Site hosted by Angelfire.com: Build your free website today!

 

Amor Real

Capitulo 87º

Capitulo 87.

Por: Maria Elena Venant

Amor Real ¡Solo quedan 7 capítulos!

CASA PIQUET Renato regaña a su mujer por su temeridad. Teme que Ramón intente vengarse de Jana
“No van a matar a todos los que le estorban” dice Papillon

MANSION PEÑALVERT Augusta tiene dudas sobre si su hija debe continuar con su marido. A pesar de todo, ahora su yerno es un guerrillero. Pru se molesta con su hermana, pero Humberto apoya a su madre. Manuel es un traidor, y a los traidores les confiscan los bienes. Pru dice que al menos si se reconoce a Manuel como un Fuentes Guerra, Mati estará legalmente casada y Manuelito tendrá un apellido
“El apellido de un bandolero” dice Augusta despectiva

HOTEL IMPERIAL De regreso de la cárcel, Antonia se ha bañado y puesto el camisón, cuando siente que golpean. A través de la puerta Sixto le dice que sólo quiere saber si está bien. Toñita lo hace pasar a pesar de que él le dice que no es correcto El abogado le dice (eso es curioso, Sixto es abogado, pero nunca se refieren a él como tal) que le mandó un recado a Damiana para tranquilizarla
“En el fondo me quiere” reconoce la Urraquita. Sixto le dice que va a instalar su bufete en Ciudad Trinidad Antonia le dice que necesita empleo
“¿Empleo de esposa?”
“Es un poco pronto “dice Toñita turbada
“Esperaré” dice Sixto besándole la mano La cámara enfoca el espejo donde se refleja la expresión preocupada de Antonia.

CAMPAMENTO Manuel despierta y encuentra la carta de su esposa
“Ya una vez te creí muerto, no quiero volver a pasar por lo mismo” dice la carta “Cuídate y manda por mi lo más pronto posible”
Agitado, Manuel se levanta y sale de la tienda, despierta a Lorenzo y a Silvano. Ensillan los caballos y van tras Matilde

Más abajo viene la tropa. Adolfo hace que desmonten sus hombres. Seguirán a pie. Se separan en tres grupos.

En el bosque ya amaneció y se ve avanzar a una Matilde muy cansada. Su chal se le engancha en un árbol. Al tirar, se desprende un jirón. Sigue.

Al rato llegan los guerrilleros y encuentran el trozo del vestido. Fuentes Guerra lo reconoce. Es de su esposa

La tropa ve a los guerrilleros. Comienza un tiroteo. De pronto en medio de los balazos aparece Matilde brincando como pulga y más confundida que la India María. Manuel la ve y grita su nombre. Va a correr tras de ella, pero Silvano muy ágil lo golpea en la cabeza con la cacha de la pistola dejándolo knock out. Adolfo reconoce a Matilde y ordena que no disparen. Pero siguen los balazos. Lorenzo es herido. Mati cae al suelo. Cesan los disparos. Adolfo llega donde Mati. Le pregunta si está bien
“No sé, No sé” responde la atolondrada. El Corondel Solís la carga sobre un hombro como un saco de papas y se la lleva hasta donde están los caballos.

Manuel recobra la conciencia
“¿Y Matilde?” Silvano le tapa la boca para que no lo escuchen los soldados. Matilde comienza a interrogar a Adolfo
“Contéstame. No me has contestado. ¿Lo mataste?”
“No sé” dice Solís. Matilde comienza a suplicarle que deje a Manuel en paz. Incluso se hinca
“No me hagas esto” le dice Adolfo incomodo. Matilde le cuenta que escapó precisamente para no exponer la vida de su esposo

Aprovechando que los soldados se alejan, Manuel vuelve a preguntar por su mujer. Silvano le miente para tranquilizarlo. Matilde se fue con los soldados. Iba bien y no estaba herida. Manuel pregunta si se la llevó Solís. Silvano le dice que no.
“Van a llevarla a Ciudad Trinidad ¿No era eso lo que querías?

