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El fenómeno OVNI: ¿Amenaza militar?
Scott Corrales
Bradford - Estados Unidos
lornis@aol.com
La especulación siempre ha sido considerada como el vástago ilegítimo de la
verdad y de la ficción, y la imaginación ha sido condenada muchas veces como el
último refugio de los incompetentes (los que son capaces de hacer algo lo hacen,
los demás sólo imaginan). La ufología, sin embargo, nos deja muy poco de que
aferrarnos a la par que intentamos adquirir un conocimiento más profundo del
reto que nos enfrenta. Por consiguiente, la especulación en este campo no deben
percibirse como una deficiencia al buscar respuestas a la interrogante que nos
ha desafiado desde la década de los '50: ¿Corre nuestro planeta el riesgo de una
invasión inminente por fuerzas de una potencia enemiga desde el espacio
exterior? Y de ser así: ¿Qué planes tienen las fuerzas aéreas del mundo para
contrarrestar esta amenaza?
Ambos planteamientos han dado lugar a una jocosidad inmerecida tanto dentro como
fuera de la ufología, lo que inmediatamente pone fin a cualquier discusión del
asunto. No obstante, pocos parecen darse cuenta de que los ejércitos terrestres
poseen dispositivos que son un tanto excesivos para confrontar las amenazas que
existen en el mundo de la posguerra Fría.
La ciencia-ficción hábilmente expresó la paranoia y el miedo de los Estados
Unidos hacia lo "alienígena" en una serie de largo metrajes en la década de los
'50 y comienzos de los '60. Pero no fue hasta comienzos de los años '70 que una
serie de ciencia-ficción, que apenas duró una temporada en el aire, reflejó la
contienda entre una rama oculta de los ejércitos mundiales e invasores
extraterrestres asolando nuestro planeta en busca de órganos y fluidos vitales
extraídos a seres humanos - una perspectiva sorprendentemente profética a la luz
de las teorías que se barajan en la actualidad.
Un programa televisivo revolucionario
El programa, llamado UFO y dirigido por el cineasta británico Gerry Anderson,
nos muestra las operaciones del grupo SHADO (Supreme Headquarters - Alien
Defense Organization - el Cuartel General de la Organización de Defensa
Alienígena) y su devastador armamento de corte futurista en la tierra, los mares
y el espacio. Si bien no se trataba de una serie con la mejor actuación o buenos
guiones, el concepto general resultaba altamente profético: una raza de
extraterrestres humanoides se dedicaba al secuestro de seres humanos durante
décadas en calidad de fuente de órganos internos para los elementos menos
afortunados de su sociedad. Este descubrimiento por parte de los gobiernos
mundiales resulta en la creación de las sorprendentes defensas de SHADO así como
la iniciativa de enviar una sonda no-tripulada al mundo de los alienígenas, que
resulta sorprendentemente parecido al nuestro. Los humanos capturados por el
enemigo adquieren sorprendentes fuerzas físicas y mentales; los pilotos
capturados se ven obligados a respirar el oxígeno líquido de los alienígenas;
platillos voladores en forma de trompo chocan en los recónditos bosques de
nuestro mundo y son buscados por equipos de "recolección" con el propósito de
apoderarse de los restos de las naves y sus ocupantes; satélites artificiales
denominados SID (Space Intruder Detector) informan a los de SHADO sobre la
irrupción de OVNIs en la atmósfera terrestre.
Los imaginarios satélites SID encontraron sus contrafiguras en el actual sistema
de satélites DSP (Defense Support Program), un ingenio orbital de alta
tecnología. De acuerdo con algunos investigadores, el sistema DSP ha sido
utilizado en un esfuerzo por detectar OVNIs en la órbita terrestre desde
mediados de 1970. En este caso, la ficción se mantuvo al corriente de la
realidad.
