Mayo de 2002

ESPECIAL VENEZUELA

Fuego popular

Una victoria sin precedentes

De Verdad

Primero fue Vietnam

Un pueblo sin apenas recursos se enfrentaba a una superpotencia que se encontraba en el cénit de su poder. Desde los despachos del Pentágono, algunos estrategas señalarían Vietnam como una operación rápida y fácil. Sin embargo, varios años después, EEUU salió severamente derrotado de las tierras asiáticas. Un pueblo había sido capaz, manteniendo la unidad y la voluntad, de hacer morder el polvo a los que se paseaban triunfalmente por todo el planeta desde la Segunda Guerra Mundial.

Ahora es Venezuela. La movilización popular ha disuelto como un azucarillo los planes de EEUU. Los golpistas, pertenecientes a los círculos más oligárquicos, con el apoyo de los altos cargos del ejército y amparándose bajo la sombra de la primera potencia mundial, no han podido hacer nada ante el fantástico torrente de energía popular desatado.

Otra vez, los pueblos son capaces de derrotar al hegemonismo norteamericano. Desde hace mucho tiempo no ocurría nada parecido. Todas las grandes naciones del planeta han agachado la cabeza ante el poderío estadounidense... ha tenido que ser un pueblo quien les infligiera la primera derrota. La excepcionalidad de la situación no debe hacernos olvidar que ésta ha sido la culminación del trabajo de varios años de revolución. El que dió como fruto la construcción de un frente político democrático, nacional y popular que ha arrasado en todas las elecciones; el que ha forjado la organización popular, en cada barrio, en cada pueblo, hasta que el destino del país esté realmente en manos de la gente; el que ha elevado la conciencia y la radicalidad popular sobre la base de la participación activa en el proceso revolucionario. Sólo así ha sido posible propinarle un soberano puñetazo a EEUU.

Es una lección que todos los pueblos del mundo debemos aprender. La victoria del pueblo venezolano no sólo crea unas condiciones nuevas en el país. Tras la derrota de Vietnam, el retroceso norteamericano fue vertiginoso y sorprendente. La enseñanza de que se podía derrotar a Washigton corrió como la polvora. Ahora, cuando EEUU se disponía a instaurar por muchos años una dictadura mundial incontestable, los pueblos vuelven a recordarle que los límites de todo imperio los marca la voluntad, la organización y la lucha popular. Debemos trabajar para que las consecuencias de esta derrota sean lo más profundas posibles.

Los héroes de la historia

¡Fuego en Venezuela!¡Fuego en Latinoamérica! Tras un golpe de estado a Chávez, los golpistas tuvieron que devolver el poder 48 horas después. En el plan no estaba contemplado un factor que ahora saben fundamental: el pueblo venezolano. No esperaban semejante fortaleza, organización y valor por parte del pueblo. Es él quien le ha devuelto a la presidencia a Chávez.

Desde las barriadas, cientos, miles y hasta un millón de personas llenó las calles de Caracas. El pueblo que salió a la calle exigiendo que regresara su presidente, el que ellos habían elegido, mientras civiles y militares se resistían a entregar el poder a los golpistas. Tras la manifestación contra Chávez, convocada por Carmona y conducida a Miraflores, la gente resistió la provocación.

Cuando se declara el golpe de estado, en los barrios comienza a haber un llamamiento. El domingo, la prensa informa que desde el viernes en el centro de las ciudades y barrios populares comienzan a haber disturbios. El sábado la situación es cada vez más descontrolada para los golpistas, la policía reprime durante ese día revueltas con gases lacrimógenos y disparos de perdigones. El mismo sábado uno de los manifestantes anunciaba que "la gente de los barrios de los cerros bajará. Vamos a protestar en la calle para exigir una declaración de renuncia de nuestro presidente, que ha sido secuestrado por la actual junta". Así se hizo.

