Bogotá, Domingo 28 de octubre de 2001
EL TIEMPO
Rodeado de cuatro ex presidentes liberales, sus hijos, su esposa, banderas rojas y jóvenes ruidosos, Horacio Serpa aceptó ayer la proclamación de su nombre como candidato único del liberalismo a la Presidencia de la República y se comprometió a enterrar el neoliberalismo, a reformar la ley 100, a reformular el Plan Colombia y a desterrar el desempleo.
En una resolución, que fue aplaudida largamente por los 4.000 asistentes a la Convención Nacional Liberal, los ex presidentes Alfonso López, Julio César Turbay, Ernesto Samper y Carlos Lemos le dieron su respaldo a Serpa y le dieron el aval para que realice las alianzas políticas que considere necesarias para ganar las elecciones.
En el mismo documento, el candidato fue envestido como director único del liberalismo, en remplazo del senador Luis Guillermo Vélez.
La entrada de Serpa al Palacio de los Deportes, lugar escogido para realizar la Convención Nacional, se produjo puntualmente a las 12 y 30 p.m., tal como lo señalaba el libreto de la transmisión en directo por el Canal A y por Señal Colombia.
Durante las dos horas anteriores, los liberales habían escuchado balances del Partido, habían chiflado una carta abierta del candidato Álvaro Uribe Vélez que explicaba las razones de su ausencia y habían aplaudido las intervenciones de algunos congresistas y de Luis Ayala, secretario de la Internacional Socialista.
Pero todos esperaban a Serpa. Por eso, cuando apareció, el auditorio estalló en una explosión de júbilo jalonada especialmente por los jóvenes que ensordecieron con sus cánticos a algunos acartonados miembros del Partido.
Entonces, Serpa habló. Atacó sin compasión las fallas sociales del gobierno de Andrés Pastrana, le recordó sus niveles de corrupción y propuso revisar el modelo de desarrollo económico que "fracasó con sus políticas neoliberales, las cuales dispararon los índices de pobreza, desempleo y desigualdad".
Reiteró su propuesta de una paz negociada, pero señaló "que las Farc no pueden seguir de espaldas al país, sordos y ciegos a una nueva realidad internacional que no encuentra diferencia entre subversión y terrorismo". También dijo que en su agenda incluirá negociar con el Eln.
Señaló que el Congreso debe ponerse a las órdenes del país y no el país a órdenes del Congreso. "Para renovar la política no hay que acabar con las corporaciones públicas o limitar su representación territorial". Propuso elegir congresistas que tengan cualidades y castigar a quienes no las tienen. "¡La revocatoria es en marzo!", señaló.
Seguidamente dijo que el Compromiso Social renegociará con E.U. el Plan Colombia para privilegiar las inversiones y añadió que reformará la ley 100 y fortalecerá el Sena modernizándolo en nuevas tecnologías. "También vamos a salvar al Seguro Social y me comprometo a que en mi gobierno no cerraré ningún hospital al servicio del pueblo", señaló.
Tomado de EL TIEMPO