Aló Presidente número 1100

Hoy por primera vez el Aló Presidente se hace un día jueves. No importa mucho porque hoy es día feriado, es el 24 de junio de 2021. Ha hecho sol y ha llovido intensamente. Es el último programa que hace el Presidente Chávez. La muchedumbre que asiste al programa en el Campo de Carabobo luce sus ropas y sombrillas multicolores pero con predominio de rojo, todo garantizado con protección UV, ya innecesario a esta hora porque es bien entrada la noche. Aunque hay mucho cansancio ya, los rostros del público lucen risueños.

Una gran parte del público es gente muy joven que nació y creció durante la Revolución Bolivariana. Se saben de memoria los grandiosos acontecimientos que marcaron los primeros años de la revolución, no tanto por haberlos estudiado en los libros de historia sino por haberlos oído repetidas veces de sus padres o abuelos. El brillo de una lágrima delatora asoma siempre, indiscreta, cuando en la narración llegan al punto de ese momento en que vieron surgir de la noche aquel helicóptero que los sobrevoló varias veces. Es obligada una pausa para contener un suspiro. Luego siguen contando que ellos sospechaban algo, pero no estaban tan seguros y no querían sentir demasiadas esperanzas; minutos después estalló el júbilo incontenible cuando les confirmaron que el helicóptero efectivamente traía en su vientre al portador de la democracia, al Presidente Chávez, arrancados ambos de las garras del fascismo, salvados de la muerte por un pelo. Y aunque era muy difícil imaginarlo en detalle, aquel día también se salvó este futuro que hoy se está viviendo y ellos lo sabían. Los muchachos comprenden que tanta emoción justifica por sí sola, sin mucha revisión del significado histórico, que es mayor aún, o de las consecuencias económicas, el que haya en abril dos fiestas nacionales tan seguidas. El 19 de abril se celebra solo seis días después del día del Rescate de la Dignidad. Y los viejos fueron sus protagonistas. No es de extrañar entonces que los vendedores de recuerdos estén haciendo su agosto. Por cierto, el efecto económico se compensó con la eliminación del "día de la raza" que antes se celebraba el 12 de octubre.

Nunca hubo marcha atrás. Pero fue difícil, muy difícil, avanzar arrastrando el lastre de la conspiración que nunca se ha dado por vencida. Menos mal que muchos otros países se unieron. Primero Brasil. Para sorpresa de muchos que no lo esperaban después fue Ecuador. De ahí en adelante las cosas fueron relativamente fáciles. Vino Argentina, Uruguay, Bolivia, Perú, Colombia; y luego los demás. El más difícil fue México que debió esperar para aprovechar la convulsión cuando Estados Unidos se quedó por fuera del ALCA. Claro, no todos nuestros países tienen gobiernos revolucionarios pero todos son aliados. La integración es un hecho, y nos ha permitido constituirnos en el tercer polo. Dejamos de ser un patio trasero. Ahora nos respetan. Hay justicia.

Por tanto, la Venezuela de hoy no se parece mucho a la que conocimos hace 23 años cuando todo comenzó. Ahora es un país próspero. El consumo de petróleo se redujo bastante de unos años para acá porque ya casi no existen vehículos a gasolina. Venezuela sigue siendo un gran productor pero es sólo porque muchos pozos alrededor del mundo se agotaron y los nuestros en cambio tienen reservas probadas para unos trescientos años más. Ahora se produce menos, pero se vende a mejor precio y una gran parte se industrializa en el país. Cerca de donde estamos cruza uno de los veloces ferrocarriles que conforman la gran red. No fue nada difícil para mucha gente venir desde Caracas pues el viaje tarda algo más de una hora y es muy cómodo. Un viaje a San Cristóbal se hace en 4 horas, y a Sao Paulo se tarda solo un poquito más.

El programa de hoy está batiendo nuevamente entre otros, el record de sintonía. Chávez se despide de la vida política. Hubo risas y llanto. Desfilaron gran cantidad de personas, héroes de la revolución, jóvenes intelectuales, científicos, inventores, escritores, campeones olímpicos y un sinnúmero de personajes destacados de la vida nacional. Como ustedes saben, la tecnología actual hace innecesario que las personas estén físicamente en el lugar donde se hace el programa y, lo más importante, ahora no existe el intermediario mediático, por lo menos en la forma como se conoció hace dos décadas. Ahora es el mismo usuario quien configura y selecciona lo que quiere ver y oír. Es muy difícil hoy en día pretender manipular a la opinión pública como se hizo hace años.

El programa Aló Presidente se ha mantenido durante muchos años en primer lugar de preferencias de los usuarios los domingos, no solamente en Venezuela sino en muchos países. Chávez mantiene su gran prestigio internacional y es considerado por muchos artífice, o por lo menos inspirador, de los grandes cambios positivos que se han producido en lo que va de siglo. Paradójicamente la sección "Venezuela en Positivo" no pudo ser presentada en el programa de hoy por falta de tiempo. Se podrá ver un resumen de seis horas el próximo domingo.

Oigamos ahora el final del programa número 1100. Hace más de dos horas que el presidente Chávez está diciendo que se termina, y nada. Parece que ahora si. Oigamos.

Chávez:Bueno compatriotas, ahora si se termina el programa...gracias a todos. ¡Tenemos nuevo record! ¡En este momento se cumplen doce horas! ¡Doce horas! Vamos a aplaudir, creo que es record mundial. Un aplauso para la revolución bolivariana. Bueno vamos a despedirnos ahora si. Ustedes deben estar cansados y yo no he ido al baño... ah, pues, no. No he ido al baño desde esta mañana cuando llegamos a aquí. Bueno llegó la hora de despedir, hace horas que me están haciendo señas. Adiós, amigos y amigas. Ha sido para mí un honor infinito que no se puede describir. Ustedes me han honrado con su confianza y me han aguantado durante tanto tiempo. Adiós amigos. Un momento. Me dicen que unas personas de la tercera edad quieren cantar. ¿Qué dicen ustedes, los dejamos que canten? ¿Si? Bueno, vamos a dejar cantar a los viejitos. A ver ¿dónde están? ¡que canten! ¡Ah, caramba! Pero si es mi buen amigo Carlos Ortega...Chico ¿cuándo vas a levantar ese paro? ah, Ledezma ¿qué tal, viejo? ¿cómo estás? ¡Y Carlos Fernández! ¡Carmona! ¡Napoleón! Pero que sorpresa. ¡Padre Baltasar! Bueno, ya no eres sacerdote, me enteré que te expulsaron, pero no puedo decir por qué...¡Picarón! Henrique también está... y todo ese grupo de viejitos... es un coro, Martha Colomina, Patricia... Ah no, esto es una broma chico, ¿que quieren ustedes? Ustedes son los que siempre me han hecho la vida imposible ¿qué hacen aquí? ¿A cantar? ¿Quieren cantar? Bueno, pues canten entonces. Los escuchamos. A ver ¿qué van a cantar? ¡Canten pues!

Coro de ancianos: Se va, se va, se va, se vaaaaaa.... se vaaaaa, se vaaaaa. Se va, se va, se va, se vaaaaaaa... se vaaaaa, se vaaaa...