Una fuente de
preocupación
A pesar de que el panel científico de la CIA había determinado en 1953 que los
OVNIs no representaban un riesgo inminente para los Estados Unidos, la USAF
descubrió que la verdad era otra. En ese mismo año, la detección de un ovni por
una instalación de radar en la base aérea Truax resultó en el "scramble" de un
caza F-89 desde la base Kinross. El piloto persiguió al intruso sobre el Lago
Superior por espacio de casi diez minutos, acercándose a su objetivo mientras
que los radaristas seguían su progreso. Los "blips" en las pantallas de radar en
Truax se combinaron repentinamente, lo que no causó preocupación hasta que las
señales de los dos artefactos aéreos no se separaron. Los alucinados radaristas
vieron como la solitaria señal desaparecía del radar. Los intentos de rescate
por fuerzas canadienses y estadounidenses fueron infructuosos, y jamás se supo
el paradero del piloto. El conocido investigador Kevin Randle, cuyo libro The
UFO Casebook incluye el caso de Kinross, apunta que la mayoría de los pilotos en
la base aérea tenía la certeza de que el ovni había capturado al F-89 y su
piloto. El informe preparado por la Fuerza Aérea indicó que el incidente sólo
había sido un "accidente de aviación".
A fines de los '50, el subjefe del estado mayor del servicio de inteligencia del
ejército de los EE.UU. había formado una "Unidad de Fenómenos Interplanetarios",
ilustrando la preocupación sobre estos asuntos imprevistos entre la jerarquía
militar. El Jefe del Estado Mayor de la USAF, el general George Brown, describió
en una ocasión la sarracina ocasionada por avistamientos de OVNIs en la costa de
Vietnam en 1968, resultando en daños importantes a un destructor de la armada
australiana. A fines de los '60, un caza F-106 se lanzó a interceptar a un ovni
a 15.000 pies de altura. En una escena digna de las persecuciones espaciales de
La Guerra de las Galaxias, el piloto de la USAF persiguió al desconocido a baja
altura sobre los valles y montañas de la remota región del oeste americano. La
persecución culminó con el estrellamiento del piloto contra un risco mientras
que el ovni se alejaba verticalmente hacia el firmamento (Saga UFO Report,
invierno 1974).
La fuerza aérea de la antigua Unión Soviética también tuvo sus infortunios
durante los encuentros con aparatos de procedencia desconocida, como pudo verse
en un informe que salió a luz pública en años recientes. En 1981, la superficie
inferior de un caza MIG fue desgarrada por una enorme bola de fuego cuya
descripción se asemeja a la de los "foo fighters" de la Segunda Guerra Mundial.
El teniente Boris Korotkov apenas consiguió regresar a su base después de que el
intruso causó que los motores del avión se apagaran. Dos años más tarde, cinco
MIG soviéticos fueron destruidos por otro "foo fighter" parecido.
Otro documento fascinante - un supuesto informe de la National Security Agency
con fecha de 1968 - incluyó la severa admonición de que el fenómeno ovni
representaba una amenaza grave para la Tierra. Dicho informe reza: "El mero
hecho de que el fenómeno OVNI ha sido atestiguado en todas partes del mundo
desde la antigüedad, y por nutridos grupos de científicos de buena reputación en
fechas recientes, nos señala enérgicamente que no todos los OVNIS son trucajes".
El informe añade ominosamente: "Si "ellos" te descubren, la vieja regla del
juego es que "ellos" son más avanzados tecnológicamente. La historia de la
humanidad nos muestra una y otra vez el trágico resultado de la confrontación
entre una civilización técnicamente avanzada y otra más primitiva". A manera de
conclusión, el supuesto informe de la NSA dice: "La investigación representa una
acción intensiva de emergencia con miras a aislar la amenaza y determinar su
naturaleza exacta. Estaría orientada hacia el desarrollo de medidas defensivas
adecuadas en un espacio mínimo de tiempo".
El fenómeno ovni también ha demostrado tener un interés poco saludable en
nuestros arsenales atómicos. Los escritores Lawrence Fawcett y Barry Greenwood,
cuyo libro Clear Intent: The Government Cover-Up of the UFO Experience
constituyó un hito de la investigación ovni, incluyeron un caso ocurrido en
octubre de 1975 durante el cual un extraño aparato se cernió sobre la base aérea
Loring mientras que los efectivos de la USAF podían hacer poco más que mirar.
