Comunidad Canaria del Depto.
de Maldonado -Uruguay-
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RENACIMIENTO Y BARROCO
(Siglos XVI y XVII)
AMÉRICA
Cabalgando la conquista española del Nuevo Mundo y con
las armas literarias del Renacimiento, serán canarios los poetas
fundacionales de las letras hispanoamericanas:
José de Anchieta:
(1532-1597) Misionero jesuita en Brasil. Creador del Seminario de la
Compañía de Jesús, alrededor del cual surge la ciudad de San Pablo. Fue
autor de varios libros de gramática y de historia. Es autor de
poemas en lengua tupí-guaraní, que inauguraron una corriente de rescate
de tradiciones aborígenes que no cesa hasta nuestros días. También compuso obras en español, portugués y latín.
Silvestre de Balboa:
(1563 - 1649) Autor del primer poema épico cubano; "Espejo de
Paciencia".
ISLAS CANARIAS
Bartolomé Cairasco de Figueroa. (1538-1610)
Es, sin lugar a dudas, la figura
más importante, la piedra fundamental de la literatura isleña. Un
personaje cuya historia está poblada de ribetes novelescos, y un
excepcional poeta admirado por sus contemporáneos, escritores de la talla
de Cervantes, Lope de Vega, y Góngora. Introdujo la rima
esdrújula en la poesía española, fundó el teatro canario basándose
en autos de fe, y también episodios de la conquista, como ocurre en
"Comedia de la Bienvenida del Obispo Rueda"donde desarrolla diálogos en lengua
tamasik.
Canónigo (un tanto a la fuerza)
Prior de la Catedral de Canarias, fundó en sus jardines la tertulia
literaria que ostentaba el pagano nombre de "Apolo Délfico", a
la que concurría el otro autor fundacional de Canarias: Antonio de Viana
( del que nos ocuparemos más adelante) como asi también importantísimos
historiadores y cronistas, sin cuya obra buena parte de lo que llegado
hasta nosotros de la antigüedad pre-hispánica se hubiera perdido.
Su obra más importante es
"Templo Militante", (Poemas religiosos) pero también fueron muy
celebradas sus poesías eróticas, y, por supuesto, la (totalmente
desconocida por estas regiones, y hasta donde sabemos, inédita en toda su
dimensión) "Esdrujúlea"
Buena parte de la obra fue
destruída por el propio autor, quien a lo largo de su vida tuvo que
soportar más de un encontronazo con la Inquisición, como no podía ser
de otra manera.
Poemas eróticos
Estoy preso , y con razón,
que si libre me hallara
otra vez me cautivara
por gozar de tal prisión.
Yo propio me cautivé
y en prisiones me he metido,
holgara que hubiera sido
mil años antes que fue.
Es tan dulce mi pasión
que si libre me hallara
otra vez me cautivara
por gozar de tal prisión.
Quando yo acerté a mirar
aquesos ojos tan bellos
quedé preso en sólo vellos
sin poderme rescatar.
Ninguno en tal ocasión,
señora, si allí se hallara
que cautivo no quedara
por gozar de tal prisión.
Teneis, señora, un poder
que a quantos miráis, matáis
y al que queréis cautiváis;
todo lo podéis hacer.
Prendistes mi corazón
y aunque libre me hallara
otra vez me cautivara
por gozar de tal prisión.
Amor no es sino hombre
y no es hombre sino Amor;
no es amor, sino dolor,
aunque de Amor tiene nombre.
Es un forastero que ha
venido no sé de dónde
y mata no sé con qué
y hiere no sé por dónde.
Ábreme, casada, por tu fe,
Abreme, casada, por tu fe,
que llueve menudico, y mojomé.
Si duermes, señora mía,
despiertas aquel dolor
que causan tu desamor,
tu crueldad y mi porfía;
pues no te veo de día,
agora respondemé
que llueve menudico, y mojomé.
No pienses, desconocida,
que por estar en tu lecho
sanas el daño que has hecho
en mi alma y en mi vida:
la una tengo perdida,
la otra acabasemé
que llueve menudico, y mojomé.
Otros
poemas de Bartolomé Cairasco
Antonio de Viana:(1578-1650)
Conocedor de la obra y
contertulio de Cairasco, de quien toma los temas que después llevaría a
la poesía épica, es de Viana el autor en el que abrevarán todos
aquellos escritores, historiadores y cronistas, para descubrir las raíces
del ser insular. Su obra capital es "Antigüedades de las Islas
Afortunadas", (1604) donde se narra la conquista española de la isla
de Tenerife. A lo largo de los dieciséis cantos en los que está dividida
la obra, de Viana rescata tradiciones, costumbres, leyendas. No existen en
la obra protagonistas y antagonistas. Tanto los españoles como lo
aborígenes defensores, están tratados de modo exaltativo, con total
imparcialidad.
Los valores literarios de las
"antigüedades" no son constantes, lo que hace que la obra sufra
algunas depresiones, pero en la mayoría de los cantos hay una verdadera
originalidad, además de frescura y gracia.
Los temas míticos inaugurados
por Cairasco, son retomados: la "selva de Doramas", "Dácil
y Castillo", y se integran en perfecto e inmarcesible engarce a un
poema épico fundacional, que integra a las Islas Canarias al prestigioso
núcleo de las regiones del planeta que pueden ostentar una obra de esas
características: (España - Cantar del Mío Cid; Alemania - Los
Nibelungos; Francia - La chançon de Roland; India - El Ramayana; Chile -
La Araucana)
Ya en pleno siglo XIX, la obra de
Antonio de Viana será el punto de partida para el nutrido grupo de
escritores románticos que virará hacia el regionalismo, al que muchos
críticos no vacilan en denominar "neo-vianismo"
Pasajes de "Antigüedades de
las Islas Afortunadas"
Tenerife
"Nivaria se llama por la
nieve
que suele platear la cumbre altísima
del sacro monte Teide, excelso Atlante,
y por la misma causa en nombre digno
de Tenerife entonces le pusieron;
que Tener, en su lengua significa
blanca nieve y quiere decir ife
monte alto; así, por el gran Teide,
se llama Tenerife la Nivaria,
que es lo mismo que monte de la nieve" .
Matanza de Acentejo
"Entranse todos de tropel sin orden
por el mayor furor de la batalla,
recrece en los soberbios naturales
el ánimo, la fuerza, enojo y cólera,
con el socorro de la nueva gente:
aumentase el combate, daño y pérdida
en los fuertes leones valerosos,
muéstranse embravecidos y feroces,
sacando brío y fuerzas de flaqueza.
Reconocen sus daños y ruinas,
mas no por ello un punto se acobardan.
Brama el furor de la sangrienta guerra,
y gimen angustiados los anhélitos,
hierve el humor ardiente y se destila
entre el sudor por los abiertos poros."
Fiestas del calendario
guanche
Pero
guardaban por costumbre antigua
Por días festivales de cada año
Del mes de Abril, los nueve postrimeros,
Porque les diese Dios cosecha próspera,
De frutos, y ganados, y aunque hubiese
Guerras entre ellos, había entonces treguas,
Con paz tranquila, en tanto que duraban
las fiestas, regocijos, y placeres.
El
monte canario
Producen
sus espesos y altos montes
(...)lentiscos,
barbusanos, palos blancos
viñátigos
y tiles, hayas, brezos
acebuches,
tataibas y cardones.
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