Site hosted by Angelfire.com: Build your free website today!
X-Camp X-Mountain X-Bike Espeleología Supervivencia Ocasional Galería de Fotos
X-Menu
"Salvamento de un Niño de 2 Años en San Luis Potosí"
por Antonio Aguirre Alvarez
Crónica del rescate

Espeleo Socorro de Cruz Roja Mexicana - San Luis Potosí

Participantes en el Rescate:

Hilda Luna Zapata (Hilda)
Paramédico y miembro del grupo de Espeleo Socorro de CRM

Mayra Banda Huerta (Mayra)
Paramédico y miembro del grupo de Espeleo Socorro de CRM

Juan Manuel Castañeda Covarrubias (Castañeda)
Jefe del Sistema Operativo de Servicios de Urgencia de CRM en SLP
Paramédico y miembro del grupo de EspeleoSocorro de CRM

Juan Edmundo Cerda Rodríguez (Mundo)
Radio-Operador de CRM en turno vespertino

José Reyes Colunga (Chupón)
Paramédico y Radio-Operador de CRM en turno nocturno

Ing. David Solis (David)
H. Cuerpo de Bomberos y Empresario Potosino

Adolfo Benavente (Adolfo)
Cmdte. del H. Cuerpo de Bomberos de SLP

Francisco Benavente (Pancho)
Cmdte. del H. Cuerpo de Bomberos de SLP

Margarita Benavente (Mague)
H. Cuerpo de Bomberos y Paramédico de CRM en SLP

Florentino Carrizales (Tino)
Paramédico Inactivo de CRM y Jefe de un cuerpo local de Servicios de Urgencias

Socorro Sierra Rivera (Coquito)
Paramédico y miembro del grupo de EspeleoSocorro y Acuática de CRM

Sergio Turrubiartes Hernández (Checo)
Niño de 2 años de edad, accidentado.

Elementos de:
Protección Civil Estatal (PC)
H. Cuerpo de Bomberos de SLP
Protección Social y Vialidad (PSyV)
Familiares del niño y población civil


19-20 de noviembre del 2001

El grupo de EspeleoSocorro de Cruz Roja Mexicana en San Luis Potosí, S.L.P. apoyó a un grupo de Espeleólogos Texanos en un proyecto de espeleobuceo que se llevó a cabo en el Sifón Terminal de las Grutas de La Puente, ubicadas en la Sierra de Álvarez, área de la comunidad El Puente, Municipio de Villa de Zaragoza, S.L.P. Esta actividad comenzó el día lunes 19 a las 09:00 horas y terminó el día martes 20 a las 22:00 horas. Dentro de las incidencias cabe mencionar el apoyo que se prestó a 2 espeleólogos estadounidenses quienes a pesar de estar usando un WetSuit se encontraban hipotérmicos y exhaustos en el área del sifón y no pudieron realizar el ascenso del tiro de 30 m, el cual se realiza completamente bajo el caudal de la cascada. El ascenso de estos espeleólogos se realizó mediante un sistema de recuperación utilizando un Sistema de Ventaja Mecánica de 4:1 En esta actividad participaron 21 elementos dentro de los cuales se encontraban: Mayra Banda Huerta, Juan Manuel Castañeda Covarrubias y un servidor. El reporte de esta actividad aparecerá en la revista de la AMCS y en un canal de Cable próximamente.

21 de Noviembre del 2001

Al día siguiente, justo a las 17:55 horas, Mundo recibe una llamada de urgencia notificando que en la comunidad de "Derramaderos" Municipio de Villa de Arista, un niño se había caído en un pozo y que se requería del apoyo de Cruz Roja. Castañeda, que se encontraba en la cabina de radio es notificado del servicio y se comunica conmigo a la extensión del Comité de Capacitación, lugar en el que me encontraba preparando el informe correspondiente a la actividad previa. Me solicita el apoyo de la Sección de EspeleoSocorro y me informa que un niño cayó aproximadamente 40 m a un pozo de agua y desconocía si se encontraba vivo. En ese momento informo a Hilda y Mayra quienes se encontraban de guardia y recojo el equipo para el servicio consistente en:

