Site hosted by Angelfire.com: Build your free website today!

Sin renunciamientos

Mi cuerpo

alberga sentimientos

 y esa parcela que es mi alma,

ésta regada

por un baño de luna,

que dibuja,...

plateadas praderas de ensueño

en mis noches estrelladas.

 

Con aromas de jardín,

 del ser enamorado

 que habita en mí,

 me seduces,...

y con esplendor crepuscular,

despiertas bajo mi piel,

el calor de un deseo marchito,

que florece,...

como un desafío.

 

Entre desconfiada

 y valiente,

con genuina indolencia porteña,

visceralmente me enardeces,

 destilando pecados consentidos,

exhibiendo con orgullo,

 las caricias que nos dimos.

 

Percivo tú amor,...

ese que me das generosamente,

soy el refugio de tu alma,

que agitada

por el soplo de tu espíritu,

siente brotar el corage,

que te permite,

atreverte a amarme.

 

No hay tiempos ni lugares,

sólo el deseo,

que como chispa enciende,

el amor que nace,

prodigiosamente

las pieles arden,

los corazones laten

y sin renunciar al gozo

y al placer,

que nuestro amor

 nos ofrece honestamente.

                                                    Dulcedaniela 2002