú Posible ante una multitudinaria manifestación conformada por hombres y mujeres del Perú profundo que llegaron hasta la capital para expresar su rechazo al gobierno del presidente Alberto Fujimori.
«Lo empujaremos contra la pared (a Fujimori), para que dé cuenta», dijo Toledo ante el aplauso de los miles de manifestantes, quienes coreaban ¡y va caer, y va caer, la dictadura va caer!
Durante su discurso, que se inició a las 10:55 de la noche y concluyó una hora después, afirmó que la Marcha de los Cuatro Suyos es el inicio del camino para rescatar la democracia que «muy pronto tendrá un nuevo amanecer».
Toledo fue claro en afirmar que el pueblo no permitirá que el mandatario, que inicia hoy su ilegal tercer gobierno, se quede cinco años más en el poder.
Rindió homenaje a los hombres y mujeres que sorteando diversas penurias y burlando el cerco policial lograron llegar a Lima para estar presentes en esta movilización que marca un hito en la historia del Perú.
«El país vive la hora histórica de definición política y social y esta entusiasta manifestación es un claro ejemplo de la convicción existente en el pueblo para derrotar a un régimen autoritario y antidemocrático», precisó.
Indicó que la presencia de miles de peruanos en el Paseo de los Héroes Navales es un mensaje de esperanza y voluntad de quienes desean un amanecer distinto.
El líder opositor dio también un plazo de dos meses al nuevo régimen de Fujimori para cumplir con los mandatos mínimos planteados por la Organización de Estados Americanos (OEA) «a fin de recuperar la democracia del país». Dijo que le daba esa plazo si es que hoy lograba jurar en algún rincón escondido, protegido por la fuerza. Toledo insistió en su demanda de realización de nuevas elecciones generales. Sin embargo, aclaró que él no está actuando como candidato. «Sólo estoy acá para dedicarme con zapatos y todo a la lucha por la restauración de la democracia», aclaró.
En otro momento de su discurso hizo un implícito llamado a la desobediencia civil, al plantear a los cuatro suyos a elegir los gobiernos regionales del Perú. «Ha llegado el momento de elegir a nuestras autoridades, esto no depende del gobierno (porque), está en nuestras manos», dijo.
«Hemos vencido el miedo contra la dictadura y el poder prepotente», expresó ante el aplauso de la multitud señalando que daba al mandatario reelecto un plazo de dos meses para cumplir al menos tres condiciones: la salida del gobierno del asesor presidencial Vladimiro Montesinos, la restitución del Tribunal Constitucional y la plena vigencia de la libertad de prensa

Maestros, mineros, jubilados, portuarios y petroleros
integraron el escalón Chinchaysuyo

¡Democracia sí, dictadura no!

Por Flor Huilca

...........Al grito de ¡democracia sí, dictadura no! y ¡urgente, urgente, nuevo presidente!, el escalón Chinchaysuyo, integrado por organizaciones sindicales y delegaciones del norte del país, dijo también ¡presente! en la marcha popular que anoche reunió a decenas de miles de peruanos en el Paseo de los Héroes, frente al Palacio de Justicia.
Unos diez mil integrantes del Chinchaysuyo se preconcentraron en la Plaza Dos de Mayo, donde la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP) y sus bases se confundieron con las delegaciones de Piura, Chiclayo, Chimbote, Ica, además de grupos del Callao, Ventanilla y partidos de izquierda.
Contrariamente a la campaña de desprestigio que lanzó el gobierno, el desplazamiento de los gremios fue absolutamente pacífico. No hubo ataques a la propiedad privada ni se intentó quemar llantas, como maquiavélicamente anunciaron en los días previos la prensa chicha y los canales adictos al gobierno.
Una enorme banderola de la CGTP con lemas alusivos a la protesta cívica encabezó el escalón del Chinchaysuyo que avanzó hasta el Paseo de los Héroes por la avenida Wilson. Tras la bandera iban dirigentes de la central de trabajadores, el Sutep, construcción civil, el sector Salud, el Frente Amplio, los mineros y jubilados.
Tras ellos se ubicó la delegación de portuarios, de marinos mercantes, Perú Posible de Barranca, los docentes de la Universidad de Ica, la juventud chalaca, la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), los portuarios, el Frente de Defensa del Callao, los trabajadores de Sedapal, del Hospital Loayza y los petroleros de Talara.
La izquierda peruana estuvo representada en este escalón por partidos como el Movimiento Nueva Izquierda, Juventud Popular, el Partido Comunista Peruano, el Partido Socialista de los Trabajadores y la Juventud Socialista. Una enorme bandera peruana encabezó a los grupos políticos.
Durante el recorrido se produjeron muestras de afecto. Los conductores de algunos vehículos tocaban el claxón, los transeúntes aplaudían jubilosos y los vecinos de los edificios lanzaban pica pica, agitaban incesantemente sus banderas peruanas y golpeaban entre sí tapas de ollas.

