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MIEDOS
En la
puerta de mi salón gris
hay alguien que está
tocando
y
siento miedo de abrir,
siento
miedo y espanto.
Miedo
con encontrarme
con
ese mundo que me hace daño,
con ese
mundo que me atormenta,
con ese
mundo que me llama.
Porque
sé que al otro lado de la puerta,
dejaré
mi ilusión de amar
dejaré esa felicidad que
busco
dejaré
mi fe, mi esperanza.
Dejaré
aquello, que me ata a la
vida,
dejaré
tus ojos,
tu rostro, tu piel, tu
boca,
¡ay de
mí, mi Dios !
dejaré mi sueño de amor
sumido
en las sombras...
Alma...
Dile que se
vaya porque no quiero verlo...
Alma...
Dile que no toque porque
espanta a mi corazón...
Alma...
Dile que
me atormentan sus silencios de
miedo...
Alma...
Dile que a mi vida poco le queda en el
salón...
Alma...
Dile que a mis miedos ha tocado y
despertado...
Con un
sutil beso
llenito
de amor,
ese beso del olvido
que lleva sabor a pena,
ese beso tan lejano
ese beso de quimeras,
ese
beso que se funde
en
el desierto de mi amor...
En mi
salón gris,
alguien
toca a la puerta,
para que la deje
abierta
y
pueda entrar el dolor...
Más yo
ya no estaré,
para
ver sus ojos tristes,
en
la penumbra de ese ocaso...
Que mi
vida... Soñó.
Patriccia
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