El Ejecutivo español niega que Ibarretxe le informara
sobre los documentos
GARA | DONOSTIA
EA incluye en el último número de su revista
''''Alkartasuna'''' la carta que, fechada en setiembre de 1998, remitió
a ETA a la «vista de las versiones parciales y, por ello,
inciertas de lo entonces sucedido y de la consabida ofensiva propagandística
del Gobierno y sus adláteres».
En la misiva, traducida del euskara, se recoge que «el
documento que aprueba EA es el que recoge los añadidos
al enviado por vosotros. En el caso de que vuestra decisión
fuera no aceptarlo como válido y retomar el debate sobre
los contenidos, respetaríamos absolutamente tal postura».
La formación presidida por Begoña Errazti explica
en su publicación interna que el hecho de que «sólo
una parte» del documento tenga el sello de la organización
armada se debe a que ETA «hace llegar una propuesta, que
EA y PNV consideran aceptables pero incompleta y se le remiten
las aportaciones adicionales que EA y PNV consideran también
imprescindibles para que figuren en el documento con el sello
de todas las partes».
El relato de hechos expuesto por EA se cierra en setiembre,
cuando ETA les remite un escrito «en el que no acepta las
aportaciones de EA y PNV» y «se le responde que en
tal supuesto no existe acuerdo».
Indica que «algo similar sucede con el PNV, aunque resulte
reveladora la forma en que este partido, según la documentación
exhibida, trata de culpar a EA ante ETA de exigir tales aportaciones,
que al PNV no le parecían oportunas. Todo ello, a espaldas
de EA».
En la revista, EA acusa a PP y PSOE de preferir «cualquier
versión de ETA antes que las de EA y PNV» y denuncia
la ofensiva desatada. «Parece que la razón de Estado
hace preferir a la clase dirigente española un conflicto
violento que una unidad de acción política entre
todos los sectores abertzales».
Reitera a sus bases que seguirá propugnando el «diálogo
responsable», al tiempo que indica que sacará «las
oportunas consecuencias del proceso y las experiencias vividas
a la hora de fijar las bases de confianza y lealtad necesaria
en toda negociación».
Javier Madrazo, por su parte, reveló ayer que IU-EB
conocía «las conversaciones», dado que «fuimos
emplazados a las mismas. ETA se dirigió a EB también
para mantener esas conversaciones. Después de pensarlo
mucho declinamos participar».
Mentis del Gobierno español
Al cruce de explicaciones de PNV y EA sobre los documentos
de ETA, ayer se sumó el desmentido del Gobierno español
a las declaraciones del lehendakari Juan José Ibarretxe
señalando que informó a José María
Aznar sobre «los papeles de ETA».
El escueto «no es cierto» del ministro portavoz,
Pio Cabanillas, recibió una inmediata réplica desde
Lehendakaritza. Fuentes de Ajuria Enea precisaron que la comunicación
se produjo durante el encuentro que Aznar e Ibarretxe mantuvieron
el pasado 30 de setiembre.
Indicaron, además, que el Ministerio del Interior «filtró
a los medios informativos» ese mismo día uno de los
textos, por lo que concluyeron que afirmar lo contrario supondría
que, «o bien no se dice la verdad o bien Mayor Oreja no
informó al presidente». Insistieron en que Ibarretxe
«habló personalmente» de los documentos con
el presidente del Gobierno español y apostillaron que «fue
el propio Aznar quien sacó la conversación».