17 de marzo

Nicaragua, 29 de noviembre del 2002

Consecuencias de la aplicación del ALCA (II)

Óscar-René Vargas (*)
El Nuevo Diario

En el reciente Foro Consulta sobre el TLC con Estados Unidos, que realizó en Managua, se llegó a un consenso en torno a no precipitar un acuerdo "que podría hacer permanente una forma de relaciones económicas desastrosa para nuestro país". Al mismo tiempo, se considera que el gobierno no debería continuar las negociaciones sin abrir "un debate real y sustantivo sobre la integración económica en las Américas". De lo contrario, se continuará suscribiendo compromisos que carecen de la menor legitimidad, y que serán profundamente negativos para el desarrollo humano de los habitantes de la región centroamericana.

Lo peligroso de la implementación del ALCA es la falta de información que poseen grandes sectores sociales de los pueblos latinoamericanos, muchos de ellos con elevados índices de analfabetismo, y cientos de millones sin ninguna preparación para conocer, salvo las experiencias personales, teóricamente lo que significa el ALCA. Otras conclusiones que podemos señalar sobre las consecuencias de la implementación del ALCA para América Latina son:

7- El ALCA y la propiedad intelectual. El ALCA expandirá las reglas del NAFTA o TLCAN sobre el monopolio de las patentes (particularmente importantes en el sector farmacéutico) a todo el continente así como legalizará los organismos genéticamente modificados, con sus consecuencias sobre el precio de los medicamentos y la salud de la población. Por otra parte, el ALCA, como el TLCAN o NAFTA, impedirá, bajo el pretexto de otorgar seguridad absoluta a las inversiones, cualquier regulación estatal aún cuando ésta se apoye en consideraciones de bienestar general o de defensa de la salud pública o el medio ambiente.

El objetivo estadounidense de mantener la patente y la exclusividad en la producción de medicamentos, es adueñarse de las patentes de los recursos fitogenéticos del continente y mantener su monopolio sobre las tecnologías de punta. El derecho de propiedad intelectual y patentes también supondrá todo un negocio para las multinacionales de la biotecnología, quienes verán aprobados sus productos transgénicos y garantizarán su monopolio en la producción y distribución de semillas, fertilizantes e insecticidas. Los productos transgénicos no producen su propia semilla, los campesinos deben adquirirla para cada cosecha a la multinacional productora o propietaria de la patente.

8- El ALCA profundizará la privatización de los servicios sociales. El proyecto del ALCA se extiende, además, a los servicios, comprometiendo a los estados a garantizar el derecho de las empresas a prestarlos, con la única excepción de aquellos brindados por el Estado en forma absolutamente gratuita. Esto abre la posibilidad de la privatización donde ella no ha tenido aún lugar, entre otros sectores la educación y la salud; así como excluye expresamente revertir las privatizaciones ya realizadas.

El principio general es transformar los servicios sociales en mercancías, cuyo acceso quede regulado por la capacidad individual de pago. Por otra parte, permitirá que las empresas privadas, como ya ha ocurrido en Canadá y México, exijan las mismas exenciones y privilegios con que cuentan los organismos públicos que los prestan. Los Estados Unidos es líder mundial en la exportación de servicios, con un monto de 253 mil millones de dólares, 20% del total mundial. El 78% de su Producto Interno Bruto está nutrido por servicios.

No tenemos que olvidar que una de las lecciones más importantes de los últimos años es que la falta de salud genera pobreza y que el desarrollo no es únicamente un precursor de la salud, sino que la salud puede ser una herramienta muy eficaz de reducción de la pobreza y desarrollo económico. Invertir en la salud de la población es una condición indispensable para el desarrollo sustentable. Pero también hay que entender que la salud es también una herramienta muy eficaz para generar crecimiento económico, proteger el medio ambiente y reducir la pobreza.

