DESEOS. Si yo fuera maniquí, no importe si un poco idiota, aprendería alguna nota para tocar por ahí. Se escucharían, así, todas mis composiciones, mis bellísimas canciones y hasta alguna sinfonía. Shostakovich no cabría de envidia en sus pantalones.
Si yo fuera futbolista, ¡qué versos escribiría! ¡Cómo se me editaría! ¡Qué genio! ¡Qué gran artista! Si yo fuera periodista, ¡Qué grande de la pintura! Llamaríala arte pura la crítica, lo primero. ¡Ay! ¡Si yo fuera un torero! Cervantes, con mis novelas se quedaría a dos velas, Valle-Inclán se haría pocero.
Si yo fuera una princesa, sería superdotada dramaturga consagrada, y hasta tendría mi empresa. A mi lado, Villaespesa sería un farandulista, y el pobre Lope, un cuentista de obra oscura y sin matiz. Si yo fuera cantatriz... ¡Sólo quiero ser artista! |
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