- 1 cuerda de 200 m (11 mm)
- 1 cuerda de 110 m (11 mm)
- 1 cuerda de 30 m (11 mm)
- 2 cordeletas de 7 m
- 2 platos de anclaje
- 2 equipos de ascenso completos
- 1 canastilla de rescate
- 10 mosquetones de aluminio
- 4 mosquetones de acero
- 5 poleas
- 1 Rescucender
- 5 Cordinos de 7 mm para Prusik

Hilda y Mayra me ayudan a trasladar y subir el equipo a la unidad 152. A las 18:05 salimos rumbo a la citada comunidad Hilda, Mayra, Castañeda y un servidor y en el trayecto solicitamos a Mundo más datos relativos al accidente. Además se le solicita concentrar al personal de la Sección de EspeleoSocorro por si llegase a requerir más apoyo.

Al llegar a la entrada de Villa de Arista nos esperaban dos policías a bordo de una patrulla de PSyV quienes nos guiaron hasta la comunidad de "Derramaderos" que se encuentra aproximadamente a 15 min de Villa de Arista. Llegamos al lugar del accidente a las 19:35 horas.

De acuerdo a los protocolos del Sistema de Emergencia, nuestra obligación es ponernos a las órdenes de alguna autoridad presente que tuviese el mando del operativo, pero desde mi perspectiva no existía ese mando o al menos eso me pareció en un principio. Nos acercamos al lugar donde se encontraba el pozo para realizar una evaluación inicial del accidente y esto fue lo que encontramos:

- En el sitio se encontraba personal de PC, PSyV, y el H. Cuerpo de Bomberos de SLP y David con el grupo de rescate de su empresa "Parafinas".
- El pozo consistía en un tubo metálico que presentaba un diámetro de 37 cm con soldadura de unión cada 2 m con una base sólida de concreto en la "boca" y una profundidad total de 130 m. El niño se encontraba atorado a 43 m de profundidad. (Este pozo estaba clausurado desde hacia varios años y se encontraba cubierto con una roca. Días antes alguien había pisado sobre la roca y ésta había caído dentro del pozo, por lo que ahora se encontraba abierto). Aún desconocíamos las razones por las cuales el niño no había caído la profundidad total del pozo aunque suponíamos que algo lo había impedido.
- A 3 m de distancia se encontraba otro pozo de forma rectangular de aproximadamente 1.5 x 1.5 m. Los dueños del lugar informaron que este pozo -también clausurado y el cual estaba cubierto con una sólida losa de concreto- tenía la misma profundidad que el anterior.

Posterior a esta evaluación del área, se procedió a inspeccionar el pozo con la ayuda de 2 lámparas del tipo Spot Light y unos binoculares que facilitaron los elementos de PSyV. A simple vista se alcanzaba a ver el niño, aunque no totalmente la posición que tenía. En base a esto se determinaron tres opciones a seguir y en orden de prioridades estas fueron:

1.- Pancho propuso bajar una cuerda en la que se le colocaría un implemento en el extremo que permitiría 'amarrar' los pies del niño e izarlo posteriormente. Esta opción presentaba varias controversias: el intentar sujetar al niño con la ayuda de la cuerda era difícil debido a los movimientos que éste realizaba. Si llegásemos a sujetarlo de una sola pierna, la maniobra de recuperación resultaría muy peligrosa, de tal manera que deberíamos garantizar que estuviese sujeto de ambas extremidades y esto era difícil debido a la escasa visibilidad que se tenia del niño.
2.- El pozo contiguo tenia un diámetro tal que permitiría el descenso de 1 o hasta 2 personas para crear un acceso a través de la pared para llegar al otro pozo, elaborar un túnel de acceso y liberar al niño. Esta opción era viable pero se presentaban varias desventajas: Al ser un pozo con 70 años de antigüedad existía el riesgo de un derrumbe; al llegar al tubo se requería de equipo de corte y esto aparte de quemar al niño podría generarle intoxicación debido a los gases que se generarían. Otra opción era cortar con equipo electromecánico pero requeriría de mucho mas tiempo.
3.- Introducir a alguien directamente al pozo para amarrar al niño y poder izarlo posteriormente. Como en cualquier situación de emergencia, el arriesgar a alguien más es la ultima opción que se considera (si es que alguna vez se llega a considerar), así es que se optó por intentar la opción # 1 antes de recurrir a las siguientes.

