25 de octubre al 30 de octubre
Gonzalo insulta su mujer (lo más simpático que le dice es "rota, picante, arribista"). Ella le acepta su desahogo pero le pide que entienda que todo lo hizo por amor. Gonzalo no le cree. Fernando le ordena que se disculpe y hace que lleven las maletas de su nuera a la pieza de Gonzalo. Este se niega dormir con Scarlet y termina trasladándose al dormitorio de Diego. Scarlet le dice a su marido que no se cansará hasta que él reconozca que la quiere.
Juan Pablo vuelve en sí. Los médicos creen que se ha recuperado. Silvana le pregunta si quiere avisarle a Emilia. El se niega. El médico que lo atiende le insiste a Silvana de que convenza a Juan Pablo de que se someta a un tratamiento ya que sin el le quedan de a cuatro o cinco meses de vida.
Rodolfa tortura a Eduarda diciéndole que Diego solo se casa con ella por sus tierras.
Fernando visita a Elena y le dice que a pesar de sus malas intenciones, Scarlet y Gonzalo se quieren y serán felices. Para convencer a Elena y al pueblo, Fernando obliga a Gonzalo a acompañar a Scarlet a la procesión de Santa Gemmita. Todo esta listo para la procesión cuando Rodolfa nota que Santa Gemmita se ve pobre y deslucida. Cuando las encargadas de cargar a la Santa, Chela y Mireya van en busca de la imagen a la iglesia descubren que esta ha desaparecido. Buscan a la Santa por todo el pueblo. Al final resulta que fue Rodolfa la que se llevó la estatua para hacerle un velo para que se viese más linda.
Lorena le dice a Silvana que Juan Pablo regresará con ella "ya que las cartas no mienten". Ignacio se interesa en conocer esas cartas que fueron de Abigail, y Lorena se las muestra diciéndole que las cartas son mágicas ya que le permiten ver claramente el furor que se avecinda. Lorena le lee las cartas al médico, pero no se atreve a decirle la verdad. Más tarde les cuenta a Tina, Lourdes y Mireya que Ignacio sufrirá mucho a causa de una mujer morena.
Silvana llama a Ignacio para darle las ultimas noticias del enfermo. Emilia entra en el consultorio y se enfurece al saber que Ignacio sabe donde está su novio. Ignacio intenta defenderse con un pretexto pueril de que accidentalmente Silvana se encontró con Juan Pablo en la calle. Silvana se ofrece a hablar con Emilia, pero el egoísta Juan Pablo sigue empecinado en ocultar la verdad a su novia. Finalmente Silvana le deja el celular por si quiere comunicare con Emilia. Juan Pablo llama su novia y le da unas excusas débiles que no satisfacen a Emilia, pero aun así ella se alegra de que el se haya comunicado con ella. A pesar de las protestas del médico y los ruegos de Silvana, Juan Pablo abandona el hospital dispuesto a reunirse con Emilia en Aquelarre.
Diego y Eduarda fijan fecha para la boda y anuncian que se casarán en un mes más y que construirán una casa en los linderos de ambas propiedades.
Cuando Fernando visita Bernarda, esta le cuenta de los planes de Diego y le dice que quizás ese sea un modo de que él adquiera las tierras que tanto desea. Emilia escucha estas palabras y habla con Eduarda para recordarle la promesa que hicieran a su padre. Eduarda histérica agrede a su hermana.
A los gritos acuden las demás Patiño y la Poncia. Cuando Eduarda reconoce que la idea de construir la casa partió de ella, Ricarda y la misma Bernarda le dicen que hizo mal. La neurótica Eduarda se pone a gritar que todos la envidian ya que ella será la única mujer de su familia que se casará.
La fiesta del bicentenario es un suceso en Aquelarre. Bernarda y Elena se molestan cuando Julia le pide a Scarlet que haga entrega de un ramo de flores a Cristián, director del cuadro de gimnasia, ya que ellas merecían ese honor. Durante todo el festejo Fernando se mantiene al lado de su nuera dándole el lugar que merece y protejiendola de los desaires de Gonzalo. El pueblo pide "beso", cuando Gonzalo se destaca en el rodeo. Obligado por su padre besa su mujer, pero Scarlet aprovecha para darle un gran beso en la boca lo que enfurece a su marido.
