Pie de foto7.
Pero el mencionado error no es el único que cometimos en esa ocasión, sino que
al comenzar el envío de los compañeros solicitados por Uds. cometimos dos nuevos
errores,
de cierta importancia:
mandamos un espía, posteriormente confeso, y un desertor. Nunca
autocriticaremos suficiente nuestra incapacidad e irresponsabilidad, con
nuestros fallos.