17 de marzo

4 de agosto del 2002

EE.UU. tras el petróleo africano

VG Noruega
Traducción libre de Oscar Gamboa para Rebelión

Estados Unidos adelanta una campaña diplomática y de presión para aumentar sus fuentes de petróleo alternativas a las del Medio Oriente, inciertas por el planeado ataque a Irak.

Los enviados del departamento de estado norteamericano en Nigeria, trabajan a marchas forzada para presionar el aumento en la producción y exportación del crudo hacia los Estados Unidos. Nigeria es el séptimo productor mundial de petróleo y el quinto en suplir del mismo a los Estados Unidos.

Los norteamericanos se reunieron con el presidente nigeriano Olusegun Obasanjo para discutir el aumento de la importación, la cual se calcula que representa el 15 % del total de crudo a los Estados Unidos. Después de los ataques del 11 de septiembre, el gobierno norteamericano busca afanosamente aumentar la importación de petróleo de la mayor cantidad de países productores posibles. Todo esto para contrarrestar una posible sanción de los proveedores del Medio Oriente como consecuencia del planeado ataque a Irak. Los enviados norteamericanos también visitaron Angola la semana pasada. Estos dos países africanos poseen grandes reservas explotables de petróleo.

Presionando los acuerdos de la OPEP.

Al mismo tiempo los norteamericanos y sus aliados en Nigeria, han puesto en prioridad la discusión sobre qué cambios de estrategia se deben hacer en relación con la organización internacional. Esto quiere decir que, se cuestiona y se considera la representación de Nigeria en la OPEP. Según los americanos, la política de reducción común de la producción para aumentar el precio, ha ocasionado una seria baja en los ingresos del país africano. En los círculos de poder se planea romper con los acuerdos y convenios que sugiere la participación en la OPEP, y apostar el todo o nada, precisamente con la exportación a los Estados Unidos.

Una ambiciosa misión.

La delegación norteamericana, liderada por el secretario asistente del departamento de estado para Africa,Walter Kansteiner, tiene en frente una complicada agenda.

Según las fuentes estadounidenses, se desea "cooperar" en materias humanitarias, guerra contra el narcotráfico y el terrorismo. El Financial Times escribe que, los norteamericanos esperan que las reservas de petróleo de toda el área alcancen el 25 % del total de la importación de la única superpotencia.

Explotación a mar abierto--Offshore-

Las últimas indicaciones sobre que algunas de las largas guerras africanas han terminado o están a punto de hacerlo, ofrecen perspectivas favorables para los Estados Unidos. Los analistas del primer mundo creen que el tratado de paz en Angola y la reinserción de Unita, conducirá a un aumento en la producción de crudo en el país. Actualmente se producen en Angola aproximadamente 1 millón de barriles diarios.

La guerra civil angolana obligó al país a desarrollar la explotación a mar abierto, (Offshore)lo cual hace que los vínculos con el país continental sean mínimos. La mayor parte de la operación de mantenimiento y transporte han sido suplidas desde otros países en la región. En lo concerniente a las ganancias de sus operaciones, ha sido también el país continental el menos favorecido. Prácticamente insignificante en relación a la producción.

Sudan

En el caso de Sudan, los norteamericanos ven en el una fuente prometedora de crudo a largo plazo. Por el momento la producción petrolera del país es poca, pero es considerado después de un eventual fin de la guerra como un proveedor estable.

Pero antes de que los americanos puedan meter mano a las reservas sudanies, tendrán que encontrar una solución política las autoridades en Khartoum y los grupos étnicos del sur, concerniente a los derechos de propiedad de los yacimientos, los cuales se localizan en su mayoría en los territorios donde habitan dichas comunidades.

Tomado de Rebelión


Regresar
Home