Reprimen adentro de la refinería

Edgar Omar Bustos A. (Inprekorr)
ARGENPRESS.info

Álvaro Uribe Vélez ordenó reprimir violentamente a los petroleros de Barrancabermeja. El Ejército permitió entrar sólo a los sindicalizados, y luego los reprimió, fueron apaleados y muchos heridos gravemente. La información fue publicada en el diario 'Vanguardia Liberal' de Bucaramanga.

La mañana del 21 de febrero se convirtió en otra de las trascendentales revueltas en la historia en la industria petrolera de Barrancabermeja e incluso del país, como consecuencia del conflicto laboral entre la Unión Sindical Obrera, USO y la Empresa Colombiana de Petróleos, Ecopetrol, desde la década de los 50 y 60.

A las 5:00 a.m. tropas del Batallón Plan Especial Energético y Vial No 7 acordonaron la entrada al Complejo Industrial y sólo permitieron el ingreso de los trabajadores sindicalizados de Ecopetrol, 24 horas después de haber levantado el paro del pasado miércoles y que lideraron en protesta al despido de uno de los trabajadores de la refinería de Cartagena, por presuntos daños en la infraestructura, la demora en el inicio de las negociaciones del pliego de peticiones y el contrapliego anunciado por la empresa de la Convención Colectiva de Trabajo para la vigencia del 2003 y 2004.

Los trabajadores sindicalizados ingresaron y se aprestaron a esperar la llegada de los dirigentes para dar inicio a una marcha 'pacífica' contra las políticas petroleras que, según ellos, pretende imponer el Gobierno Nacional. Sin embargo, 45 minutos después, la tensión y el desespero se tomaron las instalaciones de la refinería de Barrancabermeja. Ejército y Policía evitan el ingreso de los directivos del sindicato, lo que ocasionó los primeros enfrentamientos verbales con la fuerza pública.

Posteriormente, los trabajadores sindicalizados que se encontraban dentro de la refinería dieron inicio a la marcha que se dirigía hacia la Gerencia del Complejo Industrial, como protesta a las órdenes de Ecopetrol. La marcha fue dispersada por las autoridades con el uso de gases lacrimógenos, lo que ocasionó la disputa y el lanzamiento de piedras al interior de la refinería. En el hecho resultaron heridos un soldado y dos trabajadores.

Dirigentes y más de 200 trabajadores temporales y contratistas continuaban a la espera de que la fuerza pública permitiera el ingreso a las instalaciones. Algunos dirigentes intentaron entrar por la fuerza, al tiempo que se reanudaron los enfrentamientos entre los sindicalistas y miembros de la Policía Nacional.

Prevalece una aparente calma en las afueras de la refinería. Sin embargo las sirenas de la empresa anunciaban las dificultades y la tensión que existía al interior del complejo industrial, ante una amenaza del sindicato de paralizar la producción de combustibles, lo que ocasionaría un desabastecimiento en el país.

Entre tanto, los dirigentes permanecían aún frente a las instalaciones de Ecopetrol, anunciando consignas contra lo que ellos consideran ' la bota militar de Ecopetrol' y la administración central de la empresa.

Los trabajadores dieron inicio a lo que denominaron 'operación lonche' y en la que realizaron sus labores normales de receso y alimentación. Centenares de esposas e hijos visitaron a quienes se encontraban al interior de la refinería, mientras voceros del sindicato anunciaban la llegada a Barrancabermeja del presidente de la USO, Rodolfo Gutiérrez.

Paralizado, corazón de la refinería

Sobre las primeras hora de la tarde, los trabajadores que debieron ingresar en el turno de las 2:00 y ante la ausencia de uniformados, así como el cierre de la portería, arremetieron contra la puerta de Ecopetrol abriéndola a la fuerza. Simultáneamente, al interior de la refinería los agentes avanzaron hacia los trabajadores que se encontraban en la planta eléctrica, para desalojarlos del lugar. Los sindicalizados, al percatarse de la situación optaron por apagar la planta, generando la primera emergencia de la jornada y la parálisis total de la refinería del Puerto Petrolero.

'Esta joda se complicó' expresó uno de los sindicalizados, al tiempo que realizaban un mitin dentro del Complejo Industrial. Miembros del Ejército despejaron el acceso con gases, a pesar de que con los obreros estaban varios periodistas. Las tanquetas de la Policía fueron atacadas a piedra y éstas igualmente repelieron la manifestación.

La acción de los uniformados incrementó la ira entre los manifestantes, decenas de trabajadores se disiparon entre las calles cuarta y quinta y de la Avenida Galvis Galvis, mientras el gas se expandía obligando a los manifestantes a refugiarse entre algunos establecimientos comerciales. Incluso intentaron ingresar a las instalaciones de la Alcaldía.

'La ley nos ha agredido, estamos seguros de que iniciaremos la huelga' expresaron algunos de los manifestantes mientras se dispersaban por entre el comercio y las calles de la ciudad, en una marcha de protesta que culminó en la sede principal de la USO.

A menos de dos horas de que cayera la tarde, el sindicato se reunió para establecer las directrices a tomar sobre la situación y en la que anunciaron que dependiendo de lo que suceda hoy, es decir, si les permiten o no el acceso a su lugar de trabajo, se estaría definiendo la hora cero para declarar la huelga. La directiva del sindicato convocó a los medios de comunicación a participar de una asamblea general en la sede del Club Infantas, a partir de las 6:00 p.m.

Tomado de ARGENPRESS.info

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