Mientras haya una buena razón del miedo o de la ansiedad, y no interfiere con la capacidad al trabajo, no juega, y no socializa, no se considera un problema. Pero cuando la ansiedad adquiere una vida sus el propios y comienza a interrumpir actividades diarias, la situación es no más normal. Un desorden emocional genuino ahora está en el trabajo... y es hora de ver a un doctor. Los millares de excedente científico de los estudios el pasado varios años demuestran que la tensión arterial alta, las úlceras, los dolores de cabeza de la jaqueca, los movimientos, el alcoholismo, la depresión, la cólera, la fatiga, el apego de droga y muchas otras condiciones médicas son a menudo debido a los efectos a largo plazo de la tensión. El sello de este problema es preocupación y tensión crónicas sin causa evidente. La gente que sufre de desórdenes de ansiedad generalizados puede preocuparse excesivamente de salud, de dinero, de la familia, o del trabajo, anticipando a menudo desastre. Aunque están generalmente enterados que su ansiedad es más intensa que necesaria, no pueden parecerse la dejan ir. La preocupación constante contribuye al apuro que duerme y que relaja. La gente con desórdenes de ansiedad puede asustar fácilmente y tener concentrarse del apuro. El desorden de ansiedad generalizado conduce a menudo a la depresión. Aunque es infrecuente, ciertos problemas médicos pueden mímico los síntomas de la ansiedad, o aún lo producen. Las palpitaciones y el shortness de la respiración causados por un latido del corazón irregular se pueden confundir fácilmente desde ansiedad. Un coágulo en el pulmón (embolia pulmonar) causa a menudo sensaciones inexplicadas de la ansiedad. Los problemas neurológicos tales como desórdenes de la epilepsia y del cerebro pueden ser responsables de síntomas de la ansiedad. Tan anemia de la poder, diabetes, enfermedad de tiroides, y problemas suprarrenales. Estos síntomas desaparecerán generalmente cuando la enfermedad subyacente se trae bajo control, aunque la ansiedad requiere a veces el tratamiento separado. Muchas organizaciones apoyan hoy la investigación en las causas, la diagnosis, la prevención, y el tratamiento de los desórdenes de ansiedad y de otras enfermedades mentales. Los estudios examinan los riesgos genéticos y ambientales para los desórdenes de ansiedad importantes, su curso--solamente y cuando ocurren junto con otras enfermedades tales como depresión--y su tratamiento. La última meta es poder curar, y quizás incluso prevenir, los desórdenes de ansiedad. Los psicólogos, los trabajadores sociales, y los consejeros trabajan a veces de cerca con el siquiatra o el otro médico, que prescribirán medicaciones cuando se requieren. Para alguna gente, la terapia del grupo es una parte provechosa del tratamiento.
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