Site hosted by Angelfire.com: Build your free website today!
Inicio

 
www.tiemposdereflexion.com Anúnciate con nosotros
   El Plebiscito

El pasado domingo 22 de septiembre los capitalinos tuvieron la oportunidad de participar en uno de los principales instrumentos de la democracia, con el llamado plebiscito sobre los Segundos Pisos de Viaducto y Periférico. Lo hicieron sabiendo que la democracia se construye todos los días y con las más diversas decisiones, lo cual es una de las características de la democracia directa. Lo hicieron, también, con la seguridad en el respeto a su voto. Así lo garantizó la responsable participación del Instituto Electoral del Distrito Federal durante todo el proceso de organización.

Desgraciadamente, la nula disposición para llevar adelante un debate, por parte de los tres principales partidos políticos, así como la escasa información sobre el tema, permitieron abrigar pocas esperanzas respecto a que pudiera presentarse una copiosa concurrencia a las urnas. En realidad, todo pareció apuntar a que se repitiera el escenario del primer plebiscito organizado hace casi diez años. Gracias a las reformas que otorgaron a la Asamblea de Representantes la facultad de legislar en materia de participación ciudadana, en 1993 se organizó el primer plebiscito, éste sobre la creación o no del Estado de Anáhuac, el llamado Estado 32. Entonces los resultados fueron decepcionantes: casi un 94% de abstencionismo.

Esto no significa la deslegitimación del instrumento plebiscitario, como algunos han querido demostrar. Cuanto más, lleva a precisar que todo mecanismo directo requiere de información; precisamente eso, información, no dogmas ni arrebatos. En tal sentido, los primeros responsables de brindarla debieron ser quienes propusieron los segundos pisos y, también, quienes atacaron la propuesta. A cinco días del plebiscito, aquéllos y estos están ausentes, olvidándose de que la democracia requiere posiciones fundadas, diálogo, apertura a la crítica, incluso, la posibilidad de cambiar nuestros puntos de vista. Pareciera que la democracia les ahogara.

Con todo, nuestra historia reciente demuestra que el pueblo mexicano tiene una gran sabiduría política para acumular experiencias y aprovecharlas democráticamente. Por ello, desde la posición del Partido Liberal, el plebiscito debiera de ser una experiencia vivida por la ciudadanía, con la seguridad en el respeto a su voto, en que ejercerán la mayor de las libertades, la libertad personal, donde los resultados no serán manipulados y que éstos serán acatados plenamente, tal como ofreció Manuel López Obrador. Por tanto, nada peor que haberse quedado ese domingo en casa.

Tal disposición a participar se reflejará, a mediano plazo, estamos seguros, en un espíritu cívico más despierto y comprometido, en una mayor exigencia a partidos y autoridades, en un ciudadano con ideas propias y, por tanto, con una mayor disposición a la crítica; él sabrá que nuestra única opción histórica es respetar y ejercer la libertad política, el derecho y, sobre todas las cosas, la democracia.

Derecho a réplica y comentarios: salvadorordaz@partidoliberalmx.org




*
Anúnciate con nosotros

Recibe nuestro boletín mensual
*
* Tu email:
*
*
*
*
*

Noticias
*

Archivo
*
* Consulta los boletines de ediciones pasadas. *
*

Panel de Opiniones
*
* Opina sobre este tema o sobre cualquier otro que tú consideres importante. ¡Déjanos tus comentarios! *
*

Escribe
*
* Envía tus ensayos y artículos. *
*
___
Logos de Tiempos de Reflexión cortesía de Matthew Nelson y Chago Design. Edición, diseño y actualización por Morgan y MASS Media
Resolución mínima de 800x600 ©Copyright pend. Acuerdo de uso, políticas de protección de información