5 de abril del 2003
Decenas de menores exigen en el Ángel de la Independencia un alto a la guerra
FABIOLA MARTINEZ
La Jornada
Niños mexicanos anhelan reconstruir Irak, abrazar a los menores de aquella nación en guerra y, de alguna forma, "detener las bombas" con sus manos.
Los pequeños miran también a diario la televisión y se espantan al ver personas de su misma edad "llenas de sangre por la guerra" o "a sus mamás que sufren porque sus hijitos están heridos en el hospital".
En un acto simbólico de "reconstrucción de Irak", realizado en el Ángel de la Independencia, un centenar de infantes, la mayoría niñas de la escuela Margarita Nassó, apilaron tabiques rojos dentro de un contorno pintado en el piso, símil del mapa de aquel país atacado por las fuerzas angloestadunidenses.
Al mediodía, sentados en las escalinatas del monumento de Paseo de la Reforma, se conformaron al principio con teñir con pintura las palmas de sus manos y mostrarlas como símbolo de paz. Casi jugando colorearon con blanco sus brazos "para no verlos rojos de sangre, como cuando Bush manda sus bombas para buscar al señor Saddam", expresó Rodrigo, de 11 años.
Pero la emoción terminó pronto cuando vieron acercarse hacia ellos a una veintena de reporteros, camarógrafos y fotógrafos que querían preguntarles muchas cosas. Las alumnas de la Margarita Nassó, plantel por el rumbo de Observatorio al que asisten niñas de bajos recursos, después de mirarse unas a otras, desconcertadas ante las cámaras, se animaron a contestar las preguntas y a mostrar sus pancartas: "Los niños de México queremos la paz. No a la guerra, no a las bombas... besos y abrazos a los niños de Irak".
Ya animadas, en confianza con los presentes, bajaron en hilera las escalinatas del Ángel y repitieron la consigna inevitable en estos días: "¡Queremos paz, no a la guerra!" Ahí los esperaba una mujer que representaba a la justicia en Irak, ciega y sometida por un cruel verdugo.
Unos metros adelante, los pequeños formaron figuras con los pedazos de tabique rojo que llevaron los participantes de la iniciativa mexicana de paz No a la guerra, no en nuestro nombre. "Seremos, entonces, promotores de la paz."
Minutos después de la afanosa construcción, uno de los niños mostró la obra terminada. "¡Esto es una casa con todo y su ventana!" Muy cerca del pedacito de banqueta que representaba Mosul, una alumna siguió el juego: "¡Esta es una escuela!", dijo parada sobre un tabique en el que se leía: "Basora".
Al final, dentro del territorio iraquí delineado con veladoras blancas en la célebre glorieta de Reforma quedaron sólo niños y niñas para hacer sentir su pesar por los pequeños que, en lugar de jugar a amontonar pedacería de tabique, o leer, como ellos en ese momento, pasajes de Las mil y una noches, sufren la guerra. "Ojalá que ellos pudieran jugar... que ya no los lastimen, por favor", expresaron.
Los chiquitos dejaron a los participantes de la iniciativa por la paz sus dibujos, un recuerdo valioso para quienes se manifiestan de manera permanente casi solos. Por eso, en esa misma glorieta quedó el grupo de apenas seis mexicanos, quienes desde hace 13 días se encuentran en huelga de hambre en protesta por el ataque en Medio Oriente.
Carmen Montes, una de las ayunantes, convocó a un encuentro musical hoy sábado a partir del mediodía en el Angel de la Independencia, en el que participarán grupos de reggae, jazz y rock. En las actividades destaca también la colocación de una manta-mural por la paz el domingo a las 10 de la mañana en el Zócalo, preámbulo para que el jueves 10 de abril se realice la marcha nacional contra la guerra Todo el país, todos a la calle, y el sábado 12 se una el contingente mexicano a la Jornada Mundial de Movilización a Favor de la Paz, del Monumento a la Revolución al Zócalo.
"Queda claro que todos, sin importar edad o ideología, nos estamos hermanando contra el genocidio, aunque no nos quieran oír. Como dicen los indígenas, junto a los niños repetiremos: podrán arrasar con nuestros árboles pero no con nuestras raíces. Seremos constructores de la paz".
