17 de marzo

18 de febrero del 2003

Decir la verdad

18 mentiras de EE.UU.

Dwight Meredith
Rebelión

Traducido para Rebelión por Germán Leyens

Dana Milbank, en un reciente artículo de Washington Post, señaló que Mr. Bush tiende a, digamos, tomarse libertades con la verdad. Milbank señaló que Mr. Bush ha hecho una serie de declaraciones "dudosas". Mr. Bush se ha lanzado por un camino de "deformaciones y exageraciones". En particular, Milbank menciona las siguientes:

  1. El Presidente dijo a la nación que Irak posee una creciente flota de aviones sin piloto que podrían ser utilizados "para misiones contra Estados Unidos". En realidad, ninguno de esos aviones tienen el alcance necesario para llegar a EE.UU.

  2. Mr. Bush citó un informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica diciendo que Irak está "a seis meses del desarrollo de un arma (nuclear)". La IAEA (por sus siglas en inglés) nunca publicó un informe semejante.

  3. Mr. Bush sugirió recientemente que la intransigencia de los sindicatos estaba impidiendo que los inspectores portaran detectores de radiación (para tratar de impedir que material nuclear ingrese a EE.UU.). El sindicato había aceptado el uso de esos equipos meses antes.

  4. Mr. Bush dijo en la campaña electoral que la legislación de seguro contra el terrorismo que presentaba "crearía más de 300.000 puestos de trabajo". Daniel Gross de Slate, ha estudiado el tema y dice que la declaración de Mr. Bush no posee fundamento alguno.

  5. El Presidente sugirió un lazo entre Al-Qaeda e Irak a través de un miembro de alto nivel de Al-Qaeda que recibió tratamiento médico en Bagdad a principios de este año. Funcionarios de inteligencia reconocieron más tarde que no poseían "evidencia palpable" de que el gobierno de Irak haya sabido que el miembro de Al-Qaeda se encontraba en el país.

  6. Mr. Bush implicó que un desertor iraquí había suministrado información sobre el estado del programa de armas de destrucción masiva de Irak en 1998. El desertor no poseía información sobre el estado de ese programa desde su jubilación en 1991.

  7. Mr. Bush sugirió en su campaña que sus reducciones de impuesto de 2001 se limitaron a nueve años como resultado de una "peculiaridad en las reglas del Senado de Estados Unidos". En realidad, la reducción de impuestos fue limitada a nueve años por Mr. Bush y los republicanos al tratar de ajustar el costo de la ley a 1,35 billones de dólares y disfrazar así las consecuencias fiscales a largo plazo de la reducción.

  8. Mr. Bush alardea que logró "el mayor aumento en los gastos para educación en mucho, mucho tiempo". En realidad, el 15% de aumento autorizado por la ley educacional de Mr. Bush es el mayor desde el año anterior, en el que Mr. Clinton autorizó el aumento del presupuesto educacional en 18,5%.

    La lista de exageraciones, deformaciones y mentiras no es ni aproximadamente definitiva. La administración también se ha permitido los siguientes embustes:

  9. Mr. Bush ha contado a menudo la historia del "trifecta". En la historia pretende que durante la campaña dijo que no habría un déficit excepto en el caso de una guerra, una emergencia nacional o una recesión. Mr. Bush luego sonríe y dice, "Nunca soñé con que ocurriría la trifecta". Mr. Bush jamás hizo una declaración semejante durante la campaña. La afirmación de que lo haya hecho es simplemente falsa. Después que la prensa indicó a la Casa Blanca que Mr. Bush no estaba diciendo la verdad. Mr. Bush continuó a contar su "enormidad". Vea The New Republic.

  10. Poco después de su inauguración, la Casa Blanca anduvo difundiendo la historia de que los funcionarios de Clinton habían robado platería, porcelana y el Sello.Presidencial de Fuerza Aérea Uno [el avión presidencial]. No era más que una mentira.

  11. La administración ha impulsado incansablemente la historia de que Al-Qaeda e Irak estaban en la misma liga en el 11-S, basándose en una supuesta reunión en Praga entre funcionarios iraquíes y el secuestrador Muhammed Atta. La historia fue desenmascarada nada menos que por Vaclav Havel.

  12. Mr. Bush sugirió que Ken Lay, de Enron, apoyó a Anne Richards en la campaña para Gobernador en Texas. Fue una verdadera enormidad.

  13. La administración se ha mostrado evasiva sobre el porcentaje de beneficios que recibe el 1% de más ingresos en los beneficios fiscales de 2001.

  14. Según informa Jeff Cooper: A mediados de agosto, el Secretario de Defensa Rumsfeld argumentó que la presencia de personal de Al-Qaeda dentro de Irak demostraba el apoyo de Sadam Husein a ese grupo. Una semana más tarde, el Secretario Adjunto de Estado, Richard Armitage reconoció que los miembros en cuestión de Al-Qaeda se encontraban en las partes del país controladas por los kurdos, fuera del alcance de Husein.

