LA NOCHE REGALÓ UNA ESTRELLA
La noche regaló su primera estrella cuando más se te esperaba.
Entraste en el vientre de tu madre, vientre de amor y de espera.
Hoy, con estos versos quiero decirte, retoño de niño bendecido,
que eres deseado como la flor desea su primer rocío.
Eres torrente de una misma fuente, parte de dos mundos enamorados,
ternura de una madre embelesada,
latido que en vida se transforma en una larga noche de esperanza.
Cada latido habla de ti, capullo que después de nueve lunas saldrá a la luz.
Florecerás radiante entre champaña y platos rotos,
tradición de tierras lejanas, tierras que ya corren por tus venas.
Dios bendiga tu futuro en este mundo imperfecto.
Que Él te guíe de su mano y te llene de bendiciones.
Quiera Él que en tus andanzas seas un hombre justo y bueno,
y que con el toque de tus manos, todo lo llenes de flores blancas.
Christos será tu nombre que solo lleva el primogénito,
orgullo de tus padres y alegría de tus abuelos.
Serás luz en sus moradas, ángel venido del cielo,
que te incubaste en esta tierra para dar amor y ternura.
Dedicado a mi sobrino Christos
Autor: Roberto I. Salame
Cancion: Cancion de cuna.