DIEGO DE TORRES Y VILLARROEL
(1693-1770)
PAGO QUE DA EL MUNDO A LOS POETAS.
Dícese de Quevedo que fue claro,
y que en algunas coplas era obsceno;
Góngora puede ser que fuese bueno,
pero ya sus comentos le hacen raro.
El Calderón, que nos lo venden caro,
sólo de lo amatorio fue muy lleno,
y nos dejó en la cómica un veneno
que nos hemos bebido sin reparo.
La idea de Juan Pérez fue abatida,
de Solís intrincada, ¡infeliz suerte!
¡Oh, ciencia pobre! ¡Facultad perdida!
¡Mundo borracho, que al varón más fuerte
después de ajarlo, miserable, en vida,
predicas estas honras en la muerte!
CONFUSIÓN Y VICIOS DE LA CORTE.
Mulas, médicos, sastres y letrados
corriendo por las calles a millones,
duques, lacayos, damas y soplones,
todos sin distinción arrebujados.
Gran chusma de hidalguillos tolerados,
cuyo examen lo hicieron los doblones,
y un pegujal de diablos comadrones,
que le tientan la honra a los casados;
arrendadores mil por excelencia,
metidos a señores los piojosos,
todo vicio con nombre de decencia,
es burdel de holgazanes y de ociosos,
donde hay libertad suma de conciencia
para idiotas, malsines y tramposos.
DESCRIPCIÓN DE ALGUNAS COSAS
DE LA CORTE.
Pasa en un coche un pobre ganapán,
mintiendo ejecutorias en su tren;
pasa un arrendador, que en un vaivén
se nos vuelve a quedar parafustrán.
Pasa después un grande tamborián,
llevando la carroña tren con tren,
y pasa un simple médico también
parando el coche por cualquier zaguán.
Pasa un gran bestia puesto en un rocín,
pasa como abstinente el que es ladrón,
pasa haciéndose docto un matachín.
Todo es mentira, todo confusión;
yo me río de todo, porque al fin
los toros estoy viendo en mi balcón.
EL PRESENTE SIGLO
Vale más de este siglo media hora
que dos mil del pasado y venidero,
pues el letrado, relator, barbero,
¿cuándo trajeron coche sino ahora?
¿Cuándo fue la ramera tan señora?
¿Cuándo vistió galones el cochero?
¿Cuándo bordados de oro el zapatero?;
hasta los hierros este siglo dora;
¿cuándo tuvo la corte más lozanos
coches, carrozas, trajes tan costosos,
más músicos franceses e italianos?
Todo es riqueza y gustos poderosos,
pues no tienen razón los cortesanos,
porque ahora se quejan de viciosos.
La Palestra de Euterpe.