Lo injusto de la Justicia
Mientras las delegaciones del Chinchaysuyo tomaban sus emplazamientos, personal de seguridad de Palacio de Justicia trató de provocar a los manifestantes pacíficos echando agua en las escalinatas de ese recinto, supuestamente para evitar que tomara posesión del lugar.
Antes de suspender la medida, los vigilantes particulares pidieron el apoyo de la policía para continuar con su labor. Fue entonces que una vendedora ambulante logró escabullirse del cerco policial e increpó a los vigilantes por su actitud.

Es el día central de los 4 Suyos; en la noche
será el Juramento a la Lealtad

El Pueblo hoy a las calles para demandar democracia

En forma pacífica y sin más armas que su valentía y dignidad, miles de ciudadanos se movilizarán hoy hasta las primeras cuadras del Paseo de la República para mostrar su rechazo al ilegal tercer mandato de Alberto Fujimori. Miles de personas han llegado de todo el país para participar en la Marcha de los Cuatro Suyos, demostrando así su rechazo al gobierno presidido por Fujimori.

.........."Se trata de un evento masivo, una manifestación histórica, tal vez la más grande que ha habido y que busca protestar, de forma fuerte y clara, por el ilegal tercer mandato del señor Fujimori", dijo Carlos Bruce, coordinador general de la Marcha de los Cuatro Suyos.
Calculó que esta jornada reunirá unas 200 mil personas que desfilarán para reiterar su compromiso de luchar por la plena restitución de la democracia y el fortalecimiento del Estado de Derecho.
"Es nuestra forma de decir que no desmayaremos en el esfuerzo hasta que la democracia sea una realidad", señaló.
Asimismo insistió en que se trata de una movilización sin violencia, con la cual el pueblo quiere dejar escuchar su voz de disconformidad con los sucesos que están ocurriendo en el país.
"No intentamos tomar Palacio ni el Congreso. Es una protesta pacífica y esperamos que no se repitan los incidentes violentos que protagonizó la policía contra mujeres indefensas durante la visita de la Comisión de Alto Nivel de la OEA", sostuvo.

Desfile y juramento
Las preconcentraciones se han previsto para las 3 de la tarde en los cuatro suyos ya determinados: Chinchaysuyo (Plaza Dos de Mayo), Collasuyo (Parque de la Reserva), Antisuyo (Plaza Manco Cápac) y Contisuyo (Parque Universitario).
Para facilitar el traslado de la ciudadanía que desea participar en el desfile se ha distribuido su ubicación, teniendo en cuenta el distrito en el que vive o están alojados.
De tal forma que en el Chinchaysuyo se concentrarán todas las personas que lleguen del cono norte, como Carabayllo, Puente Piedra, Comas, Independencia, Los Olivos, San Martín de Porres, Ancón y El Callao.
En el Collasuyo, los distritos céntricos y sureños como Miraflores, Surquillo, Surco, San Miguel, Pueblo Libre, Jesús María, San Isidro, Lince, San Borja, Magdalena, San Juan de Miraflores, Barranco, Chorrillos, Villa María del Triunfo, Villa El Salvador, Lurín y Balnearios.
En el Antisuyo, los que provengan de La Victoria, El Agustino, Santa Anita, Ate-Vitarte, Ñaña, Chaclacayo, Chosica.
Y en el Contisuyo, los habitantes del Cercado de Lima, Barrios Altos, Rímac. Breña, San Juan de Lurigancho.
Desde allí los manifestantes partirán hacia sus respectivos «centros de emplazamiento», ubicados en los alrededores del Hotel Sheraton.
A las 6 de la tarde comenzará el gran desfile de los Cuatro Suyos, que culminará con una singular ceremonia de juramento de lealtad a la democracia.
Una niña de 12 años, vestida simbólicamente con el traje de la patria, tomará el juramento a todos los asistentes, por el cual adquieren el compromiso de continuar luchando hasta que se acabe con la dictadura.
Cerca de la medianoche se realizará una verbena para celebrar la Nochebuena Patriótica y finalmente el mismo 28, a las 9 de la mañana, se hará un recorrido hacia Palacio de Gobierno y el Congreso de la República.

