Marcos Manuel Sánchez

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El primer clon

 

novela de Marcos Manuel Sánchez

reseña de Laureano Turienzo Esteban

El autor ha escrito sobre un ser escéptico, uno de esos tipos que no entienden ni comparten las reglas que le rodean. Uno de esos benditos ortodoxos que logran que su vida sea fácilmente extraordinaria, mientras que el resto de los mortales seguimos atados a universos bostezantes de horarios, a los calendarios huecos, e instalados en la periferia de los deseos, sintiendo cómo cada día se enmohecen más y más nuestros sueños. Y en torno a este personaje desfilan otros (algunos tan interesantes como el inspector Sparza, excelente) unos afiliados al bien y otros anclados en el mal: mafiosos, policías, banqueros, seres desesperados y seres elevados al cielo por su suerte, a veces tan antagónicos, a veces condenados a encontrarse. Y de esos encuentros germinará la tensión, la lucha, el asesinato, la traición.

“El Primer Clon” es una de esas novelas para las cuales no tienen sentido los relojes mientras la lees. Una de esas novelas en las que sus personajes terminan por habitarte. Una de esas novelas que cuando la acabas te das cuenta de que su lectura, por instantes, te abstrajo del mundo. Eso es lo que hace creíble esta historia sobre el increíble mundo de la clonación.

“El Primer Clon” es como una ciudad donde sus calles se infectan de historias: doblas una esquina y encuentras un asesinato. Huyes, siempre con la mirada de reojo, doblas otra esquina y te hallas en medio de una novela negra en el mejor estilo de las novelas negras de los cincuenta. Me refiero, sin pudor, a Hammet, Chandler, todos esos maestros del género. Luego, todo cambia de pronto y los argumentos se humedecen de algo parecido a la ciencia-ficción. Más tarde viene el misterio ¿O era antes? Después, un puro realismo.

La gran virtud, a mi modo de ver, de esta novela, es la facilidad del autor para mezclar mundos, para alternar géneros, para hacer de los planteamientos aparentemente lineales, algo así como ondas concéntricas.

Les voy a adelantar algo del argumento de “El Primer Clon”: una persona decide crear un clon de sí misma, para que la suplante en ciertas parcelas de su vida.  No sé qué pensarán ustedes, pero aunque un planteamiento sencillo, yo les aseguro que las grandes novelas (sobre todo de un tiempo a esta parte), han nacido de ideas como éstas: seres que deciden dar un giro copernicano a sus vidas, o que el azar hace el trabajo por ellos.

Puedo confirmar que estamos ante una novela con la que uno puede fugarse del tiempo mientras la lee, convirtiéndose en una suerte de personaje paralelo, como si acompañase al autor en los caminos que va trazando. Y es probable que el autor consiga la confabulación de muchos de ustedes gracias a una acumulación progresiva de la tensión que mantiene vivo el suspense en multitud de capítulos gracias a la ambientación bien trabajada de los escenarios, gracias a la riqueza de matices de los personajes, incluso los que tienen que ser, por su papel en la trama, estereotipos, pero ante todo, en mi opinión, gracias a los detalles de gran observador que muestra el autor cuando disecciona intrahistorias dentro de la historia. Hablo de la vida en una gran empresa (un abrasador coctel de celos, traiciones e inseguridades); hablo de las sinergias familiares; hablo de la fuerza de las escenas dramáticas; hablo de la fotografía del mundo de las mafias; hablo en definitiva de buena literatura, donde en los argumentos hay un poso de credibilidad inmediata, una sensación de verosimilitud que hacen dudar si todo se trata sólo de ficciones o son el reflejo exacto de algo que sucederá en un futuro próximo de la humanidad.

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"El autor ha escrito sobre un ser escéptico, uno de esos tipos que no entienden ni comparten las reglas que le rodean. Uno de esos benditos ortodoxos que logran que su vida sea fácilmente extraordinaria, mientras que el resto de los mortales seguimos atados a universos bostezantes de horarios, a los calendarios huecos, e instalados en la periferia de los deseos, sintiendo cómo cada día se enmohecen más y más nuestros sueños." (Laureano Turienzo Esteban, Revista Espéculo.  Autor entre otros de La comedia inútil, ópera prima.

 

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www.casasdellibro.com

Más del autor en www.primeravistalibros.com

Publicación: Madrid

Edición personal, 2003