Un informe de la Comisión sobre Macroeconomía y Salud mostró que aumentando la inversión en salud, a nivel mundial, en 66 mil millones de dólares anuales respecto del nivel de gasto actual salvaríamos 8 millones de vidas al año y generaríamos un beneficio anual de al menos 360 mil millones de dólares hasta el año 2015. Varias enfermedades están directamente relacionadas con la pobreza, la insalubridad del agua y la contaminación del aire. De hecho, en el año 2000, casi cinco millones de niños menores de cinco años murieron de enfermedades agravadas por la insalubridad del entorno.

9- El ALCA acelerará la quiebra de las medianas y pequeñas empresas y la desindustrialización del país. La eliminación de las barreras arancelarias, la prohibición de cualquier política estatal destinada a favorecer el uso de bienes nacionales (compra nacional) o privilegiar de cualquier forma el desarrollo local o sectorial, la obligación de abrir las compras o contrataciones del estado en todos sus niveles (nacional y municipal) que superen en un monto mínimo a todas las empresas del continente, entre otras cuestiones, amenazan con condenar a la desaparición a las medianas y pequeñas empresas así como profundizar la desindustrialización de la economía latinoamericana. Por otro lado, los efectos de la libre importación de mercancías amenazan con condenar al sector industrial local a una completa desaparición, profundizando así los altos índices de desempleo que ya castigan a los países latinoamericanos. Se calcula, según las cifras manejadas por la asociación ATTAC (Association pour une Taxation de Transactions Financières pour l'Aide aux Citoyens), que 28 mil Pymes (Pequeña y Medianas Empresas) tuvieron que cerrar en México tras la irrupción del TLCAN o NAFTA.

10- El ALCA limitará los derechos democráticos de la sociedad. Todo intento de regulación estatal, así esté fundado en criterios de desarrollo económico local o nacional, progreso social, bienestar de la población o protección del medio ambiente, puede ser cuestionado con éxito por el capital como lo demuestra la experiencia del TLCAN o NAFTA. Para nuestros países además dicho acuerdo tornará irreversibles las políticas neoliberales implementadas en la última década. En ese sentido las cláusulas del ALCA impondrán, desde hoy y hacia el futuro, un verdadero corsé a la voluntad de la sociedad y al propio funcionamiento de las instituciones democráticas. Una prueba de su carácter antidemocrático es que el acuerdo ha sido negociado a espaldas de los pueblos, sin consulta a las organizaciones sociales y sin debate parlamentario. Por eso planteamos, que dicho acuerdo no puede suscribirse sin antes convocar a la sociedad a expresarse en un plebiscito.

11- El ALCA y la agenda agrícola. Uno de los temas de mayor controversia dentro de las negociaciones del ALCA se centra en los productos agrícolas y ganaderos. América Latina es un importante productor agropecuario, tanto para el consumo interno como para las exportaciones. El sector tiene un fuerte peso en las economías nacionales: el producto bruto agropecuario mundial es del orden del 10 por ciento del total, pero se eleva al 25 por ciento al incorporar las fases agroindustriales, y del total de exportaciones un 40 por ciento son agroalimentarias. Estos indicadores dejan en claro que, cualquier modificación en el comercio agropecuario tendrá un enorme efecto sobre las economías nacionales. Esta importancia se eleva todavía más cuando se recuerdan los aspectos sociales y ambientales.

En varios países latinoamericanos la economía campesina sigue siendo la fuente principal de alimentación tanto en el medio rural como urbano, ofreciendo sustento a millones de personas. Las exportaciones latinoamericanas se encuentran amenazadas en varios frentes, muchos de los cuales pueden ser drásticamente afectados por el ALCA. Los precios de los productos se mantienen estancados o han caído, varios países latinoamericanos compiten entre ellos vendiendo los mismos productos y casi todos sufren los subsidios y proteccionismos desde los países desarrollados. Los países latinoamericanos ni siquiera podrán beneficiarse de sus ventajas comparativas en el sector de la agricultura dado que los subsidios a este sector (utilizados justamente por los EE.UU., para sostener a sus productores agrícolas) son una de las pocas excepciones planteadas en el tratado.

(*) Autor del libro: ¿Qué es el ALCA? Globalización, Estados Unidos y América Latina (2002).

Tomado de La Insignia


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