  15. El 15 de abril de 2002, Mr. Bush declaró ante la televisión británica, respecto al Medio Oriente, que: "Bueno, hemos probado las reuniones en la cumbre en pasado, como ustedes recordarán. No hace tanto tiempo que se convocó a una cumbre y no pasó nada, y como resultado tuvimos una importante intifada en el área".

    El 6 de abril de 2002, Mr. Bush declaró ante los reporteros: "Alguien me dijo que hay por ahí una historia de que de alguna manera yo estoy culpando a la administración Clinton por lo que ahora sucede en el Medio Oriente... Aprecio lo que el Presidente Clinton trató de hacer. Trató de lograr la paz en el Medio Oriente".

  16. John Ashcroft, declaró a la televisión desde Moscú que José Padilla había sido arrestado tratando de entrar a EE.UU. para hacer estallar una "bomba sucia". Pronto, "funcionarios de la administración señalaron que Padilla no poseía material radioactivo ni otros equipos para hacer bombas, de ningún tipo. Tampoco había escogido un objetivo, o formulado un plan".

  17. Como ha señalado Spinsanity la Oficina de Bush de Administración y Presupuesto trabaja con un sistema de engaños.

  18. La última enormidad se remonta a la discusión de la primaria republicana del 6 de enero de 2000 en New Hampshire en la que el candidato Bush prometió que jamás utilizaría el puesto de presidente "para osfucar" (sic).

La lista no es completa. Podríamos citar muchos ejemplos más. La lista es suficiente para concluir que la administración Bush se ha empeñado en una campaña de engaños, mentiras, exageraciones, estratagemas y deformaciones.

"¿Qué se puede pensar de una tal campaña? ¿Qué estándar podemos aplicar al evaluar la renuencia de la administración Bush a decir la simple verdad? Se recordará que en el año 2000, la campaña de Bush, sus aliados y la prensa, pensaron que Al Gore tenía problemas con la verdad. Tal vez, entonces, sería adecuado aplicar a la actual administración los mismos estándares que la prensa y los republicanos aplicaron a Al Gore durante la campaña.

Si ése fuera el caso, nosotros, como Dick Cheney, deberíamos estar "confundidos y entristecidos" por la incapacidad de esta administración de decir la verdad.

Tal vez deberíamos concluir que la administración es "profundamente deshonesta" o "delirante" como Donald Lambro del Washington Times y Michael Medved de USA Today dijeron de Al Gore según la cita de Bob Somerby.

Según Walter Shapiro en USA Today, podríamos llegar a la conclusión de que Mr. Bush tiene "un defecto de carácter" que es "profundamente preocupante".

¿Es relevante el que la administración Bush tome la verdad tan a la ligera cuando se trata de algún tema importante? Jonah Goldberg de NRO nos asegura que:

"No importa cuál sea la perspectiva de alguien, es difícil imaginar cómo alguien podría decir que la personalidad del presidente es irrelevante... Pero todo esto es un argumento tan viejo y tan flagrantemente obvio que se pierde el simple punto fundamental, tan a la antigua. El Presidente debería decir la verdad y ser un caballero."

Mr. Goldberg nos recuerda además que:

"Los estadounidenses comprenden que importa decir la verdad, pienso, espero. Y pensaba que la prensa lo comprendía, pero estoy cambiando de opinión... Pero la mentira penetra el corazón de la política y lo ennegrece. Es siempre relevante...

La honradez es una virtud. Por ello, si deseamos la visión definitiva sobre cómo reaccionar ante los engaños de la administración Bush, deberíamos escuchar a un experto en la virtud, Mr. William Bennett. Mr. Bennett escribió en una opinión editorial en el Wall Street Journal del 11 de octubre de 2002, lo siguiente:

"Sin embargo, como lo comprendieron los fundadores de la nación, no hay casi nada que importe más respecto a un jefe del ejecutivo que su carácter público y su confiabilidad, su veracidad y su integridad... "

"Las mentiras permanentes por una persona en un elevado puesto público, no son sólo "personales"; tienen que ver con el interés público. Un puesto público es una demostración de confianza del público, y la gente que la viola deberían responsabilizarse... "

La pérdida de confianza del público estadounidense en el gobierno es un tema vital del país. No necesitamos que otro presidente profundice aún más el cinismo de la gente.

Finalmente, si uno habla de un policía, de un maestro, de un doctor, o de un mecánico de automóviles, es de gran importancia ver si la palabra de esa persona posee algún valor. Si importa en el caso de todas esas personas, seguramente vale en la selección de un presidente.

http://www.pla.blogspot.com/2002_10_20_pla_archive.html#83387038

Tomado de Rebelión

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