Entre ellas, Rigoberta Menchú, Felipe González
y ex embajador Dennis Jett

Personalidades del mundo saludan
expresión democrática cívica

...........Su total apoyo a la Marcha de los Cuatro Suyos hicieron llegar ayer importantes personalidades internacionales, quienes se solidarizaron con la protesta popular en contra del ilegal tercer mandato del presidente Alberto Fujimori.
El ex presidente de Costa Rica y Premio Nobel de la Paz, Oscar Arias, lamentó no haber podido estar presente en la marcha, pero se solidarizó en la lucha que viene librando la oposición para la restitución del Estado de Derecho en el Perú. "Amigos y amigas, siento mucho no haber podido acompañarlos en esta cruzada, sin embargo quiero expresarles mi solidaridad y lamentar nuevamente que la OEA no haya condenado sin miramiento el irrespeto a la democracia perpetrado por el presidente Fujimori", señala Arias en su mensaje. La juramentación de Fujimori, agregó, "no podrá disimular sus atropellos al derecho electoral y los derechos humanos".
Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz, dijo que la expresión del pueblo en las calles es una muestra de repudiar al autoritarismo de un gobierno que no respeta la democracia.
"No he podido estar a lado de ustedes, pero me solidarizo en su lucha y les deseos muchos éxitos. Sigan en su lucha por un ideal de paz que incluye la justicia y la libertad para todos ustedes", manifestó.
Felipe González, ex presidente del gobierno español, también se sumó a las adhesiones y dijo que las reivindicaciones que realiza el líder Alejandro Toledo para que haya elecciones limpias y transparentes son válidas.
Manifestó que México ha hecho un gran esfuerzo de legitimidad y transparencia, por lo que el Perú no puede quedarse atrás desde el punto de vista democrático.
Elliot Abrahams, ex subsecretario de Estado de EEUU para América Latina, sostuvo que "la marcha de los cuatro suyos demostrará que el pueblo peruano no acepta sin protestar el tercer mandato" del presidente Fujimori.
Dijo que el pueblo quiere una auténtica democracia y un progreso económico con un nuevo presidente.
El ex embajador norteamericano en el Perú Dennis Jett sostuvo que las fuerzas democráticas están expresando su posición e hizo un llamado para que la marcha se realice sin violencia.
"Los manifestantes deben respetar la ley y las autoridades deben respetar los derechos de los manifestantes", dijo el diplomático.
Viviana Kristicevic, abogada del Centro para la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil), sostuvo que durante las marchas pacíficas los ciudadanos expresarán sus derechos.
"Creo que los peruanos democráticos que rechazan el fraude están haciendo uso de su derecho", manifestó.
Gerardo Le Chevalier, representante del Instituto Nacional Demócrata, expresó que el Perú debe seguir el buen ejemplo de México, donde el presidente Ernesto Zedillo estableció los fundamentos para la democracia en su país al permitir una transacción de gobierno democrático y con transparencia.
La peruanóloga de la universidad norteamericana George Washington, Cinthia Mc Clintonck, expresó su solidaridad con la movilización de las fuerzas democráticas y dijo que el gobierno del presidente Fujimori "es un gobierno con poca legitimidad dentro y fuera del Perú".
José Miguel Vivanco, representante del Human Right Watch, calificó de importante la protesta del pueblo peruano, señalando que las movilizaciones son un acto pública que forzará al régimen del presidente Alberto Fujimori terminar con los abusos.
Michel Zari, miembro del Instituto Republicano Internacional, manifestó que la comunidad internacional aún no legitimiza las elecciones, y la instalación del gobierno el próximo 28 de julio se verá afectada en el exterior por la falta de democracia en el Perú.
"La marcha es una iniciativa de la población peruana por su lucha por una auténtica democracia", agregó.
Charles Costello, del Instituto Nacional Demócrata, sostuvo que las movilizaciones son un derecho garantizado en la Constitución de cualquier país democrático, por lo que el gobierno peruano tiene la responsabilidad de proteger a los ciudadanos en su expresión política.