Pancho armó y bajó el accesorio que con suerte permitiría sujetar al niño. Tino auxiliaba con los binoculares tratando de dirigir la cuerda y un servidor iluminando con los Spots bajamos el accesorio e intentamos durante mas de 30 min. En cierto momento pensamos que el niño estaba sujeto y levantamos la cuerda... el nudo estaba suelto.

En este momento claramente alcanzábamos a oír como el niño tosía, lloraba y le hablaba a su mamá solicitándole agua.

Intentamos nuevamente la maniobra, pero ahora solicitamos que la cuerda estuviera sin tocar el suelo ya que el polvo que la cuerda arrastraba hacía toser al niño y podría generarle problemas respiratorios. Un lugareño sugirió además que las personas que estaban alimentando la cuerda la limpiaran con un trapo húmedo con la misma finalidad. Nuevamente falló la maniobra. De esta manera estuvimos cerca de 2.5 horas intercambiando posiciones en la "boca" del pozo. En este tiempo Mayra e Hilda estuvieron abasteciendo el equipo que se requería.

Solicitamos una cámara de video para conocer la posición precisa del niño y poder sujetarle los dos pies de manera simultánea. Una persona que se dedicaba a realizar videos caseros fue a su domicilio en Villa de Arista y nos facilitó la cámara. La descendimos por el pozo con el auxilio de una cuerda de 9 mm de manera lenta. Al llegar a la altura del niño le dimos algunas vueltas y procedimos a sacarla. Después de dos intentos el video nos mostró al niño en posición fetal con los pies hacia arriba. El acercamiento no permitía identificar posibles lesiones, pero sí mostraba movimientos continuos de las extremidades inferiores, lo que al menos nos reflejaba poca probabilidad de lesión en columna cervical.

Comenzamos a contemplar la opción # 2. Un análisis más elaborado nos mostró que era una maniobra muy difícil y tardada ya que requeria de apuntalamientos, por lo que comenzamos a considerar la opción # 3. Hilda se ofreció a bajar el pozo pero aunque delgada, definitivamente no cabría. Un joven familiar se ofreció de voluntario pero las medidas de su cuerpo no le permitirían el acceso. En el lugar se encontraban pendientes de las maniobras la mamá, un tío y hermanos del niño. Precisamente un hermano del niño presentaba las medidas ideales pero contaba con tan sólo 11 anos de edad. El tío dijo estar de acuerdo en hacer el intento y -al no haber otra opción de momento- realizamos un simulacro en un árbol cercano. Se simuló la posición que tendría y las maniobras que debería de realizar con los pies del niño. El simulacro resultó bien y decidimos hacer una prueba previa, introduciendo al niño tan solo 2 m para ver su reacción. Resultó como esperábamos... el niño comenzó a inquietarse y a sentirse mal debido a la posición. Finalmente concluimos que era una mala idea.

En ese momento pensábamos que la opción de bajar a alguien era viable siempre y cuando contáramos con la persona que tuviese las medidas que le permitirían introducirse al tubo y que además tuviese la confianza y seguridad que solamente el trabajo en equipo genera.

En primer lugar pensamos en Ricardo Sierra Rivera, alumno de la escuela de paramédicos y miembro activo de la Sección de EspeleoSocorro de Cruz Roja. El es muy delgado, de hecho en San Luis Potosí lo conocemos como "El mantis" (por aquello de "mantis religiosa"), pero concluimos que tampoco cabría. Así es que pensamos en "Coquito' hermana del "mantis" ya que ella se caracterizaba en la sección por la facilidad que tenia de pasar por lugares muy estrechos. Además contaba con la experiencia en el manejo de cuerdas y tenia la seguridad y confianza en sus compañeros debido a su trabajo en equipo en la sección de EspeleoSocorro.

Nota: Insisto mucho en la seguridad y confianza en el grupo, ya que al estar en posición invertida durante mucho tiempo, esta falta de elementos podría generarle problemas de estrés y sentimientos de inseguridad y tal vez de claustrofobia. Esto sucede a menudo con aquellos que por primera vez utilizan equipos de respiración de aire auto contenido SCUBA.

