17 de abril del 2003
JHON ALFONSO MORENO C.
EL TIEMPO
El primer mandatario pronunció ayer el que ha sido quizás su más fuerte discurso en contra de las Farc. Dijo que no cederá terreno "para que una caterva de bandidos siga abusando de la patria".
Durante la ceremonia de activación de la Brigada Móvil número 9 en Villavicencio, Uribe respondió así al último mensaje de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), firmado por 'Manuel Marulanda', en el que insiste en la necesidad de una zona desmilitarizada y el nombramiento de nuevos negociadores para discutir un eventual intercambio de guerrilleros presos por civiles secuestrados.
El mandatario afirmó que la puesta en marcha de la nueva Brigada Móvil, que tiene 1.300 hombres y que operará en la Orinoquia y el sur del país, es la demostración de que la Fuerza Pública está creciendo y avanzando hasta las zonas dominadas por los guerrilleros.
"Que nos esperen allá tranquilos porque por más espesa la selva y agreste la topografía allá llegaremos para derrotarlos y quitarle a Colombia la pesadilla de la violencia", dijo.
Agregó que la larga vida de mimos, caricias y contemplaciones con la guerrilla llegó a su fin, porque con este Gobierno y el acompañamiento popular va a ser derrotada totalmente.
"No llegaremos de rodillas ante ellos pidiendo que le perdonen a Colombia. El Ejército llegará crecido, fortalecido y con el apoyo de la gente que no quiere ser víctima del terror", manifestó.
Explicó, sin embargo, que el proceso no es fácil, ya que los cabecillas de las organizaciones han creado una estructura casi invulnerable a su alrededor, pero en la medida que se desmonten sus fuentes de financiamiento como el narcotráfico, el secuestro o sus cuentas bancarias, podrán ser capturados "como lo exige el pueblo colombiano".
Su discurso contrastó con las declaraciones que Uribe hizo el pasado fin de semana. Primero, en su viaje a La Macarena (Meta) el domingo dijo que no le molestaban las carreteras que las Farc habían construido en esa zona. Ese mismo día, en una entrevista con El Colombiano, afirmó que estaba preparado para dar un viraje "y negociar con ellos en 5 minutos".
El discurso de Uribe generó diversas reacciones. El analista del conflicto León Valencia dijo a EL TIEMPO que el Presidente es muy sensible frente a un despeje, porque fue su tema de campaña y su estrategia de seguridad se basa en la recuperación del territorio. "Pero él debe entender que el despeje que ahora piden las Farc es de otra naturaleza: sería limitado en el tiempo y el espacio y serviría para un intercambio. Sería funcional para la guerra, no para la paz".
El representante Gustavo Petro, del Polo Democrático, dijo que "me gustaría escuchar con el mismo tono enérgico hablar contra el paramilitarismo y la politiquería, pero no le escucho media palabra de eso. El Presidente se opone a una zona de despeje con las Farc, pero existen zonas de buena vecindad con los paramilitares y negociaciones con la politiquería en el Congreso. Le exige una rendición previa a la guerrilla, pero negocia con los paramilitares en medio de sus masacres".
JHON ALFONSO MORENO C.
Corresponsal EL TIEMPO
VILLAVICENCIO
Tomado de El Tiempo
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