11 de febrero del 2003
VENEZUELA: CONSECUENCIAS DEL 'PARO CIVICO'
ADITAL
Al generalizarse en el país el retorno a las actividades en forma casi normal por la gran mayoría de las empresas, los propietarios decidieron aplicar fórmulas de despido, descuento de salarios o suspensión de la relación laboral a sus empleados.
Bajo el argumento de las grandes pérdidas sufridas durante la huelga política promovida por la oposición con la intención de sacar del poder al presidente Hugo Chávez, los empresarios intentan pasar esos costos a su personal.
El paro tuvo una duración de dos meses, convocado por la Coordinadora Democrática, que agrupa a las organizaciones adversarias del Gobierno bajo la consigna de extenderlo 'hasta que Chávez renuncie'.
La evidente derrota de la medida de fuerza, cuya máxima expresión estuvo en lo que el Ejecutivo califica de sabotaje petrolero, llevó a la reanudación de actividades, pero ahora con un violento perjuicio para los trabajadores.
El Ministerio del Trabajo advirtió que no reconocerá documentos firmados por los asalariados bajo presión aceptando recortes en sus emolumentos, despidos y la aplicación de una suspensión provisional de la relación laboral, la cual implica cese del pago de los sueldos durante 60 días.
A esos efectos llamó a los empleados víctimas de este trato por sus patrones, a presentar las denuncias correspondientes en las oficinas de las Inspectorías del Trabajo para iniciar el expediente que culminará en un fallo del Ministerio.
Además, comenzó a enviar inspectores a distintas empresas nacionales y extranjeras para actuar de oficio ante las irregularidades señaladas, lo cual llevará a la aplicación de fuertes sanciones a los propietarios y la restitución de todos sus derechos a los trabajadores.
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Tomado de Rebelión