29 de agosto de 2002
De: Hugo Chávez Frías
A: Todos mis compatriotas
Hoy más que nunca tengo la firme creencia en la democracia, la libertad, la paz y la justicia social.
Estamos viviendo un proceso de grandes transformaciones que expresan un anhelo y una esperanza que vienen desde el fondo mismo de nuestra historia: alcanzar la justicia social para construir una auténtica comunidad nacional con equidad y sin exclusiones. Ese proceso era y es inevitable.
Estas grandes transformaciones están orientadas a favorecer no sólo a las clases secularmente desposeídas y olvidadas, sino a todos los sectores sociales, sin exclusión. En particular, quiero hacer llegar mi mensaje, nuevamente, a las clases medias: si nuestra acción se dirige a suprimir las denigrantes desigualdades que hacen inviable a nuestra sociedad, es porque queremos una Venezuela cuya fortaleza se sustente en una gran clase media.
El país votó por la Constitución de 1999 con la finalidad de refundar la República. Nuestra Carta Magna es referencia obligada y guía insustituible para todos los venezolanos. Ella es un espacio de afirmación de los valores fundamentales de la convivencia, el pluralismo, el diálogo y la paz.
La amplia y profunda política de diálogo que el Gobierno viene desarrollando en todos los terrenos de la vida nacional es un signo de nuestro estricto apego a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Se trata de ubicar en el terreno democrático y civilizado las diferencias que puedan existir entre nosotros. Tenemos que derrotar a la violencia en el ánimo de algunos venezolanos y, a nombre de una responsabilidad política inequívocamente común, hacer que reinen la paz y el entendimiento con justicia.
Observamos con optimismo el porvenir. Apostemos al trabajo, al encuentro fraterno entre los venezolanos, a que prevalezca el Estado de derecho y de justicia, a la recuperación de nuestra economía como ya lo presagian signos alentadores, y a que las exclusiones y las desigualdades pasen, definitivamente, a formar parte del pasado. La consigna del día es creer en Venezuela, trabajar por Venezuela, y darle el mejor cauce a nuestras diferencias a través del diálogo. ¡Rumbo a la patria buena y bonita!
La justicia es la reina de las virtudes republicanas,
y con ellas se sostiene la igualdad y la libertad.
Simón Bolívar
Tomado de MBR200