Miles de personas, no sólo se concentraron frente al palacio, sino en otras ciudades de Venezuela. El pueblo había salidos a la calle en grupos, caminando o en furgonetas. Boinas, carteles, consignas, la gente tenía un objetivo claro. Durante el golpe habían muerto 9 personas y ya se sumaban 40 muertos y 325 heridos, causados por los golpistas y sus militares aliados. Víctimas civiles, no se sabe cuántos de cada bando, no contaban más que con su voz, la población estaba indefensa ante el ejército armado como para una guerra.

En esta situación, rodeado, arrinconado por cada vez más seguidores de Chávez, o Carmona aceptaba la derrota o tendría que asesinar en el acto a miles de personas. Un colosal baño de sangre sería el único camino para aplastar el inmenso apoyo popular al Gobierno Bolivariano. El precio era demasiado alto. Ante la aplastante evidencia Chávez recupera el poder antes de lo que él mismo hubiera imaginado.

Los golpistas atribuyen su fracaso a fisuras entre los aliados para el golpe. La verdad es que estaban completamente aterrorizados del poder del pueblo. Militares que habían apoyado el golpe no soportaron la presión de la evidencia. Son los pueblos los que hacen la historia. ¿Dónde están los que decían que Chávez había perdido el apoyo popular? ¿A qué negros intereses sirven los que predican que no es un presidente democrático?

La fuerza acumulada

¿Cuántos Chávez hay en Venezuela? ¿Cuantos mejores y más revolucionarios que Chávez hay en Venezuela?

El movimiento popular vivido durante el golpe contra Chávez no es un movimiento espontáneo y aislado. Desde que Chávez llegó al poder decenas de veces la gente ha salido a la calle. Tras el despectivo calificativo de "muchedumbre enardecida" con que los medios llaman a los amplios sectores populares que apoyan el gobierno bolivariano, se esconde una multitud organizada y consciente.

Ha demostrado una capacidad de movilización permanente y en aumento, que unido a su radicalidad ,ha logrado mantener el gobierno democrático. Se equivocan quienes pretenden minimizar a los verdaderos protagonistas. Diferentes intentos de desestabilizar el gobierno habían tenido ya que enfrentarse a respuestas sociales de todo tipo, por ejemplo, movilizaciones y concentraciones surgidas en oposición a las huelgas de los ricos y las patronales.

Las raíces de esta capacidad de organización y movilización, son evidentes en las profundas transformaciones democráticas que el pueblo ha hecho durante estos años. No sólo ha acudido de manera masiva a las urnas dos veces, una para elegir y otra para reelegir a Chávez, sino que ha habido una participación continua en la elección de sus líderes de barrio, sindicatos y gobierno. ¿Son estos también una muchedumbre enardecida o es un pueblo que decide su destino? En diciembre del 2001 se crearon los círculos bolivarianos en todo el país, encargados de difundir y afianzar la ideología revolucionaria, núcleos de organización cívica que pueden gestionar y vigilar aquellas decisiones que les afectan. La propuesta se llevó a cabo con la intención "de tener a todo el pueblo unido con una sola bandera: la Bolivariana".

Lo ocurrido durante los días de la toma golpista en Venezuela, es sólo la punta del iceberg de la fuerza acumulada por un pueblo. No tiene precedentes en Hispanoamérica que la gente se lance a la calle deteniendo en seco un golpe de estado. Es un inmenso triunfo. En un país, que cual república bananera, la democracia se conocía como una abstracción casi poética, el caciquismo imperante adoctrinaba en la sumisión.

Ante esa opresión tradicional, la lucha del pueblo venezolano ha conquistado una fuerza que ha hecho cambiar la historia. La respuesta popular ha dejado desconcertados a quienes desde la Casa Blanca proclamaban la muerte de una república independiente. ¿Cuántos Chávez hay en Venezuela? ¿Cuantos mejores y más revolucionarios que Chávez hay en Venezuela? Es mejor no pensar a cuántos millones habrían tenido que ajusticiar para poder imponer una nueva dictadura del terror.

Un Frente Amplio

La capacidad de organizar un frente amplio, que ha recogido a todos los sectores populares opuestos a la política de la oligarquía y EEUU, ha sido clave para abrir el proceso revolucionario.

