"Soy el descamisado de los ojos de azufre
El solitario que se masturba frente a la estatua mutilada
El vagabundo que se encuentra la luna entre los basureros
La muchacha de piedra y su amante sin rostro
La alegría de las putas en medio de la lluvia
La pareja de los enanos sordos y su coreografía
Soy
...el maniquí acribillado por la luz
...la estaca del tedio en pleno corazón
...la legión famélica de la barbarie
...la cicatríz del sueño
Soy la ciudad
Harapienta princesa lamida por los cuervos."

Bogotá, Jorge Ávila.

El tema de Bogotá by Night es la supervivencia, como lo ha sido casi durante toda sus historia. La capital de una de las naciones -si no la más- violentas del mundo es inexorablemente, aunque de manera más sutil de lo que los extranjeros imaginan, un campo de batalla.

Batalla entre Vampiros y Mortales -cazador y presa, Mortales y Mortales -por la supervivencia, Vampiros y Vampiros -Camarilla vs. Sabbat, etc.; la ciudad desde hace mucho se halla inmersa en un eterno conflicto por diversas causas que van desde el económico hasta lo social pasando por lo sobrenatural.

Pero como se ha dicho, la guerra se da tan suave que no se nota al estar inmerso en ella y por ello el otro tema paralelo de Bogotá by Night es las máscaras como un reflejo de la desconfianza que yace en el alma de todos los habitantes.

Bogotá se "siente" en el WoD como una ciudad dividida, pero con una atmósfera general de incertidumbre, de peligros escondidos peores que los que se ven; es una ciudad de inmigrantes, de habitantes que no pertenecen a ella de nacimiento aunque si se alimentan de su sangre. En Bogotá los Bogotanos son pocos y los que vienen de otras regiones en su mayoría no la ven como su hogar, hay personas que llevan 30 años en la ciudad y aún así la consideran ajena y la tratan como tal.

En Bogotá hay presencia de todos las clanes básicos de la Camarilla más algunos de los del Sabbat, además hay presencia Baali, aunque completamente desconocida a los demás clanes y Bloodlines. La presencia independiente se reduce a un grupo Giovanni, un Assamite al servicio de la Camarilla y recientemente la reentrada de los Followers of Set.

Pero Bogotá no tiene el epítome de Reinado de Máscaras tan sólo por los vampiros y sus relaciones, por el contrario esa frase se extiende mucho más allá de lo que ellos mismos conocen o son capaces de admitir. En la ciudad existe un grupo de mortales que ha decidido tomar las riendas de su destino en lugar de dejarlo en manos de los no vivos y además, aunque muy pocos lo saben, hay otra fuerza muy poderosa que eclipsa a todas las demás en su voracidad y necesidad de poder.

En los últimos años sin embargo los esfuerzos por hacerla más cercana y amable para con sus habitantes han surtido efecto y tal vez los hijos de los que la han poblado por décadas vean a la a Atenas Suramericana con ojos diferentes a los de sus padres y abuelos.

Bogotá no es ni Gótica ni Punk, en cierta medida es ambos, en una confusa mezcla; entre las muchas consecuencias del 9 de Abril del 48 está el desorden urbanístico y arquitectónico de la ciudad, como alguien dijo: Bogotá es una ciudad que sueña con ser Londres, con ser Nueva York o con ser Madrid, y por sectores lo logra, su arquitectura mezcla los más disímiles estilos, desde el colonial y republicano hasta los rascacielos y edificos inteligentes, pasando por el victoriano o el art-nouveau. Igualmente ocurre con sus habitantes quienes al provenir en gran medida de otras partes del país y del mundo son mezclas muy particulares de ideas y costumbres raizales mezcladas con lo cosmopolita de una metrópoli.

Cada sector de la ciudad tiene su propia y particular ambientación, así como sus habitantes también tienen un comportamiento específico y una forma de ver y enfrentar a la ciudad y los habitantes de otros sectores.

Por último está el peligro inminente de la violencia del país que la ha llenado de desplazados, y que ha abierto desde hace mucho las puertas para los múltiples intentos de incursiones por parte del Sabbat desde su fortín en Medellín.

Bogotá está regida por una Camarilla en guerra sutil (pero guerra al fin y al cabo) con el Sabbat cuyos miembros ya se han posisionado en la ciudad. Es además el centro administrativo, económico, cultural del país. Para los vampiros de Bogotá, la única ciudad del país es ésta, lo demás no son más que aldeas venidas a más, y es por eso que las múltiples oleadas de personas de otras regiones los afectan enórmemente. El Sabbat desde su sede en Medellín rige los ataques hacia la capital y actualmente están empezando a sentir las consecuencias de ello, la serie de atentados en la capital de Antioquia tienen el sello inconfundible de las "fuerzas especiales" de la princesa.

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