Pero el caso más asombroso de este tipo lo es sin duda el que aparece en las
páginas del clásico UFO Dynamics del psicólogo Dr. Berthold E. Schwarz y que fue
protagonizado por un oficial jubilado de la USAF, se vio envuelto en las
operaciones de salvaguardar un bombardero B-52 cargado de bombas de hidrógeno
tras un aterrizaje de emergencia en Vietnam. Según el oficial, los guardias
destacados en torno al enorme bombardero dijeron haber escuchado sonidos de "clics"
provenientes del interior de avión como consecuencia de la aparición repentina
de un ovni sobre el aparato. Posteriormente, el oficial descubrió que el
armamento nuclear había sido neutralizado inexplicablemente tras la presencia
del objeto desconocido. El Dr. Schwarz señala que el mismo militar le dio a
entender que la explosión de una ojiva nuclear en la antigua URSS a fines de los
años '60 había sido causada por un ovni.
En 1980, la base aérea Kirtland en el estado de Nuevo México (famosa por el
papel que ocupa dentro de la mitología ovni) experimentó la falla total de sus
radares primario y secundario como consecuencia de una interferencia deliberada.
Aunque fue posible precisar la fuente de la interferencia, los sistemas no
fueron reactivados sino hasta cuatro más tarde. El sibilino informe de la USAF
manifiesta que "no puede descartarse la presencia de interferencia hostil...
dicho método ha sido utilizado en el pasado... los monitores de frecuencia
informaron que el haz de interferencia fue extenso y de un tipo desconocido a su
equipo electrónico". ¿Sería razonable especular sobre la formación de un "Mando
de Defensa Terrestre" (a falta de otro nombre) como consecuencia de estos
incidentes?
La creación de cazas y bombarderos de tecnología avanzada puede percibirse como
un intento de lograr paridad - si no superioridad - con los aparatos
supuestamente sólidos que denominamos OVNIs. La ufología ha estudiado cientos de
casos en los que interceptores convencionales han sido derribados del aire por
objetos desconocidos. En un caso particular, un ovni roció una sustancia que
hizo que las alas de los interceptores se supercalentaran , obligando a los
pilotos a regresar a sus bases. El bombardero B-2, el caza F-117A y otros
aviones "futuristas" bien podrían corresponder a esta iniciativa de defensa
terrestre.
Las declaraciones
de un presidente
A mediados de 1980, el ex presidente Ronald Reagan, a cuya instancia se comenzó
la "Iniciativa de Defensa Estratégica" (SDI, por sus siglas en inglés), hizo una
serie de declaraciones misteriosas (o tal vez mal entendidas) al respecto de la
posibilidad de una invasión alienígena. En diciembre de 1985, en un discurso a
los estudiantes y personal docente de la escuela superior Fallston, justo
después de haber hablado sobre la reunión cumbre de Ginebra y sus conversaciones
con Mikhail Gorbachev, el presidente musitó sobre la posibilidad de una amenaza
repentina de otro mundo sirviendo como el agente catalítico para fomentar la
unidad entre los países del mundo. Su discurso concluyó de manera abrupta luego
de esa última aseveración.
Dos años más tarde, durante la 42º Asamblea General de la ONU, el presidente
hizo hincapié en el tema nuevamente, diciendo: "A veces pienso lo rápido que se
desvanecerían nuestras diferencias si nos enfrentásemos a una amenaza
alienígena... y sin embargo, les pregunto: ¿acaso no existe una fuerza
alienígena entre nosotros ahora?..."
Se alega que el presidente Reagan reiteró su punto por tercera vez en mayo de
1988 durante una cena política en Chicago. Como respuesta a una pregunta que no
guardaba relación alguna con el tema, Reagan contestó que estaba seguro que los
humanos se unirían para luchar como hermanos contra las fuerzas de otro planeta.
Ningún periodista cuestionó las declaraciones del presidente, y permanecemos tan
perplejos hoy por sus comentarios como lo estuvimos en aquel entonces.