Las primeras elecciones ganadas por el Polo Patriótico resultaron para muchos una sorpresa, la irrupción poderosa de una fuerza desconocida, pero eran el resultado de varios años de debates para construir una alternativa política. El deseo popular de cambio encontró por fin el instrumento adecuado.

El Polo Patriótico constituye hoy el embrión de un Frente de Unidad Popular, un frente antihegemonista en el que convergen distintas fuerzas políticas, movimientos sociales y corrientes ideológicas. A diferencia de lo que ocurre en otros países iberoamericanos, el Polo Patriótico es una plataforma interclasista que aspira a convertirse en la representación unitaria de la mayoría del pueblo:"un movimiento de movimientos".

Una vez señalado con precisión el enemigo, EEUU y la oligarquía, la revolución bolivariana ha luchado por unir al resto de la nación, forjando una unidad amplísima. En su seno coexisten distintas tendencias ideológicas que van desde el marxismo socialista o comunista hasta el cristianismo, pasando por corrientes de pensamiento nacionalistas que defienden la actualización de los proyectos liberadores de Simón Bolivar, Simón Rodríguez y Ezequiel Zamora. La política de alianzas del Polo Patriótico ha estado dirigida no sólo hacia el espectro político, sino que ha integrado a todo el abanico de organización social venezolana: movimientos ciudadanos y sindicales, colectivos, personalidades, intelectuales, artistas, profesionales, técnicos, empresarios pequeños y medianos... Una política que aspira al "agrupamiento de grandes contingentes democráticos y unitarios contra la oligarquía corrupta y neoliberal".

Este nivel de unidad alcanzado, esta voluntad de unir y organizar a todos los sectores sociales y populares, es la que ha permitido a la revolución adquirir una fortaleza sin precedentes. Y gracias al profundo debate, la ampliación de la unidad no ha hecho más que profundizar el programa. Tal y como plantea el Polo Patriótico "el objetivo organizativo es el logro de la unidad de acción en las tareas prácticas, a través de la discusión democrática y la reflexión teórica". Y es mediante este proceso de lucha-unidad desde donde se ha levantado y unificado a amplios sectores en un programa radicalmente nacional y popular.

Los principios fundamentales del frente se basan en que "toda discusión democrática lo es para la unidad de acción y toda unidad de acción debe ser producto de la discusión democrática". La lucha de estos tres años no ha hecho sino profundizar la unidad y afianzar la voluntad de todos por llevar adelante las transformaciones revolucionarias.

Multiplicar los líderes revolucionarios

"El país requiere ya de verdaderos líderes y dirigentes bolivarianos en cada esquina". Así llamaba Hugo Chávez a la formación de los Círculos Bolivarianos.

Los calificativos que han recibido por parte de todos lo que han apoyado a los golpistas (denominándolos "hordas bolivarianas" o "saqueadores") es la mejor prueba de su vital importancia. No sólo se debe constituir un frente político amplio y poderoso: la verdadera fuerza de la revolución reside en la organización popular, en la participación activa y consciente de todo el pueblo en el proceso revolucionario. Por eso el Polo Patriótico, por boca de Chávez, invitó "a todos los patriotas a organizarse. Vamos a organizar círculos bolivarianos de mujeres, campesinos, estudiantes, obreros, para entregarnos a la defensa de la revolución" "Organícense, en el salón de clases, en la universidad, en el campo, en las ciudades, en las posadas, en los hospitales, en cada esquina... Lo que pido es ayuda, necesitamos multiplicarnos las líderes y los líderes". "Sólo pido algunos requisitos indispensables: ser trabajador, tener honestidad, y patriotismo sin intereses particulares".

El pueblo debe ser protagonista, la revolución no puede estar en manos de un gran líder, sino que son necesarios líderes en cada esquina, que cada uno de los venezolanos participe y decida al más alto nivel en la fascinante experiencia de la revolución. La respuesta a este llamamiento fue fulminante: "en el primer día se nos acabó el papel de fax, de la cantidad de gente que llamaba para apuntarse". En cada grupo de edificios se ha organizado un círculo bolivariano, de 7 o 11 personas, que constituye una importante red de organización popular, con el objetivo de "aumentar la participación popular en los asuntos públicos y enfrentar la conspiración de la derecha".

