No cabe la menor duda. Vicente Fox Quesada simplemente no tiene la inteligencia ni visión necesaria para entender que la fórmula empleada en su campaña ya no le funciona. Lejos han quedado esos "felices" días en que un vaquero ¿terminó? con años de promesas incumplidas, dinosaurios, discursos demagógicos y viajes infructuosos al extranjero. A lo largo de estos 24 meses de su mandato, Fox ha perdido el tiempo: no se han logrado las reformas necesarias que lleven por un mejor camino a este país; continuamente pelea, no solamente con los principales partidos opositores, sino al igual lo hace con el partido que utilizó para llegar a la silla presidencial. Aunado a lo anterior, y para colmo de todos los males, es un hombre que no tiene palabra, si es que algún día la tuvo.

Vicente Fox se ha "montado en su silla" de ¿líder mundial?, y lo único que ha dado como resultado es un número de escenas dignas de un arlequín. Recordemos su "gran" viaje al estado del Vaticano, caminando con su esposa, Martita, tomados de la mano como dos niños de secundaria paseando por el parque. ¿Y qué me dicen del beso ante las cámaras? ¡Qué vergüenza! Ahora, en su reciente visita a Europa, le aplicaron un poco de su propia medicina: el canciller alemán, Gerhard Schroeder, en una actitud de "comes y te vas" le pidió que abandonara la rueda de prensa, la cual estaba convenida en el protocolo. A don Vicente, el hombre "fuerte", no le quedó más que salir como un niño regañado y esperar a las afueras del recinto.

Pero las cosas no quedaron ahí. Claro ejemplo de su mala administración al frente del ejecutivo, fueron las muestras de enojo que mostraron algunos alemanes y uno que otro mexicano radicado en aquél país al llamarlo "asesino". Puede que el Presidente de la República mexicana no sea un asesino en el estricto sentido de la palabra, pero sí lo es en el sentido de que nos mata a muchos de risa, luego de enfado y tristeza, con sus palabras (no puedo decir acciones porque no hay tales). Quiso defender el tema de las negociaciones con el Ejército Zapatista pero quedó peor. No sé cómo se atreve a decir que las cosas van mejor desde el inicio de su administración si él mismo prometió que resolvería el conflicto en quince minutos. Ya van 967,680 minutos y hasta donde yo sé no se ha resuelto nada; es más, el conflicto está en la congeladora.

Señor Presidente, por favor, por lo que más quiera, trabaje por su país, pero trabaje con las manos, no con la boca. Hay tantos asuntos pendientes en la agenda nacional que considero innecesario, en este momento, sus viajes al extranjero. Los resultados han sido desastrosos (no ha habido ningún tipo de beneficio en el corto plazo producto de dichos viajes). Sólo por nombrar algunos temas pendientes: el conflicto del campo ante la apertura del TLCAN (¿qué me dice de la megamarcha que tuvo lugar el 31 de enero?), el caso Chiapas, el caso Digna Ochoa, el aumento de la pobreza extrema, la educación, el desempleo, el conflicto social que se está desatando, etc. En fin, es una lista interminable, pero con las promesas de campaña de nuestro "heroe" ¿blanquiazul? pareciera ser pequeña y poco compleja.

Si el Presidente continúa con sus desaciertos en los diferentes campos de la política (economía y demás sectores) la crisis social que hoy en día se vive, se acrecentará hasta llegar a niveles jamás antes vistos en este país. Los brotes de inconformidad cada vez son mayores y más frecuentes. ¿Qué acaso no es una señal para el Presidente de que la manera en como lleva al país no es la correcta? Una de dos: o el Presidente no tiene la sensibilidad que se requiere en ese puesto de elección popular (y no se trata de comer tamales con niños de la calle) o sus asesores, al igual que su jefe, son simple y sencillamente incompetentes.

Como lo he mencionado antes en esta columna, el Jefe del Ejecutivo Federal debe, primero que todo, definir un proyecto de nación en el cual se establezcan las diferentes acciones a emprender para lograr la meta... ¡Ya entiendo!, posiblemente la prioridad del Sr. Fox es salir en la revista Hola como el presidente más romántico, carismático e ingenuo de todos los tiempos. Felicidades, lo está logrando.

Derecho a réplica y comentarios: luis_armando_esquivel@yahoo.com