Adolfo reúne a su tropa pero falta el Sargento Jesús (el espía de Benítez) Se ve a los guerrilleros alejarse y a Jesús espiándolos tras los árboles..

Adolfo y Matilde llegan hasta una hacienda abandonada. El la lleva adentro e intenta limpiarle una herida que se ha hecho en la cabeza. Ella le quita el paño
“Yo lo hago”
“Es evidente que Manuel no murió en el accidente de coche” Mati le confirma que Manuel y Rosario sobrevivieron al accidente
“¿Puedo preguntarte que ha pasado desde la noche de la fiesta?
“Ha pasado que Manuel no está muerto y es mi esposo”
Enojado, Adolfo le recuerda que no están casados. Matilde (y eso era lo que temía Amadeo) comienza a dar información Se han enterado del regreso del Padre Urbano. Adolfo salta, los guerrilleros tiene contactos en Ciudad Trinidad. ¿Quiénes son?
“No te lo voy a decir” dice Matilde (A ver si le dice eso a Benítez)
“Yo quiero a Manuel”
“¿Qué vida te espera al lado de él?” Mati se pone histérica grita. Dice que Adolfo no entiende
“Sé muy bien lo que es amar” dice Adolfo dolido
Mati le pide perdón. Llega Delfino necesita hablar con Adolfo. Matilde se interpone y pregunta si es algo de Manuel. Defino respetuoso le dice que no.
Delfino le da el parte a su Coronel. Solo tienen un herido, pero Jesús desapareció

EL CASCO Los guerrilleros regresan a su refugio. Lorenzo esta herido, pero no es de gravedad. Silvano le suplica que no lo desmienta antes de Manuel. Que no le diga que Mati se fue con el Coronel.
“Esa vieja le entró hondo” dice Lorenzo

HACIENDA ABANDONADA Delfino le dice a su Coronel que están cerca del refugio de los guerrilleros, pero Adolfo titubea, Su ordenanza se enoja
“No puedes hacerte guaje (acobardarse) Ordenaste la retirada cuando estábamos ganando ¿Qué te pasa?

Adolfo vuelve donde Matilde. Esta se da cuenta que van en busca de Manuel
“Es mi deber” le dice Solís
Matilde llora

El Casco Se ve a Jesús merodeando

HOTEL IMPERIAL Damiana viene a ver a su reina. Se abrazan. La urraca le dice que Marie la mira con desconfianza y por eso no se atreve a salir. Van al comedor donde comentan la acusación de la francesa. Obviamente a Marie le dio tanto miedo de que la Urraquita mencionase la existencia de la “otra Marie” que buscó aislar a Antonia en la cárcel. A Antonia se le curre que en la carta de la OM esta la clave y le pide a su Nana que la busque y se la traiga. Damiana se acobarda. Antonia le recuerda que ya se abrió el proceso, pero la Urraca teme al poder de Ramón
“Hasta los poderosos caen” sentencia Toñita y entonces acusarán a Damiana de cómplice d Yves y Marie.

CASA DE JOSEFINA Esta juega al Aserrín/Azerran con su ahijado. Llega Humberto. Hace que se lleven al gato (tan bello el gato de Josefina) y que Pascuala saque a pasear a Manuelito. A solas le dice a su mujer que teme que el testimonio del Padre Urbano no haya sido suficiente. A Finita solo se le ocurre una solución. Acusar a Ramón y a su camarilla
“Le prometí a Renato”
“Me importa un pito Renato” grita Josefina “Se trata de nuestra familia”

El Juez Aureliano habla con el Gobernador. Ambos creen que Joaquín reveló en confesión a Urbano que Manuel era su hijo, pero la ley es la ley.

Se ve a Urbano rezando. Pidiéndole a D-s que haga algo porque no solo sufre Manuel, sino también Matilde y su hijo.

EL CASCO Llegan los soldados no encuentran ni a los guerrilleros n al Jesús. Por los excrementos de caballo deducen que el campamento se levantó el día anterior

LAS CRUCES Llegan Manuel, Silvano y Lorenzo al campamento rebelde.

