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El silencio jugaba con las voces que el viento traía desde muy lejos. El sol no lograba calentar la atmósfera. Las hojas de los árboles caían sin cesar. El silencio seguía empecinado en desvanecer los sonidos. La monotonía penetraba hasta los huesos. El dolor ya no era inmediato. Me senté en el suelo. La calle estaba llena de personas, algunas eran conocidas, a otras jamás las había visto. Unos niños apresuraron el paso. El cerco humano era cada vez más estrecho. Obscurecía cuando reconocí mi propio rostro entre la gente. Aquella visión fue interrumpida por una persona que me tomó con cuidado entre sus brazos. -Murió-, dijo. El silencio jugaba con su voz. Inicio | Relatos | Poetas | Ensayo | Taller | Autor | Links Este registro se añadió el 28 de octubre 2009
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| Nació en México, Dsitrito Federal. Creció en Ciudad Victoria, Tamaulipas. Participó en el taller literario de José Luis Velarde Publicó en el cuaderno colectivo Se murió Minineitor . Estudió diseño gráfico y ha trabajado en diversos medios de comunicación. Sume 108521 visitantes
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