En base a esto decidimos solicitar la presencia de "Coquito" en el lugar, por lo que mediante el radio de la ambulancia nos comunicamos con "el Chupón" para que personal de guardia fuese a buscarla a su domicilio y ver su disponibilidad (afortunadamente acababa de llegar de Chile de asuntos relacionados con su trabajo en la Secretaria de Ecología).

Eran aproximadamente las 22:00 horas cuando una ambulancia de CRM la recogió en su domicilio y la trasladó al lugar del accidente. En Cruz Roja se encontraban en stand-by Ricardo Zaragoza Trejo, Omar Carrizalez Varela, Eduardo Ramírez Martínez y Ricardo Sierra Rivera, todos ellos elementos de EspeleoSocorro. Mientras tanto, continuábamos trabajando con la opción # 1. Todo este tiempo Adolfo se mantenia atento pero un poco retirado de las maniobras.

A las 24:00 horas la ambulancia que traía a "Coquito" arribó al lugar del accidente e hicimos una reunión para plantearle nuestro plan. Observó el lugar, lo pensó por unos breves instantes y accedió. Inmediatamente Castañeda y yo preparamos el lugar para crear un sistema de descenso. En tanto Tino simuló las maniobras en el árbol cercano, poniendo especial énfasis en los anclajes de los pies para que no fuesen a lastimar a "Coquito".

En tanto Castañeda hizo un anclaje para regular el descenso con una cuerda de 110 m y con un 6-Brake Bar Rack que facilitó Tino (ya que a mi se me olvidó sobre el escritorio al momento de empaquetar el equipo) y Mague facilitó un Edge Roller. "Coquito" estaba asegurada a los pies en el área del tobillo mediante una cinta tubular de 1" pero además llevaba dos respaldos, uno en el arnés de cintura y otro más en el arnés de pecho. Llevaba además una lámpara frontal TIKKA. Tino había elaborado un sistema de anclaje para los pies del niño utilizando una cuerda estática de 9 mm con cordino de 7 mm en el extremo y esta cuerda ya se había bajado y se encontraba al nivel del niño. Entre elementos de bomberos y PSyV levantaron a "Coquito" y procedimos a bajarla lentamente con el auxilio de una cuerda. Un problema que anticipábamos era la comunicación, ya que al estar el pozo libre podíamos oír perfectamente al niño, pero al encontrarse "Coquito" en el pozo quizás podría obstruir las señales sonoras. Por lo tanto convenimos en tres sistemas de comunicación: el primero consistía en comunicación verbal fundamentalmente. El acuerdo consistía en establecer comunicación cada marca de soldadura de unión del tubo, esto es cada 2 m y además era de que en cualquier momento que ella se sintiera mal, nos lo comunicara e inmediatamente procederíamos a su extracción; el segundo era un código de señales con la cuerda; el tercero consistía en un mosquetón que amarramos a su muñeca para que en caso de no poder hablar ni mover la cuerda, golpeara el tubo y podríamos saber de su condición.

Las maniobras de descenso duraron aproximadamente 20 min. Afortunadamente la comunicación verbal fue excelente. Nos comunicó que no podía llegar al niño debido a un tronco que se encontraba obstruyendo el paso. Informó lo siguiente: "Toño, el niño está en muy mala posición... no mueve sus brazos y no puedo verle la cara... está en muy mala posición..."...

Lo más que podía hacer era tocar los dedos de los pies del niño. Intentó sujetar sus pies con los nudos y procedimos a sacarla. En este momento dejo a cargo a Hilda para dirigir las maniobras de recuperación de "Coquito" y me retiro para descansar y fumar un cigarro... pero Mague no me lo permite diciéndome: En este momento no fumas ni madres... lo más importante es sacar a "Coco"... 20 min después estaba fuera. Jalamos la cuerda de 9 mm y... el nudo se había safado nuevamente, aunque se trajo la camisa del niño. Hay que mencionar que el niño estaba muy inquieto y movía mucho los pies, lo que seguramente ocasionó que se safara y debido además a que "Coquito" no alcanzaba al niño. El sistema al que se recurrió para extraerla era un simple 1:1 ya que requeríamos tener sensibilidad en la cuerda para sospechar o detectar bloqueos en el ascenso. De lo contrario, si "Coquito" se llegase a atorar, resultaría difícil darnos cuenta con un sistema de ventaja mecánica mayor, lo que podría generarle lesiones. Mague se acerca y me dice: ahora si... "Coquito" ya salió... fúmate los que quieras...