La respuesta armada
A pesar del sinnúmero de tratados que han proscrito la militarización del
espacio, la detonación de armas nucleares en la órbita terrestre y otras
aplicaciones bélicas, las naciones con acceso al espacio exterior han sometido a
prueba un número de artefactos bélicos en los últimos 20 años. A mediados de la
década de los '70, la Unión Soviética comenzó la experimentación con satélites
"cazadores / destructores", rayos láser y el FOBS (Sistema de Bombardeo Orbital
Fraccional). La década de los '80 presenció la introducción del sistema SDI,
conocido también como "Peace Shield" o "Escudo de la Paz", en el cual figuraban
conceptos avanzados como cañones electromagnéticos y otras armas alucinantes
como métodos para proteger a los Estados Unidos contra la agresión soviética o
ataques nucleares sorpresivos de pequeños países (Libia, Irak, etc.). Otras
fuentes han indicado que el grado de sofisticación y las capacidades de este
sistema iban mucho más allá del objetivo declarado, llevando muchos a pensar que
el programa "Star Wars" tenía un enfoque mucho más interplanetario.
El Dr. Richard Boylan, un psiquiatra e investigador ovni que se asignó la tarea
de visitar todas las instalaciones militares importantes del sudoeste americano,
informó al escritor C. D. B. Bryan que su visita a Tonopah, Nevada (cuartel
general del Air Force Defense Command) le ayudó a confirmar que se había
realizado mayor progreso sobre el proyecto SDI que lo públicamente admitido por
el gobierno. Boylan apuntó que las armas de pulsación electromagnética
desarrolladas por la AT&T y Sandia National Laboratory bien podrían estar
diseñadas para repeler aeronaves o astronaves no-terrestres, puesto que sus
capacidades son excesivas para la vaporización de proyectiles balísticos. La
posibilidad de que los sistemas bélicos de la SDI pudieron haber entrado en
funcionamiento a sabiendas del público es corroborada por la existencia del
"Proyecto Timberwind" (Proyecto ala de madera), la denominación codificada de
los colosales cohetes lanzadores ensamblados para colocar los componentes de SDI
en órbita. Se alega que estos monumentales lanzadores han sido vistos en la base
aérea Nellis.
Durante su recorrido, el psiquiatra visitó un museo administrado por el
Departamento de Energía, donde aprendió que los EE.UU. habían logrado la
capacidad de acelerar partículas capaces de rendir una explosión de energía de
trillones de voltios por medio de un diodo de una pulgada de grueso. Mientras
que dichas capacidades se ajustan perfectamente con las armas de rayos siendo
probadas (y posiblemente ya desplegadas) como parte de SDI, nuevamente resultan
excesivas para derribar un proyectil balístico, cuando experimentos con menor
consumo energético como el Homing Overlay Experiment (HOE) han comprobado que
los proyectiles balísticos pueden ser destruidos al sencillamente chocar contra
ellos a alta velocidad.
Con el paso de los años, también se ha documentado la existencia de otros
sistemas defensivos desde tierra al espacio. Entre ellos figura MIRACL (Mid-Infrared
Advanced Chemical Laser), que fue probado en la base de proyectiles White Sands
en Nuevo México en septiembre de 1985. Este "experimento de energía dirigida",
como lo describe la información del departamento de defensa, destruyó
exitosamente un lanzador de proyectiles balísticos, comprobando que las armas de
rayos habían dejado de pertenecer al mundo de la ciencia-ficción. Un año después
del debut de MIRACL se produjo la implementación del primer haz de partículas:
dicho experimento involucro el irradiación de una ojiva nuclear simulada con un
haz de protones de alta intensidad, resultando en la detonación del explosivo
dentro de la ojiva. En la primavera de 1989, el Láser Químico Alfa resultó
exitoso durante sus pruebas iniciales como candidato para un posible arma de
rayos de uso espacial. Se preparó una demostración exclusiva del sistema para
Yuri Nazarkin embajador de la ex-URSS en aquel momento, y una comitiva de
especialistas soviéticos - los "adversarios" contra los cuales se había
desarrollado el rayo mortífero. No cabe duda que la investigación y el
desarrollo de los sistemas defensivos es de carácter mundial. Desde 1985, cuando
el secretario de defensa Caspar Weinberger invitó a los aliados de la EE.UU. a
participar en el esfuerzo, el Reino Unido, Francia, Alemania, Israel y
presuntamente la Federación Rusa se han adherido al proyecto.
