Un año más que termina. Momento de hacer un balance de nuestros éxitos y tropiezos, así de lo que queremos para los siguientes 365 días y de qué es lo que necesitamos para alcanzar nuestros sueños. Al igual, es tiempo de hacer un breve recuento de lo que sucedió en el ámbito político a escala nacional. Sin lugar a dudas, estos doce meses se caracterizaron por confrontaciones abiertas no sólo entre el Congreso y Fox, sino entre este último y López Obrador; al igual fuimos testigos del fracaso en la promoción de consensos por parte de la Secretaría de Gobernación, sin dejar a un lado los cambios en el gabinete, los cuales no mejoraron en lo absoluto la manera de llevar la política en el país. En fin, no fue el año para la política y mucho menos para algunos actores de la misma. A continuación, los principales eventos que fueron noticia y un pequeño balance de quienes figuraron en el ambiente político, ya sea por sus acciones positivas o por declaraciones simplemente indignantes.

Comencemos cuando la PGR determinó el no-ejercicio de acción penal en el caso Amigos de Fox. El 8 de octubre, después de una larga y exhaustiva investigación muy al estilo de la agencia que procura la justicia en México, se informó que el dinero aportado por una agrupación civil a la campaña de Vicente Fox fue de procedencia lícita.

"Los recursos económicos investigados provenían de actividades lícitas realizadas entre particulares y empresas legalmente constituidas", según la PGR.

Como era de esperarse, el principal operador financiero de Fox, Lino Korrodi, quedó absuelto de cualquier acción penal en su contra.

Cómo olvidar la madrugada del 27 de diciembre del 2002, cuando un comando armado y encapuchado de TV Azteca usurpó las instalaciones de CNI Canal 40 en el cerro del Chiquihuite, hasta que esas mismas instalaciones fueron regresadas a sus legítimos propietarios exactamente un mes después. Una acción muy al estilo gangsteril de Ricardo Salinas Pliego.

El titular de la SCT, Pedro Cerisola tardó un buen tiempo para dar su versión de los hechos y la razón de por qué hubo poca, si no es que nula intervención por parte de las diferentes autoridades. En una entrevista para el diario Milenio, Cerisola mencionó que la Secretaría a su cargo actuó hasta el límite que le permitía la Ley. (¿No sería más bien hasta el límite que permitieron las fuerzas ocultas, léase Salinas Pliego?).

Si en verdad era tan claro para el Secretario de Estado que la concesión era de Canal 40, ¿entonces por qué no se actuó en el preciso instante de la invasión de las instalaciones? Lo único que me puedo imaginar es que le faltó capacidad o, mejor dicho, pantalones. Más risible resultó la multa que se le impuso a la televisora: 210 mil pesos. Bueno, ¿qué se puede esperar que sucediera con la televisión vocera del gobierno de Fox? Manera muy fácil de lavarse las manos, ¿o no Don Pedro?

Un caso que estuvo en la mira de muchos fue el Pemexgate. El líder de los petroleros, Carlos Romero Deschamps, acusado de peculado y peculado electoral en perjuicio de PEMEX por una cifra superior a los 1,500 millones de pesos, salvó de pisar la cárcel al obtener un par de amparos en contra de las dos órdenes de aprehensión que tenía en su contra. Lo anterior se debió a que los delitos no son considerados como graves aún cuando está acusado de preparar el desvío de los recursos para la campaña presidencial del Sr. La Vestida, perdón, Labastida. ¡Qué leyes las mexicanas! Mientras, este estafador se divertía en la boda de uno de sus hijos gozando de total impunidad. ¡Qué repugnante ente!

Uno de los escándalos, por llamarlo de alguna manera, que vivimos en nuestra equilibrada y justa relación con los EU fue cuando el embajador mexicano ante la ONU, Adolfo Aguilar Zinser presentó el 20 de noviembre la renuncia a su cargo, el cual quedó ocupado por Luis Alfonso de Alba, quien se venía desempeñando como Embajador Permanente Alterno.

Lo anterior como resultado de lo que el embajador dijera a estudiantes de la Universidad Iberoamericana en la Ciudad de México: que "desafortunadamente, la comprensión que la clase política e intelectual de Estados Unidos tiene de México es de un país cuya posición es la de patio trasero".

En su eterno papel de ¿defensor? de los derechos y de los intereses de los demás países, EU, a través de su secretario de Estado, Colin Powell, refutó totalmente las declaraciones de Aguilar Zinser. El canciller mexicano, Luis Ernesto Derbez nunca dejó ver si el embajador renunció o fue despedido por presión de los EU: no hacía falta que lo dijera, todos sabemos lo ofendido que estaba el vecino del norte y la solicitud que hizo.

El 6 de julio el PRI ganó claramente en las elecciones, en las que el PAN tuvo una drástica caída y el PRD creció de tal forma que su presencia en la Cámara de Diputados se vio duplicada con relación a la pasada legislatura. Sin lugar a dudas, una muy buena lección no sólo para los panistas sino para los demás partidos y para el gobierno federal: según el IFE el índice de abstencionismo fue de un 59%.