Ante cada problema surgido en el barrio, los círculos bolivarianos se han reunido para afrontarlo, convirtiéndose en una referencia para todo el pueblo. Ante cada ataque de los conspiradores, han dado una respuesta, acostumbrándose a que la defensa de la revolución era tarea de todos. Sólo desde este nivel de organización popular, construido durante meses, puede entenderse la fulminante respuesta del pueblo venezolano al golpe.

El boca a boca que organizó la manifestación al centro de Caracas, varias veces nombrado por los medios de comunicación, se corresponde con la organización popular que ha ido cobrando fuerza y radicalidad durante todos estos años. Organización que ha elevado la conciencia popular a través de la práctica y de la lucha ideológica.

Como plantea el Decálogo del MVR : "una fuerza política sin ideología es como un cuerpo sin alma, prácticamente muerto, un cuerpo descabezado. Priorizando la batalla ideológica mantendremos el espíritu revolucionario, indispensable para acometer las grandes tareas patrióticas y populares que tenemos por delante". Podían detener a Chávez, pero... ¿cómo iban a poder encarcelar a los millones de Chávez que ha formado la revolución? Ésta es la fuerza principal de la revolución venezolana.

Trama golpista contra Chávez

Las redes de la araña

En Febrero de este año los golpistas se reunieron con el embajador de los EEUU de Venezuela para consultar sus planes. ¿Pero desde cuándo no es la embajada norteamericana la que despacha órdenes sobre sus sectores de la oligarquía?, ¿no es la araña la que fabrica la red?

Fue una red golpista con un objetivo planificado meticulosamente desde la Casa Blanca. "Existe la sensación generalizada de estar en un momento límite en que va a ocurrir algo muy pronto" decía un periodista venezolano. Ocurrió. En su fugaz actuación, el golpista Pedro Carmona tenía todo calculado, se apresuró a eliminar las instituciones y leyes creadas por el gobierno de Chávez. Disolvió el congreso y el poder judicial, legislando por decreto hasta la convocatoria de las elecciones generales y presidenciales. Dos minutos después tenía un programa político y asignados a sus jefes de gobierno. Carnona tenía hasta un guión, con emoción afirmó que el "caudillismo había quedado atrás".

"El fin justifica cualquier medio" es la consigna de la que participaron selectos representantes "espontáneos" de las clases dominantes. Se sumaron al golpe un nódulo del ejército, empresarios, Iglesia y las patronales más corruptas vinculadas con los gobiernos anteriores. Han salido todos de sus madrigueras. ¿Sus recursos? una parte de financiación y otra de órdenes de manual. Un trabajo minucioso de conspiración. Desde la CIA se habían vinculado y dirigido grupos políticos, sindicales, militares y periodísticos; elaborado desde amplias campañas satanizando la figura de Chávez, hasta ingentes huelgas de ricos y patronales.

Los mismos sectores que en el golpe de Estado esperaban a Carmona en Miraflores. Días previos, Hernán Uribe (Vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FENALP), en un visionario artículo, decía "Contra el presidente Hugo Chávez se está repitiendo en Venezuela la campaña publicitaria que hace treinta años antecedió en Chile al Golpe de Estado". Siguiendo el manual de los EEUU, han usado las mismas tácticas que con Allende. Desde la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) se ha llevado una intensa propaganda contra Chávez. Esta entidad de periodistas "independientes" cuenta con el apoyo de organismos empresariales como la Asociación Mundial de Diarios (WAN en inglés), vinculada con la CIA. Durante la campaña contra Allende, las órdenes de la SIP-CIA se procuraron mediante el diario chileno "El Mercurio". Dirigido por Agustín Edwards, vicepresidente de la SIP y también de la Coca Cola, se publicaban artículos escritos por la CIA y llegó a inventar una serie de amenazas, aduciendo además que estaban cortando el suministro de papel.

Años después, sabemos que el tema de la denuncia al recorte de la libertad de expresión es un punto vital del Manual de Golpes de Estado. En el informe del senado de los EEUU acerca de la acción encubierta de Chile se lee "El tema de la libertad de prensa fue el más importante dentro de la campaña internacional contra Allende". ¿Suena conocido?