Después de prometer que no usara más gomina, Cristián (todo crespo) consigue que Ricarda siga sus instrucciones para el concurso de belleza. Marcelo esta preocupado por el minúsculo bikini con que desfilará Carolina, y la vanidosa Alelí está segura de que ella va ser Reina de Aquelarre. Desgraciadamente para ella, ya empieza mal en la parte de inteligencia. Le hacen una pregunta super fácil, "¿En qué año fue fundado aquelarre?" (Ese día celebran el Bicentenario del pueblo) y ella es incapaz de contestarla. Carolina la responde por ella y además se luce contando el origen del nombre del pueblo. El nombre so origina a causa de Rosalinda Gutiérrez que fue abandonada por su marido durante la Guerra de la Independencia. Rosalinda se encerró en su casa, con tres esclavas, a esperar la llegada de su marido. Pronto los pueblerinos comenzaron a acusarlas de bruja y de ahí proviene el nombre de "Aquelarre". Rosalinda y todas sus descendientes hasta Abigail Gutiérrez tuvieron desde entonces fama de brujas. Carolina tiene ganado el concurso, sobre todo cuando desfila en un bikini que realza sus voluptuosas curvas. Desesperada Alelí, decide librarse de su rival soltándole la parte de arriba del traje de baño y dejándola "topless" enfrente del publico. El jurado compuesto por el Padre Pelayo, Ignacio y Fernando reaccionan filosóficamente y no descalifican a Carolina. El médico comenta que "tiene unas pechugas muy bonitas" y Fernando ahora entiende porque Carolina trae a su hijo de cabeza. Carolina es coronada como reina de Aquelarre y Ricarda es la Virreina. Alelí es descalificada con la aprobación de Elena que dice que se lo merece por tramposa.
Al día siguiente Aquelarre es un hervidero de chismes respecto al espectáculo de la noche anterior. En la mesa del desayuno todos se burlan de Marcelo. Scarlet intenta defender a Carolina y su marido le sale con insolencias como que quizás ella " le enseñó a empelotarse a Carolina". Fernando pierde la paciencia y le dice a su hijo que si sigue así lo va mandar a tomar desayuno al establo.
Avergonzada Carolina va a misa envuelta en un gran manto. En su sermón el Padre Pelayo admite que el incidente pudo haberse evitado si Carolina hubiese usado un traje de baño más decente, pero aun así no es razón para que chismeen o se burlen a costa de ella.
Ricarda está molesta porque su condición de Virreina la obliga usar vestidos. Cristián confiesa que se ha enamorado de ella y le pide que sean novios de verdad. Esto enfurece a Ricarda que siente que su amistad ha sido defraudada. Le dice a Cristián que no serán pololos ni de verdad ni de mentira.
Prudencio intenta decirle la verdad a Poncia, pero esta le sale con que la Jorgita le dice "papá". El huaso enternecido no se atreve a herir ni a Poncia ni a la niña. Gustava al saberlo esta de acuerdo en que no pueden hacer daño a terceros para ser felices. Julia molesta le dice a su colega que el único modo de separar a Prudencio de Poncia es acostándose con él. Más tarde Vuelven a intentar hablar con Poncia, pero la astuta huasa da vuelta las cosas pidiéndole a Gustava que sea su madrina de matrimonio.
Carolina insiste en ir a ver a su futuro suegro para pedirle disculpas por su "topless" involuntario. Tina visita a Scarlet y es sorprendida por Gonzalo que la echa de mala manera. Gonzalo y Diego van a quejarse con su padre de que Scarlet recibe "ordinarias" en la casa. Fernando intenta convencerlos de que Scarlet "tiene clase" no como la "ordinaria", la "mejicana pobre" de Carolina que da espectáculos de "strip tease" en los bares. Carolina llega y escucha estas ultimas palabras y se desmaya. Cuando despierta descubre que ha quedado ciega como las heroínas de las telenovelas que tanto admira. Marcelo y Scarlet están preocupados, mientras que los demás Guerra se mueren de la risa. Ignacio dice que no hay problema orgánico sino que se trata de una ceguera nerviosa que puede pasar en un rato. La ceguera continua y Marcelo insiste con su padre que se retracte de lo dicho ante su novia y le pida disculpas. Por supuesto Fernando se niega. Marcelo no entiende porque su padre apoya a Scarlet y no quiere a Carolina.
Finalmente Marcelo se va de la casa a vivir con el Toro Mardones. El lechero esta preocupado por lo que dirá La Pelaita, pero su buen corazón le impide negarle el asilo al menor de los Guerra.
Eduarda roba la escritura de las tierras y se las lleva su novio diciéndole que exigirá la parte de la propiedad que le corresponde.
Juan Pablo regresa su casa donde recibe una cariñosa bienvenida de sus hermanas y una lluvia de reproches de su madre a la que responde de forma desagradable. Elena le dice que si se dejara de misterios y mentiras todos serian felices. Juan Pablo contraataca diciéndole que es ella la que ha hecho de su vida un sinnúmero de mentiras y misterios. Juan Pablo busca su novia y cruelmente rompe con ella diciéndole que su romance ya no tiene futuro ya que no la ama. Emilia no le cree. Más tarde Juan Pablo le dice a Ignacio que no cree que Emilia "resistirá" la verdad.