Esta nueva composición de la Cámara influenciaría de manera muy significativa, aunque no del todo, en el resultado de la Reforma Fiscal entre otras cosas.

La propuesta de reforma hacendaria promovida por Vicente Fox y Elba Esther Gordillo, no llegó muy lejos: 251 votos en contra y sólo 233 a favor. Aunado a lo anterior, en medio de una rebatinga digna de animales salvajes y no de diputados, se concretó la llegada de Emilio Chuayffet a la coordinación parlamentaria del PRI. Pero bueno, bien dicen que "no le pidas peras al olmo".

Hoy por hoy, la ¿profesora? se niega a dejar el espacio físico de la coordinación. Que esto no sea excusa para que la bancada del PRI se ponga a trabajar. Se pasan más tiempo preocupados por cuestiones triviales, mientras las reformas que necesita el país siguen ahí, detenidas, esperando a que alguien se digne a atenderlas.

La confrontación entre el CEN del PRI, Roberto Madrazo, con diversos Comités Directivos Estatales principalmente el del Estado de México por la postulación de candidatos a diputados y luego la pugna por la coordinación de la fracción en la Cámara entre Elba Esther Gordillo y Manlio Fabio Beltrones, le dieron la imagen de partido en quiebra.

No tardó en salir el secretario de Hacienda, Francisco Gil, y mencionar que el rechazo a la reforma fiscal afectaría los planes de crecimiento del país, pero no al presupuesto del 2004. Y qué decir del mensaje de Fox la noche en que los resultados ya se conocían, como diciendo: si de ahora en adelante las cosas no salen no va a ser mi culpa: qué falta de responsabilidad y de compromiso de Fox. Esa no es la manera de responder de un jefe de estado. Bueno, claro, habrá que preguntarse si Fox en verdad es un jefe de estado; una cosa es que sea en teoría y otra en la práctica.

Se espera que para la entrada del 2004 se pueda corregir la reforma rechazada para nivelar los intereses económicos por los que atraviesa el país.

Ni con la experiencia del senador Carlos Medina Placencia, el PAN pudo obtener la mayoría en la Cámara de Diputados. Este partido se ubicó como la segunda fuerza en el recinto legislativo con el 30% de los diputados federales (151).

Otro descalabro electoral este año: de las elecciones para gobernador sólo conservó Querétaro y ganó San Luis Potosí y perdió Sonora, Campeche, Colima y Nuevo León. Sin lugar a dudas, uno de los peores momentos en la historia reciente del partido político.

Por tercer año consecutivo el Presidente no pudo lograr tres de sus metas fundamentales establecidas al inicio de su mandato:

• Crecimiento económico suficiente.
• Concretar y acordar las reformas estructurales con las diferentes fuerzas políticas del país.
• Resolver el conflicto en Chiapas.

A pesar de lo anterior, Fox dice que vivimos en el país de las maravillas. Ya lo dice la encuesta del periódico REFORMA del día 31 de diciembre: el 54% de los que contestaron mencionan que el oso de año es la aseveración de Fox. Más que el oso yo diría que es la frase más indignante y que ofende a los mexicanos.

Ha sido un año, no cabe la menor duda, muy difícil. El año que viene será aún más. Por un lado tenemos el tema migratorio con EU. Será tiempo de elecciones en EU y el peso electoral de los tres millones de mexicanos tendrá gran influencia.

Se instalará la Convención Nacional Hacendaria, donde se buscará la redistribución de facultades, competencias y recursos fiscales entre los tres poderes del gobierno. Será, además, la última oportunidad en el sexenio para las reformas estructurales, ya que después se viene la "recta final", por cierto adelantada, hacia la presidencia, donde nadie querrá asumir el costo político de dichas reformas.

Otro de los grandes retos que continuaremos enfrentando será la competencia con China y el cierre de plantas exportadoras en nuestro territorio; será necesario hacer un balance de los 10 años del TLC y voltear a nuestro mercado interno con el fin de fortalecerlo.

En cuestión de elecciones internas, no debemos de dejarlas pasar desapercibidas. Habrá 10 elecciones a gobernadores, de los 14 procesos locales que tendremos. El proceso electoral del año venidero será un termómetro, no sólo para los partidos, sino para la población en general de lo que se puede esperar rumbo a las elecciones para el 2006.

Políticamente hablando, esperamos el futuro cercano muy agitado. Uno de los deseos que debemos tener para este 2004 es que los políticos trabajen en verdad en lo que deben de hacer y en sacar adelante las necesidades de nuestra nación. Como ciudadanos debemos trabajar más duro para salir adelante y ser agentes de cambio y no meros espectadores.

Mi estimado lector, agradezco nuevamente el que me hayan leído este año. Que el año que viene sea mejor que éste y que siempre tengan la fortaleza y la salud para salir adelante. Muchas felicidades.

Réplica y comentarios al autor: luis_armando_esquivel@yahoo.com