Hacer avanzar la revolución

La valiente actuación del pueblo venezolano parando en seco el golpe militar ha creado las mejores condiciones para hacer avanzar la revolución bolivariana. Seguramente, el pueblo venezolano ha aprendido más en estos días que en años de lucha.

Seguramente ahora mismo los círculos bolivarianos, el Movimiento Quinta República (MVR) y el Polo Patriótico están sintetizando experiencias, sacando conclusiones y corrigiendo errores. A ellos poco tenemos que enseñarles, y de ellos tenemos mucho que aprender. El derrotado golpe militar ha dejado en claro muchas cosas, de las que conviene extraer enseñanzas. Primero que en la base de todo proyecto revolucionario tiene que estar la organización del pueblo, la organización de los que "no tienen nada que perder salvo sus cadenas y todo un mundo que ganar".

Por eso, fortalecer constantemente los círculos bolivarianos, aumentando sus filas, elevando su nivel de conciencia, es la base de todo. Extenderlos, ampliarlos y fortalecerlos política e ideológicamente. En todos los barrios y pueblos, en todas las fábricas y universidades, en los campos y en la ciudad, entre la tropa de soldados y en los campos petroleros. Sólo así será indestructible la revolución. ¡Bien lo saben los habitantes de los "ranchos", barrios pobres de las colinas, que bajaron al centro de Caracas y pararon el golpe!

Estos días han clarificado quién es quién y a quiénes sirven y obedecen. En primer lugar muchos de los altos mandos del ejército. De todos es conocido que de la "Escuela de las Américas", centro de formación militar norteamericano, han salido el mayor número de golpistas y que a través de ella Washington tiene "hombres suyos" tanto en las cúpulas como en las principales estructuras militares de todos los países hispanoamericanos. Será imprescindible para garantizar la continuidad de la revolución, sin otro sobresalto golpista, depurar el ejército de todos los comprometidos con el golpe, y mantenerse vigilantes sobre quienes no defendieron el orden constitucional.

De la Santa Alianza (medios de comunicación, patronal, iglesia y la CTV, el sindicato más corrupto de todo el continente), todos son defensores del antiguo régimen oligárquico, reclaman que "se respeten los derechos democráticos", "la libetrad de prensa"... Las mismas demandas que hace el departamento de Estado norteamericano. Ellos quieren la libertad para conspirar, la libertad para seguir esquilmando al país, la libertad para acabar con los derechos de los pueblos. ¿Hay que darles esta libertad cuando ellos se la querían robar a toda la nación?

Particular importancia tiene la activa participación de la CTV, reconocido como el sindicato más corrupto de todo el continente. Este viejo aparato, en connivencia con la patronal, debe ser aislado. Los círculos bolivarianos deben promover otros sindicatos al margen de la corrupta confederación, un sindicato de clase que sea el verdadero representante de los trabajadores. Promover también otras asociaciones de empresarios, empresarios patriotas, comprometidos en el desarrollo de la riqueza y la independencia nacional. La revolución bolivariana, empeñada en la transformación de la sociedad, ha comenzado a hacer los cambios políticos, de régimen, necesarios. Sabe que el verdadero motor del golpe es la administración americana. Como lo fue en Chile y en todos y cada uno de los golpes en Hispanoamérica en el último siglo. Ahora ya reconocen que "habían sido informados".

Pero Washington no lo juega todo a una carta. Su infiltración en todos los aparatos de Estado es su modus operandi. ¿Por qué los servicios de inteligencia venezolanos no advirtieron del golpe? Será necesario actuar en este sentido, seguro que lo estarán haciendo. Pero la clave no está nunca en las medidas legales sino en el pueblo. Fortaleciendo la unidad del ejército con el pueblo, elevando su unidad con la revolución bolivariana, en los pasos y transformaciones que tiene que hacer. Es crear las mejores condiciones contra los ataques que van a tener que repeler. éste ha sido el primer intento serio. Seguro que vendrán más.