Pero la investigación no se ha circunscrito a los mortales rayos de energía
dirigida: el Lanzador Electromagnético Thunderbolt, uno de los conceptos para un
"cañón electromagnético" producidos bajo SDI, tiene el potencial para disparar
proyectiles a una velocidad en exceso de 8.6 millas por segundo. Estos pequeños
pasos hacia un mundo hasta ahora desconocido de armamentos ofensivos comprueban
que estamos desarrollando la capacidad de defendernos contra una amenaza mucho
mayor que las armas nucleares de países enemigos.
Espionaje y OVNIS
Según la revista militar Air Defense Weekly (Semanario de Defensa aérea), el
secreto y controvertido proyecto "Aurora" está relacionado con un avión
hipersónico potenciado por metano y capaz de alcanzar velocidades tan elevadas
como Mach 7 (5.000 millas por hora). Este super avión supuestamente tiene una
tripulación de tres pilotos y ha estado en servicio desde 1985, salvando la
distancia desde su base principal en Nellis AFB y la base aérea de Kadena en
poco menos de 2.5 horas, repostando combustible en el aire con aviones cisterna
KC-135Q modificados.
Nombres parecidos a los de películas de espionaje - "Snowbird", "Aquarius", "Redlight"
- manejados por los ufólogos a fines de los '80 y comienzos de los '90, pueden
haberse referido a proyectos reales de la USAF en vez de naves extraterrestres
recobradas. El ocultamiento de esta sorprendente tecnología bajo el cínico
disfraz de tecnología alienígena resultaría natural, ya que distraería a los
curiosos de cualquier interés en el "desacreditado" fenómeno ovni.
El espionaje y la ufología han mantenido incómodas relaciones en los últimos
treinta años. El fallecido científico y escritor Jacques Bergier, quien nunca
disimuló su incredulidad ante los OVNIs, señaló que los informes sobre platillos
voladores representaban una buena manera de informar a una potencia enemiga
acerca de la frecuencia y cantidad de oscilaciones de los radares que abarcan
una zona específica, la ubicación de la base aérea más cercana, y la naturaleza
de la reacción militar durante una crisis. Según Bergier, la antigua URSS era
sumamente estricta en este sentido: "todos los grupos de estudio sobre OVNIs
fueron desbandados y sus miembros enviados al Gulag. Los pilotos de
interceptores recibieron instrucciones estrictas de derribar cualquier cosa que
no tuviese el permiso necesario para entrar en su espacio aéreo. Esta política
llevó a que la fuerza aérea soviética derribase una sorprendente gama de
objetos, incluyendo un globo espía estadounidense que imitaba el batir de las
alas de un águila".
Conclusión
Con base en situaciones pasadas, cabe suponer que los altos mandos militares
cuentan con planes de contingencia para todas las situaciones que se puedan
imaginar, desde el derrocamiento de algún gobierno en el tercer mundo hasta una
posible invasión espacial. La declaración hecha por el general Douglas MacArthur
acerca de la naturaleza interplanetaria del próximo gran conflicto mundial ha
aparecido en todas las revistas especializadas en el tema ovni desde la década
de los '50. Los ufólogos nos recuerdan constantemente que el estrellamiento de
Roswell en 1947 constituye una prueba fehaciente del conocimiento por parte del
gobierno de los EE.UU. de la existencia de los OVNIs y sus tripulantes. ¿Acaso
no sería igualmente razonable suponer que dicho "conocimiento gubernamental" se
convertiría en acción con el paso de los años?
El precursor a nuestro ficticio "Mando de Defensa Terrestre" puede ser
claramente visto en el United States Space Command (Mando Espacial de los
Estados Unidos), establecido en 1985 con la misión de ofrecer "apoyo espacial,
realce de fuerzas, control espacial y aplicación de fuerzas". Aunque sus labores
consisten mayormente en suministrar información a NORAD y sus respectivos
mandos, al igual que la programación y el control de satélites, también "permite
que los EE.UU. invaliden fuerzas hostiles provenientes del espacio". Esta
declaración es lo suficientemente ancha como para incluir fuerzas no terrestres
así como los sistemas bélicos orbitantes desplegados por las potencias
terrestres.