Llenaron la Plaza Bolognesi ante llamado
de Mujeres por la Democracia

Más de 50 mil personas iniciaron histórica jornada

Por Raúl Sánchez

..........Miles de mujeres, encabezadas por Eliane Karp, esposa del líder de Perú Posible, Alejandro Toledo, marcharon ayer por la avenida Arequipa. Llegaron a la Plaza Bolognesi, donde se reunieron con diversas organizaciones políticas y sindicales en un mitin denominado «Por la democracia».
Se concentraron más de 50 mil personas. Estuvieron presentes diversos líderes políticos del país y el extranjero. La manifestación se desarrolló pacíficamente, pero fue enérgica la protesta de los hombres y mujeres de que allí se dieron cita.
Las mujeres estuvieron vestidas de negro, en señal de luto, pues consideran que con el régimen de Alberto Fujimori, y por su intención de perpetuarse en el poder, la democracia está muerta, y sólo queda la lucha para imponerla nuevamente como única forma de lograr el desarrollo del Perú y de los peruanos.
Entre las dirigentas estuvieron Gina Vargas, Elsie Guerrero, Diana Miloslavich y Susana Villarán. Al acto acudieron también las congresistas Anel Townsend, Mercedes Cabanillas y Gloria Helfer.
El local de la Confederación Campesina del Perú (CCP), organización también convocante del mitin, sirvió para recibir a las distintas personalidades que se hacían presentes, entre ellas el ex presidente Fernando Belaunde Terry y su esposa Violeta Correa.
El primero en hacer uso de la palabra fue el ex presidente Belaunde. Dijo que la democracia en el Perú estaba herida, y que el pueblo peruano no podía quedarse mudo.
«Necesitamos restablecer la democracia, emprender el verdadero desarrollo, unirnos para lograr nuestros objetivos absolutamente democráticos», señaló mientras la multitud coreaba «Fuera Fujimori, el pueblo te repudia», « el chino va a salir, el pueblo va actuar».
A su turno, Violeta Correa manifestó que compartía junto a todos los peruanos una gran preocupación por la situación que atraviesa actualmente el Perú, y expresó su apoyo a la lucha emprendida.
Eliane Karp agradeció al pueblo peruano por el coraje demostrado al venir desde lugares alejados del país, y pidió marchar pacíficamente, sin perder la tenacidad de sus convicciones, sin dejarse amilanar.
El dirigente de la Confederación Campesina del Perú, Lorenzo Ccapa, denunció que la Policía Nacional intentó detener la marcha de las delegaciones campesinas que vienen a Lima procedentes de Huánuco, Puno y Cusco.
Desde el mismo lugar pronunciaron sus discursos las dirigentas de organizaciones campesinas y diversas personalidades políticas, entre ellas la diputada argentina Vilma Ripoly y el secretario general de los sindicatos de maestros de Rio Grande do Sul, de Brasil, Neyra Olivera.

Desde temprano
Las calles del centro de Lima se vieron ayer, en el primer día de la protesta de los Cuatro Suyos, inundadas de miles de hombres y mujeres de todas las edades y condición social, que con sus banderolas en mano reclamaban a viva voz por el restablecimiento de la democracia en el Perú y el cese del gobierno autoritario de Alberto Fujimori.
En la manifestación participaron también los jubilados, maestros, trabajadores de los mercados y de los distintos gremios sindicales del país.
La Plaza Bolognesi fue totalmente copada por los manifestantes que unieron sus voces en un sólo lema: «Democracia sí, dictadura no». Todos levantaban las manos al tiempo de reclamar el fin del autoritarismo con la salida del poder del presidente Alberto Fujimori.