17 de marzo

05 de Noviembre de 1.998

Carmen Elena Balbás conjura el miedo (y II)

Chávez es nieto ilegítimo de Betancourt

Iván Padilla Bravo
Nelín Escalante
El Universal

NO SE DEBE temer por la actual contienda electoral, ya que, según la opinión de la profesora Balbás, Chávez no encarna toda la violencia con la que se le quiere revestir. Su programa de gobierno tiene la misma estructura del primero de Betancourt. También la trayectoria política de ambos personajes guarda gran similitud.

Caracas.- El miedo del que se ha querido contagiar a los venezolanos es producto de las campañas publicitarias. Así se desprende de las reflexiones que hace la sicóloga social y profesora de la UCAB, Carmen Elena Balbás, quien afirmó que, en política, 'Chávez es nieto ilegítimo de Betancourt', por lo que no se debería sentir el miedo que se quiere sembrar a través de las piezas publicitarias que lo presentan como 'el peligro' de la actual contienda electoral.

Otros expertos que estuvieron reunidos en la sede de la Fundación Andrés Mata, El Universal, coincidieron con aquella conclusión. Se está viviendo una 'guerra sicológica' que se evidencia en la mayoría de las piezas comunicacionales, en los discursos de los candidatos y en las declaraciones que brindan a los medios. A la imagen de 'violento' con la que se presenta a Chávez, se le han opuesto piezas publicitarias cargadas de una violencia mucho mayor que la criticada.

Directo al corazón

Las cuñas dirigen su lenguaje e imágenes a los afectos, a la emotividad. De allí el dramatismo que han alcanzado. La pieza comercial conocida como de 'la fritanga' y la de Proyecto Venezuela, que utiliza como icono a la moneda con la cara 'violenta' y la 'democrática', utilizan un lenguaje, literario y de imágenes, de una violencia mayor a la que se quiere cuestionar. En ellas hay odio, resentimiento y miedo, como códigos connotativos de los mensajes que se están manejando. En la reflexión de Balbás, el temor paraliza o genera cambios.

El exceso de información proclive al terror, con expresiones o declaraciones al estilo de 'estamos al borde de una guerra civil', exacerbadas por gestos, palabras e imágenes que refuerzan el mensaje, conducen a un ambiente de impredecibles resultados que pueden estar delimitados por la parálisis o por la conversión.

Esto no se ha llegado a medir. No ha habido sistematización de observaciones. Pero Balbás se atreve a deducir que algo grave puede estar gestándose mediante esa guerra sicológica de quienes enfrentan al candidato del Polo Patriótico.

Melillo, otro experto, ha dicho que quienes han estado llevando la campaña de los candidatos no lo han sabido hacer. Esta opinión la amplía con un ejemplo que toma de la pregunta cerrada formulada en la encuesta de Datanálisis, correspondiente al mes de septiembre. 'Allí se puede comprobar la incongruencia del elector cuando se le pregunta por quién votaría. Si la pregunta cerrada se le hace sólo con los nombres de los candidatos, la percepción del elector es una. Otra si se asocia nombre y fotografía. La variación de acierto aparece diferenciada por unos 10 puntos'.

La idea del miedo sigue gravitando entre los expertos. En comentario acuñado por Pablo Antillano, el miedo sería una propiedad exclusiva de los antichavistas. 'Los que están con Chávez no tienen miedo. Ese cincuentipico por ciento de la población no tiene miedo. Los que tienen miedo son los otros, los que están con Salas y los que están con AD, que son los que tienen cosas que perder. Esos son los que andan promoviendo el miedo'.

Y añade Antillano que hay unas razones más sicológicas, más del espíritu, para tener miedo, que es el temor a los cambios a las decisiones que implican rupturas. Todo el mundo sabe que vamos hacia algo nuevo, independientemente de quien gane. 'El cambio no es que se va a producir en diciembre. El cambio está en marcha'.

Retomando el significado del cambio, Ivann Stoy dice que si le correspondiese trabajar la imagen de este concepto ('cambio') tomaría otro camino diferente al que aquí escogieron los publicistas. 'Forma y fondo' se conjugan, por lo que una campaña que signifique cambio debe ser innovadora en todos los sentidos. Los mensajes que hoy se ven en la televisión venezolana no tienen diferencia alguna con los que se deben haber elaborado cincuenta años atrás. 'Quien tiene una función comunicacional y creativa debe saber interpretar el momento, la realidad, ser novedosos y captar la noción de cambio para conseguir transmitirla. De lo contrario estamos fracasados'.

La encuesta: pieza publicitaria

Balbás dice que se está ante una nueva modalidad de propaganda electoral llamada 'encuestas'. Esos instrumentos técnicos diseñados por especialistas de las 'ciencias humanas', como auxiliares de investigación, capaces de facilitar la medición de fenómenos sistemáticamente recurrentes han perdido fuerza y seriedad. La encuesta es parte de la estrategia propagandística de los candidatos. Las encuestas que se hacen públicas adolecen de grandes fallas en sus procedimientos metodológicos. Por ello es que esta 'hurgadora de almas', no acepta las encuestas.

Encuestas, piezas comerciales y declaraciones de los candidatos forman parte de un todo preocupante. Balbás expresa la suya al observar cómo se están tomando decisiones coyunturales, basadas en intereses de grupos, por parte de 'pequeños sectores que sobrepasan el bien colectivo y el bien común'.

Esa preocupación la lleva a hacer un llamado para que los medios rescaten de la norma lo que ella establece como mesura, porque se están perdiendo los límites de la información. No se puede seguir alimentando o estimulando el miedo dentro de la colectividad. El resultado de esta práctica desmedida e inscrita dentro de estrategias publicitarias debe verse mucho más allá del inmediatismo, pues se corre el riesgo de estar creando condiciones para que el miedo desbordado busque ser drenado de alguna manera que pudiera llegar a ser violenta e impredecible.

Las mediciones personales

También existe ese 'instrumento' informal del que algunos echan mano. La herramienta del creativo que pregunta entre vecinos, vendedores, mesoneros y taxistas y obtiene la gran respuesta.

Este es el caso de Stoy, quien habló de su 'encuesta personal'. La credibilidad espontánea de sus entrevistados arrojaba un resultado inmediato que no requería 'medición de frecuencia', 'codificación' ni 'cuantificación' de respuestas. Todos coincidían en no haber recibido nada con las piezas comerciales que están en pantalla. Cuñas que no transmiten nada. 'Tenemos en la estantería de la vida un montón de anaqueles con productos vacíos'.

La carencia de identidad que caracteriza esta campaña refleja la pobreza de la misma. 'Como creativo me he sentido humillado por su nivel'.

En la actualidad, la esperanza es el 'cambio'. Con violencia, con ruptura, 'cambio democrático' o simplemente 'cambio'.

El cambio, con cualquiera de sus acepciones, será una buena razón para elegir, apuntó el sociólogo Gerardo Cabañas. Lo único que está claro es que no se desea seguir con lo que tradicionalmente ha caracterizado a la forma de democracia que conocemos.

Tomado de El Universal


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