La última palabra acerca de este asunto especulativo puede resumirse en la
leyenda latina: "Si deseas la paz, debes prepararte para la guerra". Sólo que en
este caso, la escala es planetaria, y los contrincantes no son exclusivamente
humanos.
Tomado de "El Fuego del Dragón" - No. 52 - Diciembre de 2002
<www.dragoninvisible.com.ar>
EL
PENSAMIENTO DE HYNEK |
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El
siguiente es parte del texto de la conferencia que ofreciera el autor, ante el
Congreso Internacional de Ovnilogía, realizado por la FAECE en 1980 en la
ciudad de Mendoza, Argentina; y leído por la investigadora argentina, señorita
Jane Thomas.
Nos
hallamos ante un cruce de caminos terrible. ¿Hacia dónde iremos?. Aquellos
de nosotros que han prestado seria atención al tema y
estudiado el mismo durante mucho tiempo saben sin duda alguna que
tenemos ante nosotros un tema tremendamente vital e importante. |
Aquí
nos está enfrentando una situación verdaderamente cósmica y no podemos
despertar interés suficiente... por lo menos así es en los Estados Unidos: no
se paga por la investigación adecuada profesional, de un solo caso. Todo este
trabajo debe ser realizado por voluntarios que deben utilizar sus propios
fondos. Ahora, ¿no es una fantástica paradoja? Es como si supiéramos que hay
diamantes a unos pocos pies de profundidad pero nadie quiere dar el dinero para
comprar una pala y comenzar a cavar.
¿Y
por qué ocurre esto?. Bien, es porque la gente que tiene el dinero para las
palas y comenzar una mina de diamantes no cree realmente que haya diamantes allí
después de todo. Y ¿por qué piensan eso...? Porque la mayoría de nuestros
científicos y oficiales de gobiernos piensan que no hay diamantes-OVNI ahí por
decirlo así. Por varias razones. Primero, lo que más a menudo se ha mostrado
como diamantes... ofrecido como prueba de que ahí abajo hay diamantes, resultó
ser sólo trocitos de vidrio... En nuestro contexto, OVIS... son falsos OVNIs.
Recuerden
que la gente denuncia principalmente OVIS no OVNIs... vidrio no diamantes. ¡ Si
sólo pudiéramos librarnos de los baratos OVNIs de imitación !
Después
están aquellos que creen que no puede haber diamantes allí en absoluto. ¡ Es
imposible hallar diamantes allí ! Estas son las personas que dicen que no puede
haber OVNIs aquí en la Tierra... simplemente tales cosas no pueden ser. ¡ Los
“diamantes” no existen !
Pero,
¿ saben ustedes cuál es el mayor obstáculo para tratar de conseguir que
alguien dé suficiente dinero para comprar la primera pala para comenzar a cavar
buscando los diamantes reales que ustedes y yo sabemos con seguridad que están
allí ?
Esto
podrá sorprenderlos. No son en realidad los diamantes falsos, los OVIs, los que
son los peores delincuentes, o más bien la gente que trata de hacernos pasar
trocitos de vidrio... los OVIs... por diamantes reales, los OVNIs. Es lo que
podríamos llamar Culto de los Diamantes. Tenemos gran cantidad de gente en todo
el mundo que se ha excitado tanto con la idea de los diamantes... o los OVNIs...
que han construido una especie de religión... una seudoreligión... un culto
alrededor de la idea de los OVNIs. Todos ustedes saben de qué hablo. Tenemos
mucho de esto en los EE.UU., y sé que existe también en otras partes del
mundo.
Muchas
de esas personas que mencioné antes quieren tan desesperadamente que vengan
inteligencias de afuera a ayudarnos con nuestros problemas y están tan ansiosos
de ver OVNIs... mucha de esta gente sigue ciegamente a cualquier líder que les
prometa grandes cosas si creen en lo que él les dice. Adamski fue uno de estos
líderes de culto en los EE.UU., y ha habido y hay, otros. Algunos de estos
cultos se han autotitulado “ Sociedades de Investigación “ o “ Centros de
Educación “ y a menudo están encabezados por personas de inteligencia mínima
y máxima superstición. Estas son las personas que les dicen a ustedes que
ellas ( y sólo ellas, ténganlo presente) tienen mensajes secretos de las
entidades celestes, saben qué son los OVNIs, por qué están aquí, etc.
