Por Bulma
El funeral fue lo más conmovedor. Todos estaban ahí: Son Gokuh, Chi Chi, Kuririn, 18 Go., Marron, Gohan, Videl, Pan, Goten y su novia Paris-chan, Gyumaoh, el Dr. Brief y su esposa que no soportaban el dolor que les causaba la muerte de su hija, el pervertido Muten- Roshi, Yamucha, Poal, Dende, Piccoro y por supuesto Vegeta, Trunks y Bra.
Vegeta apenas podía contener las lágrimas. Era doloroso ver a su ser más querido inerte, sin vida. Añoraba todas las veces en que Bulma lo abrazaba, lo acariciaba y lo besaba. Sus besos... era algo que nunca más volvería a sentir sobre sus labios, aquella sensación dulce y húmeda que al principio lo molestaba tanto y que ahora extrañaba más que nunca.
La tristeza de ver a un ser tan querido sin vida se reflejaba en los rostros de todos. Las lágrimas mantenían húmedas las mejillas de todos, con la extraña excepción de Vegeta y Trunks.
Bra no podía soportar aquello, por lo que permanecía abrazada a su hermano, escondiendo a veces su rostro en su hombro.
No podía contener más el dolor y las lágrimas, ni oir las palabras de consuelo, ni escuchar los sollozos de sus amigos. Trunks ya no podía más, su ser más querido se había ido y lo había dejado solo en este mundo, no podía confiar en nadie mas que en su padre, pero él estaba totalmente deprimido y no podía escuchar una sola palabras relacionada con su desaparecida esposa. Además, su hermana estaba también en un estado parecido. A nadie podía confiar su dolor y tristeza...
Así sumido en sus pensamientos, cada uno pasó la ceremonia.
Por fin, llegó la hora de sepultar el ataud. Bra y Trunks se retiraron porque era demasiado duro aquello.
Vegeta aún no lloraba, sin embargo se notaba la gran tristeza en su rostro. Nadie se atrevía a hablarle.
Finalmente, se marcharon a casa.
Vegeta no salía de su cuarto. Trunks y bra estaban muy preocupados ya que su padre no salía ni a comer. Cuando le hablaban, nunca contestaba. Incluso llegaron a pensar que se marchado de la casa. Después de muchos días de no recibir respuesta, Trunks tuvo que abrir por la fuerza. Su padre estaba sentado al borde de la cama, con la cabeza entre las manos.
-Papá... -dijo Trunks.
-Papá, necesitamos de tí, por favor. -completó Bra.
-¡No puedes viri así el resto de tu vida! -gritó Trunks, un poco fuera de sí por la actitud derrotada de su padre que tantas veces lo había animado e incluso obligado a seguir adelante.
-Tienes razón, mejor sería terminar con el dolor de una vez... -dijo Vegeta. Su voz, tantas veces fuerte y segura, apenas era un murmullo en el silencio desesperante que se había ocasionado en la habitación.
-¡No! Yo hablo de volver a ser como antes, a sifrutar tu vida... Papá, mi mamá se ha ido y no volverá nunca más, debes aceptar esa verdad... como yo la he aceptado... -sus últimas palabras sonaron tristes, sin vida.
Bra le dió una bofetada a Trunks.
-¡¿Cómo...?! ¡¿Cómo te atreves a decir eso?! ¡TE ODIO!
Bra salió corriendo a encerrarse en su cuarto.
Trunks se tocó la mejilla. Nunca le habían dado una bofetada ni le habían dicho aquellas palabras con tanto sentimiento, odio y rencor, "te odio", sonaba aún en el ambiente; él nunca había pensado que alguien le hiciera eso... y menos su hermana.
Vegeta sólo derramó unas cuantas lágrimas. Aquel suceso había empeorado la situación de por sí difícil.
A media noche, Bra bajó a la cocina a comer algo ya que no había cenado. Trunks escuchó pasos y bajó a ver quién era. Se encontró frente a frente con su hermana.
-Bra... perdóname, por favor...
-¡No, tú no nos entiendes, no comprendes el dolor que mi padre y yo sufrimos! ¡Eres tan... insensible! ¡No quiero volver a verte nunca más!
Repentinamente, Trunks sintió el ki de su padre. Volteó y vió la silueta de su padre que había estado escuchando lo ocurrido.
Trunks y Bra guardaron silencio.
-¡Papá, espérame! -dijo Trunks al ver que Vegeta se marchaba.
Trunks acompañó silenciosamente a Vegeta a su recámara.
-¿Papá?
-Trunks... date cuenta, sin tu madre no tengo nada por qupe vivir... nada... -la voz de Vegeta se apagó en el silencio de la noche.
-Pero, ¿qué hay de mi hermana y de mí?.
Vegeta guardó silencio.
-¡¿Qué hay de nosotros?! ¡¿Qué no te importamos?! Yo he tenido que superar esto sólo por tí y mi hermana. Ahora es tu turno de enfrentar tu vida. Este es un reto que tú puedes superar. ¡No tires tu vida así!
-Tienes razón, Trunks, Bulma fue my buena conmigo pero no los puedo ignorar a ustedes que son mis hijos. Ahora son mi única razón para vivir y no los defraudaré.
-Gracias, papá. -Trunks tenía lágrimas en sus azulados ojos, pero eran lágrimas de felicidad... su padre había vuelto...
