El 13 de mayo la administración municipal de Istmina tomó la decisión, mediante acto administrativo, de prohibir el servicio de transporte urbano en motocicleta. Dicha medida ha creado malestar no solo entre las personas que se dedican a esa actividad, sino a mucha gente que utiliza ese servicio, toda vez que en la ciudad de Istmina el servicio urbano prestado por algunos vehículos, entre ellos una buseta y media docena de taxis, no alcanzan a satisfacer la demanda de la ciudadanía, precariedad que es suplida por las motos, que inclusive se desplazan a sitios donde no entran carros, por solo mil pesos. Lo peor del caso es que esa actividad es utilizada como medio de subsistencia de muchas familias, que ahora no tendrán la posibilidad de llevar algún sustento a sus casas.

Los habitantes de los pueblos del Alto San Juan, como Guarato, Mumbú, Jingarabá, Marmolejo, etc., que por motivos de violencia en la zona habían abandonado sus parcelas y lugar de residencia hace varios años, ubicándose en otros sitios, en Santa Cecilia y Pueblo Rico, en Risaralda, regresan con la ayuda del gobierno a sus lugares de origen el pasado 29 de mayo, garantizándoles seguridad y ayuda real para rehacer sus parcelas de donde dependían sus actividades productivas. Se dice que colaborarán en el retorno entidades como la Red de Solidaridad, Bienestar Familiar, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría y el municipio de Tadó. Ojalá toda esta colaboración no sea solo para el retorno, sino permanente, pues de nada sirve que después se les abandone a su propia suerte.

Las comunidades del sur del municipio de Unión Panamericana, con la colaboración de la Registraduría Municipal, escogerán mediante el voto popular, el candidato único a la alcaldía de ese municipio, el domingo 30 de mayo, entre las 8 a.m., y a las 4 p.m.

Los candidatos que llegan a esta instancia son dos, el abogado Nerlis Perea Flórez, con el número uno en el tarjetón y representa al Plan de Raspadura y el educador Ulbio Murray Córdoba, distinguido con el número dos en el tarjetón y representa al corregimiento de San Rafael El Dos. La Registraduría asumirá la organización y control de la consulta, lo cual tiene tranquilo a los militantes de cada aspirante, a quienes exigen respetar el resultado, sea cual fuere el veredicto de la comunidad, que es el poder de la democracia. Por su parte se pide a los pueblos del sur como San Pablo, Quiadó, El Dos, Raspadura etc., total participación en la consulta.