FRUTOTERAPIA. Los frutos que dan vida, por Albert Ronal Morales
UVA (vitis vinifera):
Originaria de la región caucásica.
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Contiene: hierro, agua (81%), potasio, calcio, silicio, fósforo, sodio, magnesio, cloro, proteínas, hidratos de carbono, 15%; calorías 76%; vitaminas A, B1, B2, B6, B3 Y C; azufre, zinc, yodo; ácidos: tartárico, cítrico, tanino, málico; azúcares: glucosa, dulcita y manita; pigmentos, tanino, enzimas, bitartrato de potasa y lecitina. Tiene un elevado valor calórico (más de 900 calorías por kilo). Se usa para combatir anemias persistentes o crónicas, para desinflamar el bazo, mejorar catarros, dilatar bronquios, diuretizar la sangre, controlar ataques súbitos de tensión alta. Es aconsejable suministrarla a personas en post-operatorio por su acción antiséptica y cicatrizante. En ayunas la pulpa obra como laxante suave, limpia y purifica el organismo. La uva seca (pasas) comida a cualquier hora alivia resfriados, catarros y tos y sirve como tónico cerebral y reconstituyente. |
Se usa para curar
enfermedades de los riñones e intestinos, mejora la palidez, neurastenia
y debilidad en general. Previene la calcificación de las arterias y el
reumatismo.
Para facilitar la producción de glóbulos rojos se desayuna cada tercer día durante un mes con jugo de uvas negras, se descansa diez días y se repite por una sola vez. Se recomienda en: intoxicaciones, estreñimiento, congestión del hígado y el bazo, hipertensión, obesidad, artritismo, reumatismo, gota, fiebre, embarazo, anemia y surmenage. Tradicionalmente se ha usado para limpiar la sangre. El zumo de uvas es un excelente remedio contra la obesidad. Gracias a su principal activo-la clorofila-transforma la energía solar en azúcar lo cual es usado en el organismo para fortalecer músculos y cerebro. Visitantes: |
Fuente págs. 121-123