HACIENDA ABANDONADA Adolfo regresa con las manos vacías. Matilde lo acosa con preguntas. Le pide que deje en paz a Manuel
“Le han quitado todo. Lo han acorralado como una fiera”
Adolfo esta exasperado.Como es posible que esté obsesionada con un hombre que la violó, que los ha cubierto de vergüenza.
Matilde enojada le dice que Manuel no es un bruto Esto molesta más a Adolfo. Dice que su error ha sido ser demasiado blando con Matilde. Ella ha confundido decencia con falta de hombría. Ahora la tratara como a ella le gusta que la traten. De un empujón la tira sobre un montón de paja Se le tira encima. Mati grita que la suelte. Adolfo comienza a manosearla
“Te juro que después los dejo en paz. Déjame algún recuerdo para llevarme a la tumba (Adolfo esta conciente que va a morir) Matilde sigue gritando y empujándolo
“Va a ser un secreto. Concedeme este regalo”
Golpean la puerta. Adolfo enardecido no les hace caso
“Un despacho urgente. Saavedra en manos de los rebeldes”
Adolfo se para. Matilde lo mira con rencor.

Afuera, Solís se entera del triunfo rebelde, ordena reunirse para regresar a Trinidad
“¿Y la guerrilla?”
Esa no es mi prioridad
Defino lo mira. Lo ve atribulado
“¿Qué pasó?”
“Nada

LAS CRUCES Informan a Corona que a Matilde se la llevó Solís. Manuel le dice a su madre que hubiese preferido dejar a Matilde en casa de su madre

HACIENDA ABANDONADA Adolfo regresa a donde dejó a Matilde. Esta ha huido por la ventana disfrazada de hombre. Quiere ir tras ella, pero Delfino le dice que tiene que regresar a Trinidad.

Se ve a Matilde corriendo por el monte

LAS CRUCES Manuel no puede dormir. Se le acerca su madre Su hijo le dice que ha recapacitado y se da cuenta que Matilde no tuvo la culpa de su compromiso con Solís. Rosario le recuerda que las mujeres como Mati son como pajaritos, crecen en jaulas de oro, dominadas por familiares que no las dejan respirar
“No es fácil la vida de una mujer”
“Y la tuya tampoco lo fue” reconoce su hijo
“Ahorita estoy contenta porque estamos juntos”
“Yo también” dice Manuel

Al día siguiente, Matilde despierta en el bosque

TRINIDAD Se ve a Adolfo uniformado llegar donde el Gobernador. Ramón lo ataja
“¿Encontró a Doña Matilde?”
“No”
“¿Y tampoco dio con los bandoleros?”
“Tampoco” responda irritado el Coronel

CASA PIQUET Humberto intenta convencer a Renato que al menos acuse a Yves, pero su amigo sabe que Santibáñez delatara a Ramón
“Escúchate” dice enojado Greñaldo “Me parece injusto que por proteger a tu hermana friegues a la mía” (Fregar parece que era mala palabra pirque Humberto pide disculpas a Jana que dice que ha oído cosas peores)
“¿Opinas igual que Humberto, Papillon?” Le pregunta Renato
Su mujer le recuerda que se cometió un delito y que al no hablar, el único que ganará será Ramón

COMANDANCIA Ramón le dice que Solís no consiguió nada. Benítez le dice que el Sargento Jesús no regresó con la tropa.

Matilde sigue perdida. Va por un prado que se parece el que lleva al País de Oz. Se la ve agotada y sedienta

MANSION PEÑALVERT Urbano visita a Augusta. Discuten el hecho de que el Juez dilata su dictamen. Augusta esta convencida de que Rosario mintió. Urbano se enoja. En eso llega el coronel Solís. Les cuenta que encontró a Matilde, pero OH sorpresa, se volvió a ir. Para salir de paso, Adolfo les cuenta que Mati estaba huyendo de Manuel. Pru brinca. Eso no es posible, puesto que en su carta, Matilde parecía estar contenta junto a su marido. Adolfo se agita. Exige ver la carta. Urbano harto de las torpes explicaciones del Coronel se la niega.