Políticos, ONG, académicos e intelectuales se unirán a la movilización del próximo sábado
Las armas matan, el silencio también, refiere Payán
Esperamos que esta vez sí salga la gente, dice
ANDREA BECERRIL Y RENATO DAVALOS
La Jornada
Casi medio centenar de senadores de las tres principales fuerzas políticas del país, decenas de organizaciones no gubernamentales y gremiales, intelectuales y académicos, entre muchos, confluirán el próximo sábado en una gran marcha contra la guerra, que en palabras de Carlos Payán, director fundador de este diario, tiene que responder a una frase colgada en la geografía urbana de esta capital: "Las armas matan, el silencio también".
Una gran convocatoria a la que concurrirán también Cuauhtémoc Cárdenas, Diego Valadez y José Luis Soberanes. Caminarán del Monumento a la Revolución al Zócalo. El senador panista Javier Corral, uno de los organizadores, detalló que participarán más de 200 organismos y personalidades que han expresado su decisión de salir a la calle y convocar a la sociedad mexicana a unir su voz en reclamo de que "cese el exterminio de hombres, mujeres y niños que lleva a cabo Estados Unidos en el golfo Pérsico".
Payán hizo anoche la convocatoria en Casa Lamm, junto con Enrique Semo, Margarita Isabel, Mario Saucedo, Adolfo Llubere, Silvia Gómez Tagle, Héctor Díaz Polanco y Guillermo Rodríguez. Después de dos marchas que fueron pobres en asistencia, apuntó Payán, esperamos que la de este sábado sí haga salir a la gente a la calle.
Entrevistado en el Senado, Corral explicó que todos los legisladores perredistas firmaron la convocatoria, buena parte de los panistas y varios del PRI, entre ellos el coordinador Enrique Jackson Ramírez. Confió en que contarán también con diputados, rectores de universidades, académicos, gobernadores del país y los dirigentes de todos los partidos políticos. De entrada, ya confirmó su asistencia Rosario Robles, líder nacional del PRD.
Hemos querido aprovechar nuestras relaciones de carácter político, cultural y social para llamar a un conjunto de actores que no ha tenido presencia en este tema, llamar a su conciencia y decirles que necesitamos, todos, haciendo a un lado las diferencias políticas y religiosas, dar el testimonio ante el mundo de que somos pacifistas, dijo Corral.
Mientras, en Casa Lamm, Adolfo Lluvere comentó que dos gobernadores han confirmado su asistencia y que se prevé una respuesta en los próximos días de los rectores de las universidades del país. Incluso, refirió que ya se giró la invitación al cardenal Norberto Rivera Carrera para que la Iglesia se sume a la voz contra la guerra.
Enrique Semo planteó que el siglo comienza mal, pues en 27 meses ya se reportan dos guerras y otras maneras de represión. La humanidad parece no haber aprendido las lecciones y quiere repetir el Holocausto del siglo anterior, cuando perecieron más de 200 millones de personas en medio centenar de conflictos. Pero hay esperanza en el movimiento pacifista a nivel internacional, superior al de la década de los 50, cuando se asomó el peligro de una guerra atómica, o en los 60, con la guerra en Vietnam. El hecho de que estos movimientos no hayan evitado la conflagración no quiere decir que no se hayan alzado con victorias, sostuvo.
Estados Unidos, indicó, se ha situado por encima de las instituciones internacionales para imponer su dominio, aunque en contrapartida ha surgido una red espontánea de organizaciones pacifistas que se ha movilizado en el orbe para protestar y detener la invasión a Irak.
A ello se suma la censura que el gobierno de Estados Unidos ha emprendido contra los medios de comunicación de su país y las amenazas que hoy se extienden contra naciones como Irán, Corea del Norte y Siria, entre otras.
Guillermo Rodríguez, del Sindicato Mexicano de Electricistas, dijo que hoy estamos ante una dictadura global que sólo con la movilización podrá detenerse.
Por su parte, Silvia Gómez-Tagle señaló que es crucial que más allá de las fuerzas políticas, la población salga a la calle a expresar su rechazo a la guerra y al atropello a los derechos humanos que Estados Unidos está perpetrando en Irak.
La actriz Margarita Isabel llamó a profundizar el boicot contra los productos estadunidenses, y citó que Bush "se ha pasado las protestas por las dos torres gemelas". No podemos permitir que siga con su locura y que en el futuro sea México la víctima de sus intereses en caso de que no se privatice el petróleo. Hay que declarar la guerra a los intereses de Washington, resumió.
No podemos permitir que Bush se haya agandallado ya la reconstrucción y que haya señalado cuáles serán las empresas que se encargarán de esa tarea, precisó
Tomado de La Jornada
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