Al parecer el gobierno estonio ha decidido revocar la ley que impide que los exaagentes del KGB puedan acceder a cargos públicos en Estonia.
Puede que muchos no lo sepan pero en la mayor parte de los países de la CEI (antigua URSS), las personas que han realizado actividades para alguno de los servicios secretos comunistas no pueden ser burócratas ni trabajadores estatales. La imagen del Presidente Ruso, Vladimir Putin, rodeado de un gabinete de chekistas como el no es ni mucho menos la tendencia dominante.
El caso polaco es un ejemplo desencarnado. Todos los miembro de la administración han de jurar no haber pertenecido nunca a los servicios secretos comunistas bajo pena de prisión. Hasta el momento, y que yo sepa, sólo han enjuiciado a 2 personas bajo la acusación de haber sido informadores. El caso polaco resulta bochornoso miremos por donde miremos porque los jerarcas comunistas son los mismos que durante la Perestroika, es decir, para mantenerse en su posición y terminar en la cárcel traicionaron a quienes les hacían las labores sucias, hicieron una transición basado en la traición de quienes les fueron fieles. Ahora los chekistas polacos están condenados a vivir en empresas privadas y a la marginalidad.
Muchos exagentes del KGB en Rusia trabajan y tiene altos cargos en empresas privadas rusas y extranjeras. Pero la situación de los polacos, checos y bálticos es bastante difícil. El noble oficio chekista no tiene el prestigio ruso y conseguir empleo les es muy difícil. El agente, agente, no puede poner en su currículum vitae que durante 20 años (por ejemplo) ha sido chekista, ¡¡¡no tiene nada que poner!!!, tal vez que habla varios idiomas e inventarse un pasado y rezar para que no descubran la farsa. Si pensamos un poco más probablemente no tengan derecho a una pensión de jubilación.

EL NUEVO FASCISMO



Estonia ha acusado de crímenes contra la humanidad a cinco estonios y dos rusos del KGB por organizar las deportaciones de 475 ciudadanos en 1948, su abogado (ruso) dice que los “crímenes” no han sido probados pero todos sabemos que se lo pondrán difícil. Pero al pregunta es ¿por qué ahora y no a mediados de los años noventa, por ejemplo?. Tal vez la respuesta esté en el revisionismo sobre la II Guerra Mundial que invade Europa. En Suecia mucha gente no cree que el Holocauto judío existiera. En Francia el ex ministro de educación comentaba horrorizado en un periódico local que no han colegio donde al abrirse el tema no salga un niño diciendo que eso nunca existió y declaró que –la situación es francamente preocupante- y afirmó que este revisionismo y nuevo antisemitismo, -hecha raíces en el conflicto de Oriente Medio- . Buena parte de las comunidades musulmanas que se instalan en Europa son profundamente antisemitas y las policías francesas y alemanas ya han avisado de que se están estableciendo vínculos entre las extremas derechas europeas y grupos islamistas radicales. Pero no sólo esto. Algunos historiadores, políticos y hasta militares consideran que el Ejército Rojo cometió crímenes contra las poblaciones alemanas (violaciones de mujeres, matanzas, etc...) y por lo tanto los ciudadanos alemanas tienen derecho a ser considerados víctimas de los “aliados” (también por los bombardeos de ciudades por parte de los americanos y británicos).
Se habla del fascista de Sharon, de la guerra de Bus, de ultraderechista Aznar... pero se equivocan señores, el nuevo fascismo anda por otros derroteros, más sigilosos y más peligrosos.

PERO NO TODO ES TAN OSCURO

La situación no es igual en todos los países. Los casos paradigmáticos son Ucrania y Bielorrusia. Pese a Leonid Khruma, -el presidente enemicísimo de comunistas, ha encarcelado gente por “conspirar contra el estado”-, los exagentes del KGB dirigen el nuevo órgano de inteligencia de su país y mantienen contactos estrechos con sus colegas rusos. Tan estrechos vínculos les unen que el jefe de la Cheka de Ucrania, Nikolai Golushko, se convirtió un buen día en jefe del FSB (sucesor directo del KGB en competencias interiores) y se llevó un buen manojo de secretos a Rusia como si no pasara nada. En Bielorrusia ni siquiera han cambiado el nombre de la agencia ¿para qué? (es KGB pero en bielorruso). Su presidente, Alexander Lukashenko, es un admirador de Félix Dzerzhinski, aparte de haber sido él mismo, claro está, chekista. Lukashenko es conocido como “el último dictador de Europa” porque es un comunistoide que se ha negado a privatizar a lo bestia y de ahí su apodo. De hecho es en Bielorrusia donde la situación es más tranquila para comunistas y chekistas.

ESPÍAS E INFORMADORES.

Hablaba con una amiga que tenía una idea equivocada sobre el valor del “informador”. El “informador” es cualquier persona que se ofrece o es reclutada por la fuerza para trabajar en servicios de espionaje, puede que la recluten para recortar trozos de periódicos y hacerle dos agujeritos y enviarlos a la central (como era el caso de un periodista del Correre della Sera); o pueden hacer tareas como Melita Norwood, que pasó la fórmula de la bomba atómica a la MGB de Laurenti Beria. Todo depende de la posición laboral del reclutado.
El informador se distingue del agente porque el primero no ha sido entrenado para ser espía y el segundo sí. El agente está muy claro que es un espía, está dentro de la organización, del entramado base; pero la situación del “informador” es mas peligrosa: ni está fuera ni está dentro, no es agente pero colabora con el espionaje. Si eres informador de los servicios de espionaje de tu país y estás dentro de él estás seguro. Pero trabajas para un país extranjero la cosas se complican, eres un TRAIDOR y estás, quieras que no, SOLO. Aun siendo un vulgar informador de “papeleo” ante la ley eres un ESPÍA, un AGENTE, y si te descubren serás juzgado por espionaje aunque no hayas sido entrenado para serlo.

CONSEJO

En términos de espionaje, el “criptocomunista”, es el comunista fiel a los dictados de Moscú (el “estalinista” en términos despectivos o “prosoviético”), y el más temido por los servicios secretos de la Europa Occidental y EEUU, porque era los “oídos” y los “ojos” de la KGB soviética de una forma directa. Por lo visto el SVR, antiguo directorio uno del KGB, sigue reclutando “criptocomunistas”, pese a que hace más de una década que cayó al URSS. Si sois “criptocomunistas” y los chekistas rusos os “piden ayuda” pedidles a cambio que os den una clase rápida de qué hacer si sois descubiertos.
No es broma.

Saludos.

Por camarada_eleone
creadora de la web “La Sombra de la Cheka” y miembro del foro “Canalcomunistas” y fundadora de “Los Agentes de Moscú”

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