¿Por qué ahora Chávez?

Chávez debe ser el hombre que más daño puede hacer a los planes e intereses de EEUU.

Ha unido a los países de la OPEP en una línea de firmeza en defensa de los intereses de los países productores frente a los países imperialistas encabezados por EEUU. Venezuela ha revitalizado el movimiento de países no alineados con la formación del G-77, frente al G-7 encabezado por EEUU.

Chávez está llevando adelante su revolución bolivariana frente a EEUU, señalando un camino para toda Hispanoamérica. La independencia es posible. Estas tres cuestiones trenzan una de las cuerdas que más aprietan en el cuello del tío Sam. Estas tres cuestiones en tiempos de la todopoderosa superpotencia americana dejan al descubierto talones de aquiles por los que puede iniciarse el principio del declive estadounidense.

Los tres años de gobierno bolivariano le han dado a EEUU monumentales quebraderos de cabeza. En la OPEP (Organización de países exportadores de petróleo) ha liderado el recorte de producción, haciendo que el barril de crudo paso de los 10 dólares que valía cuando llegó a la presidencia, hasta los 30 de hoy, evitando el expolio de los países productores a manos de los países imperialistas, a través de las grandes petroleras encabezadas por EEUU.

La fortaleza de la OPEP se hizo patente cuando reunió en Caracas a los jefes de Estado, al mismo tiempo que el FMI y el Banco Mundial se reunían en Praga. Y la reforzó, ante los intentos de división por parte de la nueva administración norteamericana, con una gira por todos los países, incluido Irak, levantando las iras de Bush por entrevistarse con Sadam Hussein.

No es de extrañar que el mismo viernes 12, con el golpe triunfante y Chávez detenido, el barril de crudo bajara, en Nueva York 1,5 dólares. Al mismo tiempo, Chávez ha impulsado el nuevo movimiento de los No Alineados, el G-77. Su participación en la reciente cumbre de Monterrey para la ayuda al desarrollo, como portavoz "de los pobres de la tierra" ha sido la denuncia más rotunda de la rapiña imperialista constante de los pueblos a través de la deuda externa y de las exigencias del FMI y del Banco Mundial para entregar créditos.

Dicen que los errores de Pedro Carmona, el golpista presidente, hicieron fracasar el golpe. Cuando lo que hizo; suprimir la constitución, disolver la Asamblea Nacional, remover a los magistrados del Tribunal Supremo, al Fiscal Genaral, al Defensor del Pueblo, destituir a gobernadores, alcaldes y concejales y un largo etcétera, era ni más ni menos que lo que deseaba EEUU y por lo que suspiraba la oligarquía venezolana.

Desmontar todo el régimen de la Vª República venezolana, construida por Chávez y el Polo Patriótico a golpe de referéndums y elecciones, ganadas arrasadoramente, y defendida por el pueblo en la calle como hemos visto estos días, es el sueño de la oligarquía que quiere volver a meter sus manos en el Estado para seguir controlando los recursos del tercer productor mundial de petróleo, miles de millones de dólares y el objetivo de los EEUU para tener bajo su control a quien le vende un millón y medio de barriles diarios.

La Vª República, reduciendo a poco más que la nada los típicos partidos, socialdemócrata y democristiano, terminó con la parodia de democracia corrupta controlada por la oligarquía y sumisa con los EEUU, Ha transformado las estructuras políticas y judiciales garantizando su independencia y ha comenzado a meterle mano a las estructuras económicas. Empezando por Petróleos de Venezuela, la mayor empresa de Hispanoamérica, para acabar con el control que la oligarquía venezolana aún mantiene sobre ella.

Esta revolución popular que inicia Chávez es lo que debía cortar de cuajo el golpe. Su ejemplo es el que quisiera EEUU borrar del mapa continental. Avanzar hacia la independencia es posible y es lo que dice y hace Chávez. No es de extrañar pues que Chávez sea demasiado peligroso para la Casa Blanca. No es de extrañar que esté en el centro de su diana y no escatimen esfuerzos para desprestigiarlo mientras no puedan acabar con él y lo que representa.

Tomado de De Verdad