Pero
el precio de esto es la absoluta fe. Uno no debe cuestionar ni examinar. Tuvimos
un famoso ejemplo en los EE.UU. donde dos personas, un hombre y una mujer que
llegaron a ser conocidos como “ Los Dos ”, convencieron a unas doscientas
personas de que se deshicieran de sus pertenencias, sus familias y amigos, y
fueran a un campo aislado a esperar que los OVNIs vinieran a llevárselos a un
mundo mejor. Cuánta angustia, congoja y problemas les causaron a esta gente.
Por supuesto, no vino ningún OVNI.
Ha
habido quienes predijeron un aterrizaje OVNI, sobre la base de alguna revelación
secreta, y cientos de personas se reunieron para ver el evento... y por
supuesto, nada ocurrió. ¿ Qué clase de cosas son éstas ? ¿ Son estas cosas
quizá la obra del demonio ?.
De
cualquier manera, sea lo que sea, no es ciencia. Ningún científico en su sano
juicio se acercaría a millas de distancia de una actividad de ese tipo.
Considera a esa gente como a un paso de la locura.
Obviamente
no llegamos a ninguna parte si los OVIs y los cultos y los mentalmente
desequilibrados alimentan la imagen popular del tema OVNI en las mentes del público,
y especialmente en las mentes de los científicos y del gobierno.
No
podemos eliminar a los lunáticos por medio de legislación. siempre los
tendremos con nosotros. Pero podemos delatarlos por lo que son y rehusarnos a
tener nada que ver con ellos.
Afortunadamente
ya está ocurriendo una bifurcación. Estamos ante el Cruce de Caminos, y
podemos ver una división definitiva entre los visionarios, y los “ locos ”,
los cultistas... los fanáticos seudorreligiosos, y los ovnílogos serios. Más
y más líderes científicos e intelectuales se están dando cuenta de que hay
un lado serio, científico, en el fenómeno OVNI. El trabajo del doctor Sturrock
en la Universidad de Stanford y el del doctor Estarle en Francia, y el reciente
informe soviético sobre los OVNIs rusos... todos apuntan en la dirección
correcta.
Se
reduce a esto: si yo tengo un mensaje para ustedes, gente seria, hoy aquí es el
de hacer una llamada para crear una organización internacional profesional de
OVNIs compuesta de aquellos trabajadores serios de cada país capacitados para
ser miembros de tal organización. Esto no es de ninguna manera un intento de
ser elitista... se hace en cada rama de la ciencia. En astronomía, por ejemplo,
cada país tiene su sociedad profesional de astronomía, y para pertenecer a
ella se deben tener las credenciales adecuadas.
Nadie
puede asociarse a la American Astronomical Society ( Sociedad Americana de
Astronomía ) por ejemplo, solo porque posee el dinero para pagar la cuota. Y en
el campo de la medicina hay grupos de profesionales médicos en los que el ser
miembro de uno significa que se ha demostrado eficiencia en la especialidad. No
necesitan postularse los fraudulentos, los curanderos, los ocultistas.
Todas
estas sociedades tienen sus standars. Lamentablemente el campo de la ovnilogía
no ha adoptado aún ningún standard. Cualquiera puede presentarse como un
experto. Ciertamente no intentaré elegir standards, aunque ciertamente me
agradaría ayudar a representantes de varios países a prepararlos.
Regresando
a nuestra analogía de la mina escondida de diamantes, nadie creerá que esos
diamantes existen si su fuente de información fueran los “ cultistas de los
diamantes “, fatuos creyentes en todas clases de engaños sobre diamantes. ¿
Invertirían ustedes en un negocio si todo lo que supieran del mismo proviniera
de gente que ustedes consideran mentalmente desequilibrada ?
Por
supuesto que no. Sin embargo, ustedes considerarían seriamente a un experto
profesional de las finanzas y los negocios. Bien, no tenemos una sociedad de
expertos, pero la necesitamos.