6 de julio de 2003
Francisco Forteza
WORLD DATA SERVICE
El responsable inicial de este intercambio de declaraciones es Otto Reich, nacido en Cuba y actualmente asesor del presidente norteamericano, George W. Bush, para asuntos latinoamericanos. Reich fue la elección de Bush para sub-secretario de Estado para el Hermisferio Occidental, pero ante una resistencia política fuerte por parte del congreso en cuanto a ratificarlo, la Casa Blanca retiró la propuesta. Aunque el motivo central del congreso de Estados Unidos para vetar a Reich fue precisamente su conducta como colaborador de la "guerra sucia" en Centroamérica y Sudamérica, el mandatario estadounidense decidió relacionarlo de cualquier modo con América Latina. Esto llevó a Reich a expresar públicamente su desacuerdo con el gobierno del venezolano Hugo Chávez, a quien acusó de seguir pautas cubanas en el desarrollo de su programa gubernamental. "Ni el presidente Hugo Chávez se parece a Fidel Castro ni Venezuela se está convirtiendo en otra Cuba" afirmó esta semana el canciller venezolano Roy Chaderton. El ministro subrayó que "basta ver las constituciones de uno y otro país para darse cuenta que sí hay diferencias importantes, a pesar de las magníficas relaciones que hay entre Cuba y Venezuela". En una entrevista concedida a la emisora de su país Radio Cadena Nacional (RCN), el canciller de Venezuela acusó a Reich de hacer las veces de "policía malo" en las relaciones de Estados Unidos con el gobierno venezolano. "Cada vez que las cosas van mejorando aparece con alguna declaración intemperante, que no amerita dedicarle tanta atención", dijo Chaderton y tocó un punto clave: "Reich está viviendo la realidad venezolana a través de la información que recibe de Miami". Analistas consideran que Reich es precisamente el "portavoz" en la administración de Bush de los sectores más extremistas entre los cubanoamericanos que residen en Estados Unidos. Entre sus declaraciones más criticadas desde que fue seleccionado por Bush para su equipo presidencial, está la de haber acusado a Cuba de tener las capacidades para construir armas biológicas, cuestión que no solo fue rechazada enérgicamente por el gobierno cubano, sino también por el ex presidente norteamericano James Carter, quien visitaba la Isla en el momento de exponerse la acusación. Pero Reich se adelantó en su momento incluso al criterio de su entonces jefe inmediato, Colin Powell, al apoyar el golpe de estado contra Chávez que colocó por un lapso efímero en el palacio presidencial en Caracas a un gabinete golpista. Después de los acontecimientos y del regreso al poder de Chávez, Reich hizo mutis por un tiempo del escenario político. Vea nuestra página: http://www.wdrc.cubaresearch.info
Tomado de Rebelión