Al percatarnos de que el nudo se había safado nuevamente, en el lugar se generó de manera momentánea un clima de fracaso... Tino dijo: "... Pues bien... hay que buscar otra manera de hacerlo...". En ese momento me percato de que una señora anda repartiendo café caliente a los participantes. Me dirijo hacia ella, tomo dos vasos y regreso con "Coquito" le ofrezco uno y le digo: ¿Ton's que... va de nuez?, después de un buen descanso claro... y me contesta: Órale, pero sólo después de un buen descanso. En tanto le informo a David y a Tino para que mientras "Coquito" descansaba en la ambulancia procediéramos a intentar de nueva cuenta la opción # 1 que volvió a fallar. A esta hora, el cansancio debido a la actividad de los dos días anteriores comienza a hacer de las suyas por lo que Mayra -quien además no traía sweater- se retira a la ambulancia a descansar y a intentar calentarse un poco. La temperatura en ese momento era de 4ºC y además hacia un poco de viento ya que estábamos en campo abierto.

Aproximadamente 45 min después, comenzamos a preparar nuevamente el sistema de descenso. En esta ocasión, David propone crear un tripié con una escalera de bomberos para crear un acceso más eficaz. Acerca uno de sus vehículos, apoya la escalera y la sostiene mediante unos tensores. Colocamos una polea doble e introducimos las cuerdas. Una de 11 mm para "Coquito" y otra de 9 mm para el niño. La cuerda de "Coquito" estaba anclada en la base de un árbol cercano controlada por Castañeda mediante un U-Rack de aluminio. En esta ocasión, colocamos vendas en las piernas de "Coquito", ya que en el intento previo, el nudo de la cinta le molestó un poco.

Ya que en la ocasión anterior el problema que se había presentado era el no poder alcanzar los pies del niño, Castañeda sugirió armar un accesorio similar al usado para sujetar perros a distancia. El Profe dió indicaciones para que gente de PSyV fuese a Villa de Arista a conseguir 2 pedazos de tubo PVC y 60 m de cable eléctrico. Castañeda armó dos accesorios (uno para cada pie) y se bajaron a la altura del niño mediante una cuerda de 9 mm, misma que se usaría para recuperarlo. Además se bajó un foco que tendría dos objetivos, iluminar la zona para facilitar las maniobras y calentar al niño.

Es importante mencionar que nunca se consideró la opción de que "Coquito" sujetara al niño con sus manos para sacarlo directamente ya que esta maniobra presentaría serios riesgos. Si "Coquito" se atoraba la única posibilidad que tenia para salir era soltar al niño, además existía el riesgo de que éste se le resbalara. El plan consistía en sujetar al niño con el cordino y sacarlo asegurado con una cuerda.

Teniendo todo preparado Tino procede a sujetar los pies de "Coquito" y al terminar de hacerlo realiza una inspección del amarre. Al no estar convencido procede a realizarlo nuevamente. Satisfecho del aseguramiento, Castañeda y Mayra le colocan dos anclajes más de respaldo. Le proporcionamos otra lámpara ya que la TIKKA se le había caído en el intento previo. Entre 3 elementos de PSyV proceden a izarla y colocarla en posición invertida para bajarla, mientras Castañeda controla el descenso. Yo me retiro un poco mientras Tino dirige las maniobras manteniendo comunicación constante con "Coquito". Como a los 5 minutos de comenzar el descenso "Coquito" comienza a gritar: ¿Toño?... ¿Dónde está Toño?... por lo que nuevamente tomo mi posición coordinando las maniobras de descenso.

Mientras tanto los elementos de PSyV y del H. Cuerpo de Bomberos y PC apoyaban con las cuerdas y con los generadores de electricidad que alumbraban toda la zona. Sin el auxilio de estos generadores, las maniobras de rescate se hubiesen complicado mucho más. Hilda y Mayra seguían abasteciendo del equipo que se requería.

Parte 2
X-Camp X-Mountain X-Bike Espeleología Supervivencia Ocasional Galería de Fotos

Luege Xpedition ©