Uno de los primeros cambios de los que debemos estar conscientes con respecto a sus antecesores, es que no hubo ningún tipo de manejo de medidas cuantitativas. Bien podemos recordar en los sexenios a partir de López Portillo hasta el de Zedillo, en donde todos fijaron como metas un incremento en el PIB de entre 5% y 8%. ¿Y qué creen? Ninguno de ellos pudo lograrla. Es por ello que Fox, como una medida precautoria, decidió no hablar de cifras ni mucho menos de una Reforma Fiscal por su nombre. Los mexicanos estamos asustados con el manejo de cifras. Pero aunque estemos asustados, por ley se debieron de haber mencionado, tal y como hace referencia Ivonne Melgar.¹ De acuerdo al artículo 21 de la Ley de Planeación, el PND debería de señalar tales aspectos. Si realmente el Presidente cree en sus políticas debería de manejar dichas cifras y no tener miedo. ¿O qué acaso ya vio el resultado de sus engaños? La credibilidad sencillamente se está viendo cada vez más disminuida, por lo menos de aquella gente con la que he tenido contacto. ¿Recuerdan las metas que proponía acerca del crecimiento del PIB?

Ahora bien, como es de conocimiento nuestro, este Plan de Desarrollo está sustentado en doce principios: humanismo, equidad, cambio, sustentabilidad, competitividad, desarrollo regional, inclusión, transparencia, apego a la legalidad, gobernabilidad democrática, federalismo, y rendición de cuentas. Todos estos principios suenan muy bien y se ven muy bien escritos, pero ¿cómo se lograrán? Eh ahí la cuestión que debemos plantearnos en estos momentos. Las estrategias quedaron fuera simplemente. El gobierno no entiende que la teoría, tal y como la explicaron, es muy buena, pero debemos de saber el cómo. De acuerdo, se habla de la educación, pero ¿cómo se logrará que las tasas de analfabetismo disminuyan?

Otro ejemplo, en cuestiones de seguridad pública, se reconoce e identifican los errores: corrupción, dignificación de los cuerpos policiacos, reestructuración del sistema penitenciario. Sí, pero reitero, ¿cómo? ¿A través de leyes más duras? Y habrá quien me diga que a través de nuevas técnicas para la investigación de delitos con apoyo de la tecnología ¡Esa no es una respuesta! Necesitamos algo más tangible. Lo que se me ocurre es, por un lado, un endurecimiento del sistema judicial; leyes más severas (cárceles más efectivas), combinado con un programa de educación y conscientización tanto de la policía como de la ciudadanía misma.

Pero no seamos pesimistas y le veamos sólo algunos aspectos malos. Un punto que me pareció sumamente interesante es el de la inclusión, y véase que no es lo mismo que igualdad. La inclusión debe de ser el principio de toda sociedad. Recuerdo el ejemplo de un invidente que decía que en cierta ocasión cuando atendió a un Congreso, a todos les repartieron cierto tipo de información (igualdad), pero que la información no estaba en Braille, esto es, no había ningún tipo de inclusión. Lo único que espero es que a la hora de aplicar todos los puntos se tome en cuenta hasta el más mínimo detalle.

En verdad deseo que el PND sea un plan sustentable y viable que nos lleve a un crecimiento con calidad, un Plan que ponga a México al día. Espero que sea un proyecto en el cual participemos cada uno de los mexicanos y no nos quedemos al margen del mismo. Como lo he dicho en anteriores ocasiones, si queremos criticar debemos de conocer, por lo tanto los invito a que conozcan un poco lo que integra el PND y aporten. No se queden como estatuas, reitero que está en nosotros ser agentes de cambio; a final de cuentas este plan al 2025 tendrá un efecto directo sobre nosotros. Analicemos, desarrollemos, pero sobretodo actuemos.

Luis Esquivel

¹ Diario Reforma, miércoles 30 de mayo. Evitan precisar el método de éxito.